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Capítulo dedicado a Aina_tsuna

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Capítulo dedicado a Aina_tsuna









El amanecer en el infierno traería consigo la tan esperada ceremonia.

La presentación oficial de la primera lilim en caminar entre humanos al resto del infierno que, según mi madre, deseaba condenadamente el descubrir mi rostro humano.

Y sólo quedaban unas cortas horas para que eso pueda ser posible.

De pie en frente de mi cama continué de brazos cruzados y con la mirada perdida en el sencillo conjunto que esperaba adorar mi cuerpo y honrarlo con su oscura seda. No pude descansar debido a que un rostro esquelético me acechaba cada vez que intentaba cerrar los ojos, alargando más mi impaciencia y obscuro presentimiento de que algo muy malo estaba a punto de pasar.

Aunque estando en el infierno, ¿qué cosa buena podría ocurrir?

Tres golpes en la puerta me hicieron carraspear para permitir entrar a quien se hallara del otro lado. Cuando el sonido seco de la puerta trajo consigo un fuerte olor a hierba de sangre de drago supe perfectamente de quién se trataba.

-¿No te gusta? -pronunció calmadamente al situarse a mis espaldas.

Ambas continuamos observando mi conjunto y suspiré bien hondo tras unos largos segundos en silencio.

-Sólo quiero terminar con esto de una vez.

-Cuidado o me contagiarás tu entusiasmo.

Medio sonreí ante el sarcasmo en la voz de mi madre. Caminó hasta quedar sentada en un extremo de la cama y al verla aún con la misma vestimenta señalé su vestido con la cabeza desde mi posición.

-¿Acudirás así?

-He pasado la noche curando las heridas de tu padre por lo que nuestros costureros se están encargando de ello.

Alcé una ceja y descalza caminé en su dirección para ayudarme a desabrochar el corset.

-¿Heridas? ¿Acaso se puede herir al gran Samael?

Mi burla la hizo sonreír.

-Se puede herir tanto a un demonio como a un ángel, cariño. Pero el daño sana cinco veces más rápido que el de un humano.

-¿Por qué perdiste el tiempo curándolas, entonces?

Una vez que terminó de desabrochar el corset caminó hacia mi armario y terminando de desnudarme caminó de vuelta con una bata de oscura, suave y fina tela para cubrir con ella mi cuerpo.

-Porque incluso aquí abajo cometemos estupideces por amor.

Un escalofrío me recorrió de pies a cabeza y me fue inevitable no observarla con nuevos ojos mientras terminaba de atar el cinturón que mantendría cerrada la bata.

AMA© |TRILOGÍA AMOS 2|Where stories live. Discover now