-¡¿Qué rayos quieres que te diga?!- preguntó completamente irritada- ¿Qué no te he dicho, para que aún te encuentras insatisfecho? ¿Qué es lo que necesitas saber para que finalmente me dejes en paz?

-¿Dejarte en paz?- repetí con incredulidad- discúlpame pero eso no será posible ¿Crees acaso que voy a dejar que estés por ahí sola?

-¡Arg!- gruño con desesperación mientras golpeaba sus muslos- Nathan- bufó con enfado- yo no necesito que me cuides.

-¡Ya lo sé!- grité en el mismo tono que ella "Ya sé que no debo hacerlo... Pero tampoco puedo dejarla sola... Es porque..."- entiéndeme por favor...

-¡No!- exclamó cual niña caprichosa- no te puedo entender... Y lamento decirte que ya no tengo nada más que contarte... Te he dicho todo.

"¿Todo? ¿Qué es todo?" Lo único que me había dicho era que Eleanor murió, con un sueño en el que ambas parecían hablar de un famoso trato... Aún me despertaba por las noches al recordar la voz de Eleanor: Si decido aceptar... ¿Tú aceptarías algunas de mis condiciones? Hasta ahora, las cosas que había visto hacer a esta chica eran completamente barbaridades, sólo se me ocurría que eran parte de las condiciones de Eleanor.

-Mira... Nunca vamos a llegar a ningún lado de esta forma- mencioné intentando tomar un poco de aire para así calmarme, Eleanor tenía la facilidad para crisparme los nervios.

-No sabía que intentábamos llegar a un lugar- me respondió con mordacidad.

-Escucha...- solté un suspiro al instante que me puse en cuclillas- íbamos a casarnos... Sé que esto te lo tienes cantado... Pero te pido por favor que te pongas en mi lugar, la chica a la que conozco desde los ocho... Falleció sin siquiera despedirse de mi; la persona con la que iba a compartir toda una vida de pronto desapareció.- El aire parecía demasiado pesado para mis palabras y sentía un nudo en mi garganta, no podía decir de buenas a primeras que ya aceptaba no verla más- luego vienes y me dices que habitas en su cuerpo, y que además hay una serie de condiciones que ella te ha dejado, por favor... Yo no pudo aceptar eso.

-Pues tienes que hacerlo- volvió a decir con cierta imposición. Comenzaba a creer que ella planeaba sencillamente moverse a su propio ritmo, cumpliendo o haciendo lo que le daba en gana sin importarle si alguien estaba o no de acuerdo con eso.

-No, joder no puedo- me puse de pie de golpe sintiéndome cabreado por su poca cooperación. Ella no podía imponerse así- las cosas no funcionan así... No puedes jugar sola, hay personas que amábamos a Eleanor.

-¿Y crees que eso les da derecho a controlar lo que ella quería hacer?- preguntó, fue cuando la vi cruzarse de brazos como si estuviera retándome.

-¿Así qué es cierto? Tú estás cumpliendo los deseos de Eleanor...- era difícil saberlo con las expresiones de su rostro, pues no revelaban nada en realidad. Ella lucía impasible, pero sabía que era algo como eso- esas son las condiciones de Eleanor...

-No seas idiota- me reprendió con voz firme- yo no soy la mandadera de nadie.

-¿Por qué te es tan difícil responder mis preguntas? Estoy harto de este juego de misterios y dar vueltas en un círculo...

-Mira quien fue hablar- recriminó con sonrisa sarcástica- porque no en lugar de querer saber cosas que ni siquiera te importan, no te haces mejor otro tipo de preguntas.

-¿De qué hablas?- pregunté con desconfianza.

-¿Realmente conocías a Eleanor?- no estaba seguro si era su voz, su mirada o el que fuera precisamente ella quien me preguntara eso. Pero de pronto comencé a sentir más frío del que debería- ¿Sabías todo sobre ella? ¿Cómo se sentía?

-La conocí desde que tenía ocho...- me apresuré a responder.

-Eso no garantiza nada- respondió ella, sus palabras eran como bofetadas frías y secas- los humanos pueden convivir con una persona mucho tiempo sin saber nada uno del otro.

-¿Qué significa eso?-

-Digo que si ella quería tatuarse era porque en realidad no fue una niña afable, que si ella quería ver el nacimiento de Samy era porque en realidad no había superado perder a su bebe... Y que si quería lanzarse de un bungee, era porque en realidad no era una chica tranquila que se ocultaba tras un escritorio a editar una revista sobre el sistema financiero de América, ella tenía una personalidad aventurera, era extremista y seguro que le gustaba correr riesgos.

Me quedé de piedra. Esto era algo que me había golpeado en el estómago, al grado de hacer que mi jugo gástrico subiera a mi garganta y me provocara ganas de vomitar. No podía venir esta chica y decirme de buenas a primeras que en realidad no conocía a mi ex prometida. Sin embargo... Estaba esa pequeña espina en el pulgar que me causaba conflicto.

-¿Lo ves?- preguntó bufona- sabes que he dicho la verdad- tan segura de su comentario, se limitó a girar para continuar con su camino, dejándome este frío en mi cuerpo como solía hacerlo.

Si aquello era cierto... Entonces tenía más razones para saber lo que Eleanor quería realmente.

-¡Espera!- grite con desesperación, con miedo a que se alejara y esto nuevamente quedara en la nada. Lentamente me fui acercando a ella con expresión sería- quizás tienes razón, todo lo que has hecho hasta ahora me confunde por que no es algo que yo creyera que ella haría... Pero si lo que dices es cierto, entonces con mayor razón quiero que me expliques.

-¿Por qué?

-Necesito saber quién era ella realmente...- respondí con pesadez- porque quizás así... Yo creo que podría despedirme de ella y finalmente dejarla ir.

Mis palabras parecían ahogarse en mi propia garganta. El silencio que se formó entre nosotros durante unos segundos me taladraba la cabeza, ya que tenía la mirada sobre el suelo no podía ver que expresión tenía ella justo ahora, no fue hasta que sentí su mano sobre mí hombro.

-Muy interesante...

No sabía sí era interesante o no, pero fue justo después de saltar en bungee cuando comenzó nuestra aventura contra tiempo... Las condiciones de Eleanor finalmente iban a revelarme quien era ella y quien pretendía ser... Las palabras de amar a alguien después de la muerte, comenzaban a ser cuestionables.

 Las palabras de amar a alguien después de la muerte, comenzaban a ser cuestionables

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Hola chicos

¿Qué tal os va pareciendo la historia?

Os pido que voten y comenten. Y si les gusta pues igual recomienden ;)
Saludos y gracias por leerme a quienes lo hacen


La muerte se llama... Eleanor. ||| Mrs. Write ||| EN EDICIÓN.Where stories live. Discover now