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Taehyung terminaba de ponerse sus botas negras de cuero cuando Jackson salió del baño completamente vestido, aunque su cara distaba mucho de la de una persona que esa noche iría a un buen bar a buscar algo de diversión nocturna.

Con un leve salto, el rubio se puso de pie, para caminar hasta el espejo de cuerpo completo que se encontraba a un lado de su tocador. Acomodando algunas hebras de su rubio y lacio cabello por encima de su frente.

A través de la superficie reflectante pudo ver como su amigo se sentaba en el borde de la cama para observarlo con curiosidad, de forma inquisitiva. Se mantuvo de esa manera durante los minutos que le tomaron acomodar de forma correcta su ropa, cuidando cada detalle de la misma.

—Si tienes algo que decir solo suéltalo, me estás poniendo de los nervios — habló Taehyung, volteándose para encarar a Jackson y cruzarse de brazos.

—Solo me extraña tu comportamiento — el castaño se encogió de hombros —. Es curioso como alguien que le tiene tanto miedo a morir se exponga tanto como tú lo haces.

—Le tengo miedo a morir, sí — Taehyung sacudió la cabeza en un gesto afirmativo, avanzando dos pasos en dirección al contrario —. Pero tengo más miedo de vivir una vida miserable encerrado en cuatro paredes siempre. No nos vamos a quedar aquí como si allá afuera hubiese un virus que pudiera matarnos.

—Ojalá fuese un virus — exclamó Jackson, poniéndose de pie —. Pero no, resulta que es un demonio con miles años de antigüedad, y que oh sorpresa, además quiere asesinarte.

—Eso no es una novedad — las comisuras de sus labios se alzaron para esbozar una sonrisa sarcástica —. No será la primera vez que quiere hacerlo.

Jackson suspiró. Realmente le preocupaba la seguridad de Taehyung, más allá de los asesinatos descomunales que podría provocar la demonio de ojos verdes al estar libre, era a su amigo a quien ese ser ancestral quería muerto.

Y por más raro y despreocupado que actuara Taehyung frente a toda aquella situación, estaba seguro que por dentro estaba temblando de miedo. A la expectativa de lo que Aluca podría hacerle cuando sea que se lo proponga. Solo estaba tratando de asustarlo más y más, volverlo completamente paranoico.

—Por esa misma razón debemos hacer algo para evitar que ella venga por ti — Jackson exhaló y cortó los últimos centímetros de distancia que lo separaban del rubio, sus manos viajaron hasta los hombros ajenos y ejercieron presión con fuerza controlada —. Tu seguridad está en peligro. La tuya y la de tus padres. Lo más recomendable sería que nosotros contemos-

—No — Taehyung lo cortó de inmediato, frunciendo el ceño —. Esa no es ni siquiera una opción. No.

—Pero-

—Pero nada, Jackson — el rubio volvió a interrumpirlo, relamiéndose los labios antes de continuar hablando —. Si hacemos eso los únicos perjudicados seremos nosotros. Vamos a ser juzgados por el Consejo de la Orden Suprema y lo más probable es que nos encarcelen por eso, o en el peor de los casos, si descubren los asesinatos que posiblemente Aluca ya cometió, nos sentencien a la pena de muerte.

Jackson se estremeció ante la sola idea. Joder. Estaban en una situación contraproducente, sus vidas pendían de un hilo que estaba propenso a romperse en cualquier momento. Pero también era consciente que dejar todo como estaba en aquel instante no era una opción viable. Estaban acorralados. No importaba el camino que tomen, ellos tenían las de perder.

¿En qué maldito momento se le ocurrió que llamar un arcángel que finalmente ni les dio gran información era una buena idea?

Debía dejar de ser tan curioso con los seres supremos. Sus padres habían dicho claramente que ningún humano debía vincularse con ellos, y aunque técnicamente él no era un humano común, y Taehyung, pues era Taehyung, debieron mantenerse apartados.

Bloody Attraction [KookTae]Where stories live. Discover now