Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 2

19. Una marca.

Mientras volaba en dirección a su palacio, recordaba todo lo acontecido unas horas antes, eran demasiadas cosas. Recuerdos de Kagura, las preguntas de Rin a Kohaku, el muchacho que bailó con ella, la rabia que sintió ante las palabras del monje, aquél comentario de Rin que daba vueltas en su cabeza... Si continuaba volando no llegaría sino hasta el medio día. Tenía que planear el próximo ataque, esta vez no sería tan sencillo. Se convirtió en una esfera de luz y en pocos instantes estuvo frente al campo de protección del palacio.

Aki: ¡Lord Sesshomaru ha llegado!

Todos hacen una reverencia ante él. Nota algo extraño y es que todos lo observan con mucha curiosidad. ¿Qué les pasaba? Esto comenzaba a irritarlo. Llegó a las puertas del palacio donde estaban sus más cercanos subordinados.

Sesshomaru: ¡Síganme! Tenemos cosas que hacer.

Jaken / Takeshi / Bingo / Aki / Keiko: ¡Si Señor!

Bingo: Eh... Joven Sesshomaru... ¿Dónde pasó la noche?

Sesshomaru: No te importa.

Jaken: Amito ¿fue a dónde creo que fue?

Aki: Déjenlo. No sean envidiosos.

Sesshomaru frunce el ceño al escuchar aquellos comentarios. ¿Qué les pasaba? ¿Por qué todos actuaban tan extraños? No era el hecho de que hubiera salido, era algo más. Keiko sentía una enorme rabia y era muy notorio su mal humor.

Sesshomaru: Nos acercamos al territorio suroeste. Al recuperar este reino, los tres pueblos circundantes se rendirán.

Bingo: Será un poco más difícil.

Aki: Y más tardado. Probablemente... ¿tres meses? Es un territorio muy grande y con un numeroso ejército.

Takeshi: Podemos rodear la montaña para pasar desapercibidos. Aunque será más tardado, pero eso nos permitirá llegar a este lugar (Señala el mapa) que es justo donde menos opciones hay para que se escondan.

Bingo: Si, ahí les atacaremos por sorpresa. ¿Qué opinas Sesshomaru?

Sesshomaru: Da lo mismo. Keiko irás al frente con tu batallón. Takeshi irás al día siguiente siguiendo su rastro. Aki, tu y yo esperaremos al tercer día. De este modo no habrá tanto alboroto.

Aki: Muy bien. Notificaré a mis hombres.

Takeshi: Yo igual, tenemos dos días para entrenar aún, creo que podré entrenarlos para que se acoplen al terreno.

Bingo: Keiko... (Ella está muy distraída viendo a Sesshomaru) ¡Keiko!... ¿Estás aquí?

Keiko: Si... Yo partiré mañana.

Aki: Todos sabemos entonces lo que tenemos que hacer. Vamos a informar a nuestros hombres.

Takeshi: Si, con permiso señor Sesshomaru.

Bingo: Voy contigo Takeshi.

Jaken: ¿Y yo?

Sesshomaru: Tú te quedarás en el palacio.

Jaken: Entonces... voy a vigilar a doña Katia amo bonito. Creo que no me entendió cuando le dije que el orden de los colores de las nuevas flores era rosa, lila y azul... Las quiere sembrar lila, rosa y azul. Es imperdonable, ¿No cree?

Sesshomaru: ¡Ya vete Jaken! Y tú también Keiko.

Jaken: ¡Ya me voy! ¡No se sulfure!

Keiko: No Sesshomaru, yo no me iré.

Sesshomaru: Entonces quédate aquí y ordena los planos. Adiós.

Keiko: ¡Espera Sesshomaru! (Saca algo de entre su ropa) Dime... ¿Qué es esto?