LXII: Un vestido y Un amor (Parte III)

1.2K 81 60
                                    

Jazmín no podía estar más nerviosa. Había planeado todo con tanto detalle, con tanto entusiasmo, con tanto amor, que jamás se detuvo a pensar siquiera en lo que pasaría al final de la noche. Ese eterno momento, en el que sentada sobre una manta bajo el árbol que las había abrazado un tiempo atrás, esperaba la llegada de su chica se había cargado de miedos. Confiaba cien por cien en el amor que la morocha le profesaba pero... y si estaba yendo demasiado a prisa? Si Flor en cambio, necesitaba más tiempo? Tantas preguntas sin respuestas dieron vueltas por su cabeza en aquellos minutos de implacable ansiedad que al final temió lo peor. Sin embargo un mensaje de Lucía la quitó por completo de aquel trance en el que se hallaba sumergida.

Está pidiendo el deseo. ¡SUERTE! Acá las esperamos con la segunda parte de la sorpresa. Aquel mensaje no hizo más que traerla de nuevo a la realidad.

Inmediatamente una cálida brisa trajo hacia ella un dulce perfume que la embriagó por completo y supo que era el momento justo. Tomó la guitarra que descansaba sobre el césped, a su lado, y comenzó a tocar los primeros acordes de aquella melodía que alguna vez las reencontró.

Te vi juntabas margaritas del mantel
Ya sé que te trate bastante mal
No sé si eras un ángel o un rubí 
O simplemente te vi

Unos pasos parecían acercarse más y más a ella y de pronto... como un ángel caído del cielo, la morocha asomó su rostro confundido y enamorado de entre las flores y la miró directamente a los ojos

Te vi, saliste entre la gente a saludar
Los astros se rieron otra vez, la llave de mandala se quebró 
O simplemente te vi
Todo lo que diga está de más
Las luces siempre encienden en el alma 
Y cuando me pierdo en la ciudad, vos ya sabés comprender
Es solo un rato no mas, tendría que llorar o salir a matar
Te vi, te vi, te vi yo no buscaba nadie y te vi

La conexión había sido instantánea. Florencia la miraba emocionada. Los ojos se le habían inundado ante aquel escenario que parecía más un sueño que una realidad. No sabía a ciencia cierta lo que pasaba, pero estaba segura, lo sentía desde lo más profundo de sus entrañas, que con Jazmín a su lado, cantándole canciones de amor... aquella no podría haber sido una noche más perfecta y soñada

Te vi fumabas unos chinos en Madrid

Sé que hay cosas que te ayudan a vivir

No hacías otra cosa que escribir
Y yo simplemente te vi
Me fui. Me voy de vez en cuando a algún lugar
 Ya sé. No te hace gracia este país
Tenias un vestido y un amor
yo simplemente te vi
Todo lo que diga está de más
Las luces siempre encienden en el alma
Y cuando me pierdo en la ciudad
vos ya sabés comprender.
Es solo un rato, no más
Tendría que llorar o salir a matar
Te vi, te vi, te vi
yo no buscaba a nadie y te vi

Casi sin poder creerlo, la morocha la miraba con los ojos empañados y con una sonrisa enorme que brotaba desde su interior de la forma más genuina y cálida posible. Jazmín, por su parte, se desprendió de aquel instrumento y caminó a su encuentro al tiempo que sonreía conjugando en la comisura de sus labios, una mezcla de nerviosismo y amor hacia aquella mujer que tantos sentimientos despertaba en ella.

Una vez que sus cuerpos se encontraron tan cerca, que el aroma de una se confundía con el aroma de la otra, la morocha decidió romper con aquel cálido silencio que las tenía levitando en un instante tan dulce como perfecto

¿Qué es todo esto? Preguntó al tiempo que se abrazaba al cuerpo de su amada

Esto, respondió la otra en un tono pausado y tranquilo, es la manera que encontré de decirte que desde el día que te conocí no dejo de pensar en vos, en tus ojitos lindos, en tus rulitos, en tu perfume...

Ay Jaz... suspiró antes de sentir que los labios de la pelirroja se pegaban a los suyos por primera vez en la noche

Desde que estás en mi vida Flor, todo se volvió tan perfecto como nuestra primera noche. Cuando el destino te trajo hacia mí, cuando me diste la chance de conocerte... cuando me enamoraste por completo y te declaraste dueña de mis días y de mis noches...

Pero no entiendo siguió hablando una morocha bastante confundida ¿y la fiesta? ¿Y mi hermana?

Todo es parte del plan confesó con una sonrisa pícara. Necesitaba tenerte conmigo esta noche y necesitaba que fuera acá... y si no armábamos todo esto, seguramente no ibas a querer venir

¿Y por qué acá? ¿Por qué hoy? Volvió a interrumpir

Ufff estás muy preguntona hoy bromeó la colorada mientras la tomaba de las manos y la llevaba hacia la manta que descansaba bajo el árbol. Una vez que se acomodaron, continuó. Quería que fuera acá porque este lugar tiene un significado muy importante para mí, de cierto modo nuestra historia de amor empezó acá, no? Flor ya no quería volver a interrumpir asi que sólo se dedicó a asentir. Bueno... Jazmín tomó aire para apaciguar ese nerviosismo tan evidente que hacía temblar su voz, siento que después de la charla que tuvimos hoy en donde dejamos en claro lo que cada una quería... se detuvo nuevamente

Ay! qué Jazmin? La apuraba una morocha bastante ansiosa Me estás poniendo nerviosa

Bueno... esperá volvió a suspirar tratando de relajarse. Que me quedé pensando en lo que me dijiste hoy a la mañana

Qué cosa? Volvió a preguntar

Eso de que... volvió a hacer una pausa, de ¿qué somos nosotras?

Ahá asintió con un pequeño movimiento de su cabeza que le indicaba a la otra que podía continuar

Y que aunque todavía no sé que somos... Sí sé lo que quiero que seamos...

¿Y qué querés que seamos? preguntó creyendo saber de lo que se trataba

TODO dijo remarcando cada una de las letras que formaban aquella palabra tan cargada de sentimientos

¿Y qué sería todo? Volvió a preguntar ansiosa. Jazmín tomó una caja marrón, que había colocado sobre la manta, al lado de la guitarra. Estaba decorada con flores, artesanalmente en sus lados y con frases pintadas sobre la tapa.

Todo sería esto, dijo mientras abría aquella hermosa caja y colocaba el primero de los paquetes en las manos de la morocha.

No entiendo, esbozó con clara desilusión en su rostro luego de abrir aquel presente. ¿Yo vendría a ser tu mascota o algo así? Preguntó confundida.

¿Ehh? ¿De qué hablas?

De este collar de perrito, respondió Florencia bastante molesta agitando el pequeño paquete en su mano. ¿Es una clase de broma o qué? Porque sinceramente no entiendo y menos, que tenga una chapita con mi nombre. ¿Es joda, no?

---------------------------

Bueno muchachada... acá les dejo el nuevo capi

No me odien eh? Si quieren matar a alguien, esa persona es @angyetoile  . Ella es la culpable de este final inesperado... 

Sigo escribiendo

Muackis para todas!

Cariños

Reynosita









Gusto De Vos |COMPLETA|Où les histoires vivent. Découvrez maintenant