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La mansión frente se veía diferente, o tal se debía al hecho de que ahora la disfrutaba un poco más debido a la familiaridad del lugar que poco a poco amaba más. La casa de los abuelos de Juls pasaba fácil por una villa navideña debido a la cantidad de adornos con los que contaba. De verdad podía verse desde el inicio de la cuadra, iluminando casi toda la colonia.
Papá estaciono el auto para después abrirnos la puerta a mamá, a Ivana y a mí. Los padres de Ivana rechazaron amables la invitación debido a que no rompían la tradición familiar de pasar la noche con su familia, claro que permitieron que mi mejor amiga acudiera tanto por la intervención de mis padres como el hecho de saber que iríamos a la casa de una familia con una posición social muy respetable.
En autos separados llegaron Eva junto a Mateo con quien inicio una relación semanas atrás, dándole al fin la oportunidad por la que tanto lucho el pobre. Guille por otro lado, bajo orgulloso del auto que Juliana consiguió para él, su Ferrari pininfarina en color negro. En primera instancia papá se negó a aceptarlo como un regalo, así que ahora mi hermano tenía algo así como una deuda millonaria... Miranda tuvo que intervenir de que enserio era un obsequio, mamá acepto con condiciones simples como pasarla juntos en unas vacaciones.
En cuanto nos acercamos a la entrada no pasó desapercibido para ninguno la melodía de las canciones navideñas que ya sonaban en el lugar.
Juliana abrió la puerta en cuanto hicimos sonar el timbre, nos recibió con abrazos y besos, saludando a todos y cada uno de nosotros. Si el exterior parecía sacado de un cuento, el interior era lo contrario. Un poco más sobrio, con adornos colocados de manera sutil que indicaban que diciembre llegó. Excepto por la sala principal, donde se encontraba un enorme árbol con su punta tocando el techo, lleno de todo lo que uno pudiera imaginarse. La verdad es que no seguía un patrón de estilo.
Ya en la sala todos nos saludamos, pasando desde los abuelos y tíos de Juls, hasta por los padres de Lauren que también asistieron a la cena de esa noche. Así que para iniciar la noche, las pláticas comenzaron en distintos círculos. Hasta que mi novia habló emocionada, formando un círculo con todas nosotras.
"¿Si trajeron lo que les dije?"
"Sigo sin comprender la razón de traer un adorno navideño" manifestó Lau "¿es como un ritual de iniciación o algo así?"
"Es tradición nuestra colocar en el pino un adorno, sin importar de que tipo sea, que represente algo importante para nosotras ocurrido durante el año" explico Camzi "por eso pueden notar a simple vista que algunos son algo poco convencionales."
Si prestabas atención podías observar desde un pequeño guante de boxeo, hasta una zapatilla de ballet, o un retrato familiar por un lado junto al peluche de un pez con el nombre de Arturito.
"Coloquen sus adornos" insistió Juls señalando el árbol, siguiendo esa tradición, Ivana, Lauren y yo sacamos lo que situaríamos en el pino.
Lauren puso una mini copia del trofeo que ganamos en la expo ciencia, Iv un peluche de corazón con la iniciales R e I grabadas, por mi parte puse un telescopio de cristal por el recuerdo de Juls pidiéndome ser su novia, ante esto rápidamente la morena saco casita de campaña. Ambas pensamos justo en lo mismo. Las restantes se apresuraron a dejar también sus adornos, la mayoría reconocimos la razón de lo que llevamos. El semestre, más todo lo vivido juntas nos enseñó a conocernos.
Aprovechando el tiempo antes de la cena, realizamos una videollamada grupal para comunicarnos con Sofi y con Ethan.
"¡Feliz navidad!" Ethan apareció en la pantalla, cubierto con un gran suéter, gorro y bufanda "pensé que se olvidarían de esta pobre alma en soledad."
