♔ Capítulo treinta y cinco ♚

100 18 1
                                    

Baby I got issues, but I love myself

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Baby I got issues, but I love myself.

◞───────⊰·•·⊱───────◟

—¿Cómo te sientes?

—Asqueada de mí misma.

Mark soltó una risita por lo bajo y observó mi perfil, yo tenía los ojos clavados en el suelo sucio.

—¿Qué es tan gracioso?

—No es la respuesta que esperaba, para ser honesto.

—¿Y qué respuesta esperabas?

—Alguna irónica o algo así, supongo.

Lo ví encogerse de hombros y rodé los ojos.

—No he hecho más que demostrarte mi bondad, últimamente, y aún así sigues esperando lo peor de mí.

—No espero lo peor de ti, solo creía que ya habías levantado tus murallas de ironía y humor.

—Pues te equivocaste— me encogí de hombros— estoy muy cansada para pensar en alguna respuesta ingeniosa.

Sus ojos se clavaron en un punto de mi vestido y seguí su mirada para descubrir que era: dos gotas de vómito.

Que rico.

Eres una asquerosa.

Entré en pánico por unos instantes ¡No tenía nada para limpiar mi desastre de ropa! Mis toallitas húmedas habían ido a la basura junto con mi bolso. Intenté fingir demencia hasta que Michael se dignara a llegar.

Mark, sin inmutarse en lo absoluto, sacó el pañuelo de tela que siempre llevaba en el bolsillo de su saco y lo limpió él mismo.

Nadie dijo nada cuando se estiró para desecharlo en el cubo de basura.

—Gracias —murmuré finalmente.

—¿Es la primera vez que tienes vómitos?

Negué con la cabeza.

—¿Desde cuándo?

—Creo que un mes o algo así…

Frunció el ceño, claramente no le había gustado mi respuesta.

—¿Y no has pensado que no era normal vomitar tanto?

—Vaya, ¿estoy hablando con Mark o con Sweet Pea?

—No es gracioso, Betty— me alarmé y observé el panorama, pero no había nadie alrededor— Ya varias veces te mareaste con los fuertes olores en el bar ¿Pensaste que no me daría cuenta?

—Eso es porque eres un paranoico que nos controla a todos.

—Solo me preocupa su bienestar.

Suspiré pesadamente.

—Gracias por preocuparte, Marky. Pero lo que tengo es estrés, cuando todo esto termine volveré a estar bien.

—Espero que así sea.

Un coche negro estacionó junto a nosotros y el conductor bajó la ventanilla.

—¿Necesita ayuda, señorita?

—No, Michael. Me encuentro bien, muchas gracias por venir.

Me puse de pie y Mark lo hizo conmigo. Me abrió la puerta y yo me adentré en el vehículo.

Antes de que mi chófer pudiera arrancar de nuevo, se asomó por su ventanilla.

—Asegúrate de que llegue sábado y salva a su casa ¿Está bien?

Nadie pasó desapercibida la amenaza en su petición. Michael solo asintió y se dispuso a ponerse en marcha.

Cuando ya habíamos pasado varias cuadras, me miró por el espejo retrovisor.

—¿Se encuentra bien, señorita Cooper? Está un poco pálida.

—Sí, solo he vomitado, algo me habrá hecho mal— le resté importancia.

—No vaya a ser que esté embarazada— bromeó.

Sonreí con ironía.

—Si, Mich, embarazada del Espíritu Santo— hacía mucho tiempo que no tenía sexo.

El chico se rió abiertamente y, cuando se calmó, continuamos el trayecto en pleno silencio.

Al llegar, me acompañó hasta la puerta de mi apartamento y cuando se aseguró de que estaba bien, se marchó.

Me quité la ropa y rápidamente me metí en la ducha, estuve ahí parada por no sé cuánto tiempo hasta que me digné a enjabonarme.

No tenía ganas de absolutamente nada más que de llorar, me sentía cansada, presionada y sola.

Luego de vestirme con sólo un remerón de dormir, procedí a quitarme el maquillaje, ya arruinado, frente al espejo.

Una lágrima recorrió mi mejilla mientras me quitaba el pintalabios. No sabía porqué lloraba, solo sabía que tenía una angustia tremenda.

Cuando, por fin, terminé de quitarme el maquillaje prácticamente me arrastré hacia la cama y me envolví en mis mantas para intentar dormir un poco.

Me costaba horrores encontrar una posición cómoda. Dí vueltas y vueltas, acomodé las sábanas en numerosas ocasiones, hasta que mi energía optó por agotarse y finalmente caí en brazos de Morfeo.

¿Premio o castigo?

◝───────⊰·•·⊱───────◜

Capítulo corto por ser madrugada de domingo.

The mafia bitch Where stories live. Discover now