lo siento, Es Imposible ✔ #1

Capitulo 40

Un año después:

Todos esperaban por mis palabras. Había pedido a todos que vinieran, porque quería decírselo en persona antes de hacerlo.

—Me iré— trago saliva— Me iré del país.

Todos me miran como si estuviera loca. Pensarían que es una broma o un juego, pero no lo era. Necesitaba irme y dejar de estar aquí. Su ausencia estaba presente en todos lados.

—¿Estas loca liz?—pregunta Sebastián.

—No Sebas, me iré por un tiempo.

—¿Cuanto tiempo?— pregunta mamá.

—No lo sé mama, unos meses, no lo sé, solo necesito irme—cierro los ojos— Necesito paz, tranquilidad mamá y nada va a detenerme. Necesito irme y tratar de superar esto— golpeo mi pecho.

Me iría, me iría con Claris, necesitaba un psicólogo y ella era perfecta. Mi abuela Claris era la mejor psicóloga y con ella me sentía bien. Por lo menos eso creía.
Mamá me abraza y yo me dejo abrazar. Algún día quizás lo supere y pueda estar bien.

****

Estaba haciendo mucho frío, el tiempo estaba nublado y el césped estaba húmedo. Había pasado toda la noche lloviendo y esta mañana cuando salí de mi departamento con las personas más importantes en mi vida, me di cuenta de ello.

Mamá, papa, Sandra, Sebastián, Isabel, tefi, Matthew y yo estábamos en el cementerio. Habíamos venido a dejarle flores, hoy siete de octubre cumple otro año de muerto y decidimos venir como nunca antes habíamos vendido. En familia. Mamá sonríe y papá hacia lo mismo. Me sentía completa, me sentía feliz, feliz de entender al fin que el estaba descansando. De que era  feliz en el cielo, donde debería estar, porque el era un Ángel, el Ángel que guía mi vida.

Me apoyaba del hombro de Matthew y veía como mamá y papá dejaban los girasoles, los girasoles que tanto le gustaban. Esperaba que todos se fueran y cuando quede sola Matthew se alejó un poco y pude acercarme a él lugar donde se había enterrado su pequeño cuerpo.

—Al fin estás descansando, eh— sonrió pasando mi mamo por la placa donde dice su nombre y la fecha de muerte— Eso me alegra mucho sabes. Me alegra que estés con otros ángeles como tú, que ya no estés sufriendo y que esta bien— sorbo mi nariz— Falte a mi promesa de protegerte queria pedirte perdon— pauso— perdóname por haberte dejado solo y perdóname por no venir haberte todo este tiempo.

Mi mente viaja a aquel momento donde me pedía que no me fuera, que me quedara con él y que lo llevara, quizás debí hacerle caso y quedarme con él. Pero ya es tarde para lamentos y debo continuar.

》Estoy saliendo con  un chico maravilloso— miro a Matthew— el no es como David, el es único y se que no me engañara, el me ayuda, volveré a comenzar las terapias con la abuela Claris y le confesaré a toda mi familia que me casé— sonrió— Será un caos, pero no podría hacer nada. Sandra armará un caos porque nos casamos de una manera muy loca— rio— Pero estoy feliz, y se que es el momento, el momento de dejarte ir y dejarte descansar. Nunca te olvidaré, siempre te amaré, y te llevaré en mi corazón— pongo las manos sobre mi regazo- Te amo mucho mi Ángel, nunca lo olvides.

Con mis dedos pongo un beso en la tumba y me levanto.

Sonreí,  sonreí con alegría, estaba dejando ir su recuerdo, estaba dejando de atormentarme y buscando una ayuda que esta vez si funcionaría. Caminaba hacía dónde Matthew y lo abracé, entre mi cabeza en su pecho y suspiró ese perfume que tanto me encanta.