Gusto De Vos |COMPLETA|

XIX: ¿Cenamos?

Flor? Pregunto Jazmín sorprendida.
Sorpreeeesa!! grito ella suavemente. 
Ambas se miraban con ternura. Ninguna se movía de su sitio. Se dedicaron a mirarse por varios minutos,  en silencio. Y descubrieron que esa chispa que se había encendido en ellas, la noche que se conocieron seguía ahí,  presente entre ambas. 

J: Que haces acá gorda? Dijo Jazmín bastante emocionada. Yo...  La morocha la interrumpió. 

F: Para...  Vos no me pensas saludar,  abrazar... nada?

J: Ay Siii!  Perdón,  se disculpó la pelirroja abalanzándose sobre ella para abrazarla fuerte.  No puedo creer que estes acá!  Le susurró entre lágrimas...  Que lindo es verte otra vez!  Ya casi no recordaba como era tu carita,  le dijo con mucha ternura mientras le acariciaba el rostro. 

F: Exageradaaa!  La interrumpió la otra,  tomándole las manos para abrazarla otra vez.

Las dos estaban tan nerviosas que aun no se habían dado cuenta que seguían paradas en la puerta de la habitación hasta que sintieron a alguien carraspear detrás suyo. Andrés las miraba con cariño y complicidad. 

A: Se puede saber que hacen en mi cuarto de hotel?  Pregunto haciendo una voz muy graciosa. Los tres reímos con aquella ocurrencia. Pasen che,  dejen de dar espectáculos en los pasillos, bromeó mientras nos empujaba hacia el interior.

J: Pará... vos tenes algo que ver con esto?

A: Yo? Vos estas loca nena... eso jamás rió a carcajadas

Jazmín lo abrazó tan fuerte que bien podría haber roto cada una de las costillas de su amigo. Luego depositó un beso con ruido en su mejilla y le susurró algo en el oído. Él simplemente sonrió Y asintió mientras miraba a Flor!

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No podía dejar de mirarla. Estaba tan linda en ese vestido blanco y  el cabello recogido. Tenía una sonrisa preciosa y sus ojos, ¡Ay Dios! esos ojos son el mismísimo paraíso... Decidí cortar con ese silencion que nos separaba.

J: Vos todavía no me dijiste que hacés acá, la interrogué. Recién hablamos por teléfono y no me dijiste nada, tramposa!!

F: Quería sorprenderte y si te decía que estaba acá no iba a ser sorpresa! sonrió recalcando lo obvio

J: Si, ya lo se... pero sigo sin entender Flor. Por qué viniste? ella me invitó a sentarme en el sillón, me tomó de las manos y me miró a los ojos

F: Mirá Jaz, yo sé que te lastimé mucho con lo que te dije anoche. Te juro que no lo hice con mala intensión. Si hay algo que nunca hubiese querido era lastimarte. Sé que sos tan buena que no lo vas a reconocer pero yo sé lo que dije y sé que me equivoqué. Por eso vine  hasta acá, para disculparme y para...

J: No Flor, no tenés que disculparte, la interrumpí. Fuiste sincera conmigo y eso para mi vale mucho. Además Andy me explicó que tenías razón, hay un montón de cosas que no hemos hecho juntas... Y que si estás de acuerdo podemos empezar a hacer cuando vuelva a Buenos Aires

F: Bueno, esa era la segunda parte de mi sorpresa. Después de que hablamos, me dí cuenta del error que había cometido y me quedé toda la noche pensando como solucionarlo. Y se me ocurrió una idea. Esperame acá, me dijo y se levantó para buscar algo en una cartera. Volvió con una nota y la puso en mis manos. Lee por favor, me pidió. Abrí aquella nota, que en realidad era una lista y la miré buscando una explicación. Esa lista, continuó, es de todas las cosas que siempre hago con las personas importantes para mi y ahora las quiero hacer con vos. Si te fijás bien, me señala el papel, lo primero es cenar asi que... bueno... Vine para cenar vos.  A esta altura yo no podía esconder mis lágrimas. 

J: Vos me estás diciendo, que viajaste hasta acá solamente para cenar conmigo? Casi no podía hablar de tan emocionada que estaba

F: Si, respondió con mucha timidez. Te molesta?

J: Vos me estas jodiendo Flor? Es lo más hermoso que alguien haya hecho por mi. Muchas gracias!! La abracé fuerte y pude sentir como su corazón latía con fuerza. Estás bien? le pregunté

F: Perdón, estoy muy nerviosa respondió con una mano en el pecho intentando respirar con normalidad. Nunca había hecho una cosa así.

J: Tranquila, yo estoy acá con vos si? Le dije tomándole la cara entre mis manos. Está todo bien Flopy, yo te quiero mucho... no tenés que estar nerviosa

F: No me mires así, por favor! me rogó con los ojos nublados 

J: Asi como?

F: Con esos ojitos tan lindos, confesó ruborizada. Le di un beso y me aparte.

J: Vamos a cenar? acá en el Hotel tienen un Restó re lindo, te va a gustar

F: No, esa es la otra parte de la sorpresa, me dijo, vamos a cenar en el balcón.

Me asomé y vi todo perfectamente adornado, con cientos de Jazmines y velas y en el medio, una mesita ya servida junto a un sillón.

Nos sentamos una al lado de la otra y nos dispusimos a pasar una linda noche... juntas.
Comimos, tomamos vinos,  reímos y charlamos. Y todo eso lo hicimos en demasía. Flor era una compañía hermosa. Por momentos la veía divertida y ocurrente y por momentos tímida y tierna. No podía dejar De mirarla. Esta mujer me va a volver loca,  pensé y no me estaba equivocando.

J: que querés que hagamos?  Le pregunte cuando terminamos la cena. Ya era tarde...  La hora se había pasado volando.

F: Yo...  Hizo una pausa,  debería pegarme una ducha y cambiarme porque tengo que tomar un avión, viste? Dijo como diciendo una obviedad

J: Como un avión?  Vos no te quedas? Pregunte confundida

F: No Jaz,  solo vine a cenar. Mañana tengo que trabajar.  No puedo quedarme... 

Con Andy la acompañamos al aeropuerto. Yo no quería que se fuera. Y por la tristeza que veía en sus ojos sospeché que ella tampoco quería irse...

F: Bueno, supongo que ya es hora de irme dijo mientras anunciaban el avión con destino a Buenos Aires. Nos vemos en unos días,  no? Me preguntó ansiosa

J: Claro que si,  hermosa. De todos modos te voy a escribir y a llamar cada vez que pueda si?  Vos hace lo mismo ok?

F: Chau Jaz!

J: Chau Flor!

Esta piba esta muerta por vos, me dijo Andy al oído. Yo solo Sonreí