La Chica Que Se Enamora De Personajes Literarios

Capítulo 18

Maratón 2.5/ 3

Luke Howland

Bienvenido Luke.

Bienvenido al boulevard de los sueños rotos.

Las palabras de Stella resuenan en mi cabeza por unos segundos, una y otra vez, generando recuerdos confusos e intensificando en gran manera esos sentimientos que yacen en mi pecho y que al menos por hoy, estuve tratando de ignorar.

De suprimir.

Sin embargo, a veces, así lo queramos no podemos huir de todo lo que somos, lo que representamos, lo que sentimos. Lo que fuimos.

Me quedo inmóvil, mientras la brisa mueve las hojas de los árboles y se topa con mi cara, viendo como los rayos del sol se cuelan en cada espacio y lugar de esta calle arbolada, resaltando y dando brillo a cada flor, cada color, volviendo el momento más íntimo, más único, más hermoso.

Más mágico.

Más nuestro.

Sin saber muy bien que decir y con el corazón acelerado, sin pensarlo, me acerco a ella para ponerme a su lado, sus ojos se encuentran con los míos y no puedo evitar las lágrimas que se acumulan en mi mirada. Pero ella se ve sonriente, satisfecha, como si hubiera hecho una de las cosas más importantes en su vida.

Y me gusta eso, me gusta generar en ella tal felicidad. Me gusta saber que para alguien al menos soy importante, porque ella para mí lo es y no sé... no sé qué va a pasar conmigo, no sé cómo se darán las cosas... pero cuando ya no esté aquí, quiero recordarla.

Quiero recordar a la chica que me hace feliz, esa que me hace sentir seguro con solo un abrazo, alguna palabra o solo con verla sonreír.

—Muy lindo, ¿cierto? —Me pregunta con la voz profunda, mirando al frente.

—Demasiado para ser real. —digo con sinceridad.

—Un sueño menos. —Susurra ella, con alegría.

—¿Ah?

—Luke, tu nunca entiendes nada.

—Es tu culpa, nunca me das contexto de nada. —me quejo.

—El contexto es que, después de leer tu libro he soñado mil veces con decir esto, estuve esperando a la persona correcta para hacerlo y justamente fuiste tú.

—¿Y qué significa? ¿Por qué es tan importante?

—El boulevard es la base de tu historia. El mensaje principal utiliza como metáfora el "boulevard de los sueños rotos" —suelta un suspiro— significa tanto que con palabras es imposible describirlo.

—Ahora lo entiendo.

—¿Qué?

—Todo lo que sentí cuando te escuché decir eso. —la tomó de la mano— Gracias Stella.

—Luke, no tienes que...

—No, si tengo que... —insisto— te agradezco por esto. Por hacerme sentir así, por demostrarme que no todo es dolor y tristeza, que no todo lo que sentimos es malo.

Veo sus ojos ponerse rojos.

—Te quiero mucho, patético.

Dice con cariño.

—Esa es mi palabra. —Me quejo y ella sonríe.

—Eres un pesado. —me acusa con descaro.

—Y tú una pervertida.