- Son molestas, brujas de baja categoría. - Hablaba altaneramente la bruja de pelo naranja.

Maestra Ursula: Te estamos deteniendo aquí, eso es algo positivo para una brujas "de baja categoría".

Camile: Señorita Du Nord, resulto ser mas que una simple ladrona de magia - Contesto haciendo que Chariot se sorprenda - Oh, cree que no la conozco, huelo su sucia esencia desde este lugar, una asquerosa bruja que no hacia mas que entretener a las personas. Un completo desperdicio de talento.

Maestra Croix: Ya cállate maldita loca, ¿Que quieres con esto?.

Camile: Quiero algo simple señorita Meridies, paz.

Maestra Ursula: Mientes, la paz no se alcanza de esta manera, atacando y destruyendo una escuela.

Camile: Oh, es verdad, la paz se alcanza con tratados y con brujas sumidas al simple acto de existir en las sombras, con el temor de salir a la luz.

Maestra Ursula: La magia es adorada y querida en este mundo.

Camile: ¿Te mientes a ti misma Du Nord?. Tu lo has visto, la gente normal no hace mas que temer, vernos raro, somos monstruos para ellos, criaturas anti naturales. Yo quiero cambiar eso, quiero llevar a la magia otra vez a su punto de esplendor máximo.

Maestra Finnelan: ¿Liberando todo la magia de la ley line?.

Camile:  No, ese es solo el primer paso, ¿saben que es esto? - Apuntando una extraña rama hacia las maestras - veo que la conoce maestra Finnelan - Continuo al ver que la mayor miraba sorprendida – Si, es mi varita, me la quitaron, me desterraron, se rieron de mi, pero ahora, yo cumpliré el sueño de mi madre, la magia será grande otra vez como ella deseaba.

Maestra Finnelan: Esa varita estaba al cuidado de la directora.

Camile: Si, pero ahora que no esta, es toda mía y gracias a ella, puedo usar mi magia otra vez.

Maestra Croix: Sin magia no podrás hacer nada, si no detienes tu hechizo, toda la magia se irá. - respondió furiosa la pelimorada.

Maestra Finnelan: Si puede - La pelimorada y la pelirroja miraron extrañadas a la mayor -  Esa no es solo una varita, es un catalizador, una rama de Yggdrasil, la señorita Leomord no necesita de una piedra filosofal para poder hacer magia. Esa varita estaba al cuidado de Miranda, ella la llevaba consigo siempre, protegiéndola, por eso la ataco.

Maestra Ursula: Quieres decir que ella puede....

Camile: Si, yo genero mi propia magia, ¿Suena poético no?.

Maestra Finnelan: Su madre y directora de este establecimiento se dio cuenta de su habilidad de pequeña, intento guiarla en esta academia, pero mientras mas aprendía, mas incontrolable se hacia su poder, tomo una difícil decisión, maldijo a su propia hija, le quito el control de su magia y lo confino en esa varita, sin varita, ella no podía usar su magia, pero ahora...

Camile: ¡La maldición se ha roto!. Y solo necesite manipular a un tonto político con aires de grandeza para que me trajera aquí.

La risa de la bruja pelinaranja inundaban lo que quedaba del salón, mientras un aura verde la comenzaba a rodear.

Maestra Ursula: ¿Que haremos Croix?.

Maestra Croix: De-Debemos sellarla, debemos confinarla en algún lugar, antes de que no quede magia para nosotras.

Maestra Finnelan: Primero debemos tomar su varita.

Maestra Ursula: Maestra Finnelan, cuanto tiempo le llevara terminar un conjuro para sellarla.

Maestra Finnelan: Con suerte, una hora.

Maestra Ursula: Le daremos el tiempo que necesita.

Maestra Finnelan: Deben de quitarle la varita, si no, no funcionara, su magia en este momento es mas fuerte que la de Miranda y por ende, la nuestra.

Maestra Croix: Lo haremos, confié en nosotras.

Camile: Oigan, basta de cuchicheo, sea lo que sea que tramen les advierto que no funcionara.

Maestra Croix: Que pasa vieja bruja ¿Tienes miedo?.

Camile: No soy una vieja. – Grito molesta la pelinaranja.

Maestra Ursula: Bueno, tienes mas de cien años, eso te hace vieja.

Camile: !Ahhhhhhh cállense idiotas!. – Grito con furia lanzando escombros con su magia.

Ursula reacciono rápido creando un escudo y Croix devolvió el ataque lanzando un rayo desde su unidad, pero sin poder golpearla.

Maestra Croix: Esto será difícil Chariot.






¡Padre! ¡Padre! Despierta, debemos irnos - El joven Szumer intentaba con todas sus fuerzas despertar a su progenitor en uno de los pasillos de la Academia.

- Señor debemos irnos, aprovechemos el caos para salir, enjuiciaran a su padre por lo que hizo - hablaba preocupado uno de los guardaespaldas. – Le disparó a la directora de la academia, en frente de políticos, gente de prensa, incluso en frente de sus alumnas.

Alexander: Levántalo, parece que lo le hizo esa bruja lo dejo inconsciente – ordeno molesto el joven – Esas brujas tienen la culpa, ellas lo llevaron a hacer esto.

- ¿A donde creen que van? - Grito furiosa la joven Avery - Ustedes atacaron a la directora, no se irán de aquí.

Alexander: Llévate a mi padre de aquí, yo las distraeré - Ordeno el joven mientras arrojaba escombros a la brujita y tomo el arma que su padre traía.

La pelimorada tuvo que dar un salto para evitar ser golpeada, perdiendo de vista al mayor y al hombre de traje.

Avery: ¡Idiota pudiste matarme!.

Alexander: Bruja estúpida, sígueme si quieres atraparme.

Avery: ¡Ughh ya veras! – Grito mientras seguía sus pasos.

- ¡Avery espera! – la llamo desesperada Blair.

- Que hacemos es peligroso seguir aquí, ya escuchaste a la maestra Lukic – Decía preocupada Mary.

Blair: No voy a dejar sola a Avery. Tu sigue al guardaespaldas yo iré tras Avery.

Mary: Pero Blair es peligroso.

Blair: Avery lo haría por mi. Iré a ayudarla.

Mary: Ten cuidado Blair

El primer pasoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora