El ser humano, en su inquietud por explorar el planeta llegó a las más altas montañas, a los parajes más recónditos, a las profundidades terrestres y marinas y, finalmente, quiso moverse libre por el aire y adentrarse por el espacio sideral.
Los antiguos griegos intentaron emular el vuelo de los pájaros... en la mitología. Dédalo e Ícaro volaban con plumas de ave pegadas con cera; pero Ícaro se acercó demasiado al sol, la cera se derritió y el atrevido héroe murió en su caída.
Leonardo da Vinci, ya en el século XV, al intentar resolver el problema de por qué y cómo volaban las aves, hizo muchos cálculos, trazó diseños y construyó modelos de máquinas voladoras con alas móviles y fijas. Inventó, al menos en teoría, el helicóptero y el paracaídas.
Pero la imaginación era de momento más fuerte que la técnica. Cyrano de Bergerac describe en su obra Viaje a la Luna como se traslada a nuestro satélite atado a unas vejigas hinchadas. En la luna llega a conocer extraños habitantes que se comunican mediante sonidos musicales.
Hubo que esperar a 1783 para que los hermanos Montgolfier ascendiesen en un globo de aire caliente a 300 metros sobre París.
La aviación nacería, no obstante, en 1903, cuando los hermanos Wright realizaron su primer vuelo propulsado. Su máquina voladora era controlable, a diferencia del globo que se movía con el viento.
Una vez conquistada la atmósfera terrestre, la meta era llegar más allá de la atmósfera. En 1957, el Sputnik soviético se convierte en el primer satélite artificial: comenzaba la era espacial.
En 1961 tiene lugar el primer vuelo de un ser humano al espacio, el del soviético Yuri Gagarin. En 1969, el estadounidense Neil Armstrong pisa la Luna y dice su famosa frase: "Un pequeño paso para el hombre, pero un gran salto para la humanidad". Se cumplía la visión de Jules Verne, que en una novela de ficción de 1865 describe el viaje de una nave tripulada a la Luna.
En 1975, la nave espacial Viking pisa Marte. Este planeta siempre ha despertado mucho interés por la imaginación del hombre, ya sea por su parecido a la atmósfera terrestre, por su cercanía o por su color. La gran pregunta al " planeta rojo" es: ¿Marte posee o poseyó vida?
Todo esto nos lleva al futuro.
Hay ideas como la de construir un cohete en forma de vela, que se alimentaría con energía solar o el desarrollo de un vehículo reutilizable. Todo esto nos permitiría más vuelos, lo que conllevaría a más investigación.
¿Conseguiremos viajar a un planeta de nuestra galaxia como quien va a la ciudad de al lado?
¿Encontraremos seres extraterrestres? ¿Podremos comunicarnos con ellos?
¿Nos colaremos entre los escenarios de Dragon Ball y conduciremos coches voladores?
La esperanza nunca se pierde y viendo como todo avanzó y sigue avanzando, espero que en lo que me queda de vida pueda ver respondida alguna de esas preguntas. ¿Cuales os formuláis vosotr@s? ¿Alguna esperanza para el futuro?