10. Indiscreciones.

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Tras dos semanas de ardua batalla, lograron recuperar el territorio dominado por el demonio ajolote. Era muy fácil usar a Bakusaiga y terminar con todo en un instante, sin embargo eligió pelear cuerpo a cuerpo, sin técnicas especiales, usando únicamente sus garras. ¿Por qué? De esta forma se mantendría ocupado en otra cosa que no fuera poner aquella mirada nostálgica al recordar a Rin. El demonio ajolote al verlo acercarse decidió rendirse y poner a todos los habitantes de ese lugar bajo sus órdenes.

Regresarían al palacio del Lord al amanecer, esa noche acamparon y festejaron su triunfo. Bingo llevaba mucho licor consigo pues estaba seguro de que con Sesshomaru al mando, la victoria estaba asegurada. Todos, excepto Takeshi, bebieron hasta quedar muy borrachos. Al joven no le quedó otra opción que cuidar de ellos.

Mientras los soldados cantaban, bebían y reían, Sesshomaru optó por alejarse un poco. Algo le preocupaba... El cielo anunciaba una inminente tormenta. Relámpagos y fuertes truenos comunicaban la magnitud del desastre que se avecinaba. Tras unos instantes comenzó a llover.

Rin se inquietaba durante las tormentas. Temía. A veces lloraba. En ocasiones tenía pesadillas. Esto no le dejaba estar tranquilo. Sabia que no estaba sola, aun así sintió un fuerte impulso por ir a cerciorarse de que todo estuviera bien. Alguien se acercó en dirección a dónde él estaba.

Jaken: ¡¡Amo boñiito!! ¡¡Amito peshosho!!

Takeshi: Señor Jaken vuelva por favor.

Jaken: ¿Que ashe acá amito preciosos? Ay son tres amos boñitos. Hiiip. (Tiene hipo).

Sesshomaru: (Molesto) ¿Estás borracho Jaken?

Takeshi: Señor Jaken volvamos, el amo Sesshomaru está ocupado.

Jaken: ¿Que ocupado va a eshtar-tar? Eshtá penchando en aquella shiquilla. (Sesshomaru le lanza una mirada asesina) Ay shus ojitos color miel tan bellosh. Que hermosho es ushted amito.

¿Eran verdad las sospechas de los demás? ¿Había una mujer en la vida de Sesshomaru? Aunque para Takeshi no era nada del otro mundo. ¿Cuál era el problema? ¿Por qué les asustaba eso?

Sesshomaru se molestó por la imprudencia de Jaken. Al menos solo uno era el que había escuchado, y por la conversación de la que fue testigo aquel día en el palacio, luego del incidente con Keiko, parecía que Takeshi era reservado. Aún así no podía fiarse de él.

Sesshomaru: Takeshi llévate a Jaken, y cuida su boca.

Takeshi: ¿Como? ¿Su boca?

Sesshomaru: Que no hable de más.

Takeshi: Ah.. Si señor.

Sesshomaru: Toma. (Le aventó la medalla con la insignia del Palacio, la cual indicaba que durante su ausencia, si había alguna situación de riesgo, podía dirigir a las fuerzas armadas de las tierras del Oeste).

Takeshi: Señor... Es un honor...

Sesshomaru: Te quedas a cargo. No hagas tonterías o te mataré. Volveré pronto.

Takeshi: Si Señor, gracias por otorgarme su confianza. No lo defraudaré.

Bajo la lluvia, Sesshomaru se elevó por el aire y se convirtió en una esfera de luz. Takeshi y Jaken lo vieron alejarse.

Jaken: Que ingrasto mi amo. Ño va ha shevarmeg.

Takeshi: ¿Qué? ¿Qué dijo?

Jaken: De sheguro va a verrr a Rrrin. El amo chechumaru la extaraña mushio, aunque que no lo admita.

Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 2Where stories live. Discover now