Hermanos

Estúpido y sensual pájaro

                  

Buena noticia, Andros nos dejó conservar el pájaro. Mala noticia

-Alain, tu pavo estúpido no deja de picotearme la cabeza- proteste.

-Bueno es posible que aún no pueda volar- dijo Imir

-Ignorante, no vuela, viajan en grupo y...-

-Deja de picotearme maldita gallina.- Dije arrojando el ave fuera de mi alcance. Agitó las alas y aterrizó correctamente, graznando indignada.

-Ese estúpido pollo ni siquiera nos deja dormir- Aun tenía moretones del último entrenamiento de esta tarde con Andros, había llovido en la carrera y ahora realmente apestábamos. Lodo, fango, insectos, animales y la misma ropa sudada de un mes y pico no eran una gran combinación, incluso Jadis había desistido de insinuar a Alain que durmiesen juntos. Había que admitirlo, la chica era segura de sí misma y cualquier cosa que lograra que dejara que se rindiera con Alain, era grave.

-Hemos completado medio entrenamiento- comento Alain descansando -Soportemos un poco más-

-Cállate- dije arrojándole un mango* -Tu eres una especie de Mowgli fusionado con Rampunzel-

-No los conozco- respondió atrapando la fruta

-Deberíamos explorar, recolectamos algo del agua que cayó por la lluvia, pero no es suficiente para un baño- dijo Jadis

-Es mejor descansar mientras podamos- dijo Imir -Pronto Andros regresara y...-

-Hemos comido ya, tenemos una o dos horas antes de que regrese- dijo ella con un mango en la boca.

-¿Qué regrese quién?- pregunto Andros, arrebatándole la fruta y tomando la pequeña canasta.

-¡Hey maldito senil! Casi me mato trepando por esas cosas ¡Devuélvelas!- Solo me golpeo en la cabeza y me envío al suelo.

-No tendremos esa charla del respeto de nuevo muchacho- y se sentó sobre mí

-Prepárense, en cuanto termine de comer, nos vamos.- gruño

-¡A la Sede!- pregunto Jadis esperanzada

-Al siguiente entrenamiento- aclaro el anciano

-Pero si acabamos de...- comenzó Imir

-¿Algún problema soldado?-

-Aparte de su obvio fanatismo con las películas del ejército americano, ninguno señor- conteste desde el suelo. Andros solo dejo la cascara de mango en mi cabeza, antes de seguir con otro.

-Queda una semana más y no quiero que se sientan mejor mocoso, así que es natural que suba el ritmo-

-Maldito viejo inútil, juro que voy a.... ¡ESTÚPIDO CUERVO OBESO! ¡DEJA DE COMER EN MI CABEZA!-

Andros río y puso un mango al alcance del pavón (ese no es chiste, recuerden que ese es el nombre) -Es raro que un ave se quede en un solo lugar tanto tiempo- dijo acariciando un poco el cuello del animal. No parece querer irse

-Estúpido desayuno- dije yo, el pajarraco gorjeo (horriblemente) complacido.

-Ya, se las ha arreglado para seguirlos toda la semana. Al menos pónganle un nombre.-

-Ese es su nombre señor- dijo Jadis

-¿Perdón?-

-El nombre del ave es Desayuno- aclaró Imir

-Idea de este inútil supongo- comentó Andros golpeándome la cabeza

-En realidad, fue idea de Alain- respondió Jadis