𝒕𝒉𝒐𝒖𝒈𝒉𝒕𝒔, draco malfoy

vi. he died for me

―¿Qué es lo que quieres?― preguntó Hayley llegando a la mesa de Gryffindor. Harry se encogió de hombros.

―¿Tiempo de calidad de hermanos?―Hayley hizo una mueca.

―Paso por hoy.

―¡Hola a ti también Hayley!

―Ah. Hola Ron, hola Herms.―saludó mientras tomaba asiento junto a su hermano.

―¿Te gustaría algo de Hogsmade?―ofreció Hermione.

―Oh, no. Ya le he pedido a Draco, pero gracias Mione.

―Tú y ese Malfoy... nunca voy a terminar de entenderlo.―bufó Ron molesto.

―Estoy cansada de repetirles ¡no estoy esperando a que lo entiendan!― chilló molesta.

Después del desayuno, los mellizos Potter habían estado deambulando por el castillo con una Hayley un tanto molesta ya que ella debería estar buscando al profesor Snape o sino Draco Malfoy la arrojaría al Lago Negro y  sería comida para el calamar gigante. De un momento a otro, no sabía muy bien cómo pero ambos habían terminado en el despacho del profesor Lupin.

―¿Una taza de té?― preguntó Lupin, buscando la tetera.― Iba a prepararlo.

―¡Con dos de azúcar, profesor!―se apresuró a decir Hayley. Harry la miró avergonzado y Hayley confundido.―¿Qué?

―Por supuesto, Hayley.―rió el profesor.―Siéntense. ―dijo sacando una caja polvorienta.― Lo lamento, pero sólo tengo té en bolsita. Aunque supongo que debes de estar harto del té suelto, Harry.

―¿De qué habla?―preguntó Hayley confundida. Se percató de que Lupin y Harry compartieron una mirada bastante misteriosa.

―Oh, bueno, en clases de adivinación solemos tomar mucho té suelto. Eso es todo.―Harry se aclaró la garganta.

―Está bieeeen.―contestó Hayley. Aunque sabía que no era completamente verdad.

―Oh, Hayley ¿ves lo que hay aquí? es para nuestra próxima clase.―el profesor Lupin señaló un frasco de vidrio que contenía una criatura de color verde asqueroso y con pequeños cuernos afilados.―Es un grindylow.

―Un demonio de agua, ¿cierto?―preguntó tomando el frasco. La criatura inmediatamente pegó su cara al cristal y empezó a hacer muecas.

―Así es.―respondió con una sonrisa y puso una taza de té frente a Hayley y otra frente a Harry.

―Genial, profesor.

―¿Hay algo que te preocupa Harry?

―No.―hizo una pausa.―Sí.

―¿Qué es lo que pasa?― Hayley volteó a mirarlo confundida. Él no le había contado nada.

―¿Recuerda el día que nos enfrentamos al boggart?―Hayley casi escupe el sorbo de té que acababa de tomar al recordar cual era su mayor miedo. Merlín, si Harry lo supiera estaría muy decepcionado.

Aunque su boggart parecía hacerse realidad cada año.

―Bueno.―empezó el profesor Lupin.― Pensé que si el boggart se enfrentaba contigo adaptaría la forma de Lord Voldemort.

Hayley hizo una mueca. Parecía ser que el profesor Lupin ni siquiera se le había pasado por la mente que su boggart fuera Lord Voldemort, ella había sido su primera voluntaria. A Haley se le pasó por la mente que había algo más atrás de eso.