Capítulo 46

541 71 32
                                    

Era el tercer día consecutivo que pasaba lejos de casa. De pronto, le parecía pésima idea haber pedido a la editorial no saturar las semanas con eventos fuera de Londres. Inicialmente, había sido para tener tiempo para visitar a Harry mientras viviera en Doncaster y, cuando finalmente se mudara a Londres, no pasaran demasiado tiempo separados. Ahora, todo se resumía a la mitad de la semana brincando entre habitaciones de hotel y la otra, en completo silencio en su departamento. Ocasionalmente visitaba a Zayn y a Liam en sus días libres. Después de más de un mes de estar completamente alejados y algunas semanas más con silencios incómodos y cierta tensión, su relación había vuelto a la "normalidad", aunque nada en él se sintiera normal. Louis era consciente que siempre era bienvenido con sus mejores amigos, pero la realidad era que prefería estar solo.

La última vez que supo algo de Harry, fue el día del lanzamiento del libro, casi un mes atrás. Emmy y Finn se disculparon en su nombre, explicándole que hubiera deseado estar ahí, pero no había podido acompañarlos. Sabía que era mentira, por supuesto. Su omega jamás tuvo planes de asistir, ni de tenerlo cerca. "Es lo mejor", pensó. Al menos eso trataba de convencerse. Tenía mucho que había dejado de intentar contactarlo, después de muchas llamadas ignoradas y mensajes no contestados. "Es lo mejor". Había dejado, también, de preguntarle a Zayn, después de negativas constantes de compartirle lo que fuera, el más mínimo detalle sobre Harry. "Es lo mejor". Se lo repetía cada día. Era lo mejor, ya había hecho suficiente daño y lo mejor era mantenerse al margen de la vida de su omega, como siempre debió hacerlo.

- Babe, nos quedan menos de tres horas antes de tener que estar en Waterstone en la lectura. - La voz de Zayn irrumpió desde el baño, trayéndolo de vuelta. - Podemos comer aquí o pasar por algo en el camino, ¿qué prefieres?

- Lo que tú quieras. - Respondió distraídamente. El omega asomó la mitad del cuerpo por la puerta entreabierta, con agua escurriéndole y mojando el suelo.

- Lo que quiero, es que me digas qué quieres. Cuando elijo yo, te la pasas quejándote de que no hay nada que te guste.

- Z, de verdad no me importa. - Insistió. - Lo que sea está bien para mi.

Al no obtener respuesta, terminó de empacar lo que faltaba y cerró su maleta, dejando afuera solamente el bolso donde guardaba sus artículos de baño. Por la noche, tenían que tomar el tren a Londres y no quería preocuparse por eso al volver. Escuchó a Zayn salir del baño a sus espaldas y, de inmediato, sintió sus brazos fríos alrededor de la cintura. Lo sostuvo en silencio unos minutos, recostado sobre el centro de su espalda.

- Louis, sé que las cosas no están bien, pero no puedo evitar preocuparme por ti. - Dijo en voz baja, apretándolo un poco más.

- Estoy en terapia, hago ejercicio, me despierto temprano cada día, ni siquiera estoy fumando. ¿Qué mierda te preocupa? - Cuestionó, súbitamente a la defensiva.

- Esto, justamente. - Respondió el omega, deslizando una mano hasta cruzarle el pecho. - Estás sumamente irritable, casi nunca vas a casa y...

- Lamento haberte contestado así. Tienes razón. - Interrumpió, inclinando la cabeza y rozando su rostro contra el de Zayn, que permanecía apoyado sobre su hombro. - Y no los visito, porque... porque no quiero ser invasivo.

- Lou...

- Y porque quiero estar solo, Z. - Agregó, después de un suspiro cansado. - Es difícil ¿ok? Te quiero, los quiero a ambos. Pero muchos días, todo es simplemente... abrumador. Apenas puedo tolerarme a mí mismo.

- Te estás aislando, eso nunca es bueno. - De pronto se sintió agotado de la vida, de estar solo, de pensar. - Ven a casa, por favor. Quédate unos días, prueba cómo te sientes.

No Lie In His FireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora