Hermanos

Maldito sentido de desorientación

Como prometí. Presentando al personaje nombrado por el ganador del segundo lugar en la trivia @EdwardRevolorio. ¡FELICIDADES! 

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-Ok.... Claro, un elfo oscuro... ¿Esos no son como Dobby verdad?- pregunté

-También se llaman elfos nocturnos- me explico Laila

-¿Quién es Dobby?- pregunto Edwin

-¡Vamos! ¡Tienes que conocer a Dobby! Ya sabes, el elfo domestico ¡Dobby Malo!-

-No existen los elfos domésticos Miguel- dijo Laila

-¿Dobby Malo? Con ese nombre no lo quiero en mi casa- exclamo Edwin -¿Quién querria a un elfo malvado en casa?-

-No, lo que pasa es que...- Laila me interrumpió

-¿Podríamos dejar de hablar de ese elfo y concentrarnos en este?-

-¡Ah sí! ¿Entonces? Saltamos y nos lo cargamos ¿cierto?- pregunté algo nervioso y preparado para la pelea. Edwin me detuvo.

-¡No seas tonto! Con todos los nihil allí no podemos pelear. Tenemos que ponerlos a salvo primera, antes de que esto se ponga feo-

-A si, mantener el secreto y eso... Cha, se veía más fácil en los Hombres de Negro, ¿no podemos llegar, clavarle un par de flechas y después borrarles la memoria a los tipos de allá?-

-La mente es algo frágil Miguel, no alteramos recuerdos si no es necesario- aclaró Laila

-Laaaargoooo- dijo el gemelo malvado de Dobby -Fueeeraaaa- ordenó arrastrando las palabras

-Gentlemen, take this... man out of here- dijo el inglés a sus hombres.

Los cinco alzaron sus armas y avanzaron con cautela. Ya había entrenado lo suficiente en la Sede como para reconocer que esos cinco habían recibido adiestramiento militar. Me alegre por ellos, de haberse acercado sin ninguna precaución, el elfo los habría cortado a la mitad y se hubiera comido sus orejas de seguro.

El elfo saco de su espalda una daga ondulada del tamaño de mi antebrazo. Los hombres se detuvieron en seco y apuntaron sin dar un paso o titubear... vaya ni de mudar de expresión siquiera. Eran soldados, soldados de elite.

-Mister, put that knife down before someone gets hurts, most probably you.- exclamó el hombre de traje con calma.

-Laaaargueeeenseeeeeee- dijo el elfo amenazante -Este bosqueeee, no leees perteneeeeceeee-

-Mil disculpas señor, aún no me acostumbro a usar el idioma de esta región- se disculpó el hombre -Aun así temo decirle que está equivocado, le repito que esta es propiedad privada. Ahora lo pediré una última vez. Baje ese cuchillo amablemente o me veré forzado y abriremos fuego.- Para reforzar sus palabras ordenó -Aim- Y si los videojuegos de disparo de primera persona me enseñaron algo es que Aim significa literalmente "Prepárate para disparar a todo lo que se mueva"

-Joder, estos nihil nunca aprenden- se quejó Edwin. Tomo su mochila y saco lo que parecía una bolsa de canicas moradas. Tomo tres en la mano y miro a Laila. Ella le contesto asintiendo y rápidamente saco su ballesta y se puso pecho tierra, apuntando al elfo.

-Miguel,- me llamó- Laila y yo vamos a distraer a nuestro queridísimo orejón, tú lleva a los nihil a un lugar seguro. Nos reuniremos después-

-¿De qué hablas? ¡Somos tres contra uno! Deberíamos mejor...-