⇢Capítulo 20.

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Sus manos encontraron la calidez en el frío del otro al tiempo que se perdían en los ojos ajenos, ignorando todo a su alrededor mientras se dedicaban una sonrisa.

El mundo seguía girando, las personas continuaban con su vida alrededor de ellos, pero Luke y Michael estaban perdidos, uno sumergido en un océano infinito y el otro entre dos esmeraldas, las cuales brillaban con tanta intensidad que podían iluminar incluso la noche más oscura.

Pero había algo más. Y Luke lo notó.

—¿Por qué estás triste? —Preguntó al notar aquel reflejo inquietante en sus ojos verdes.

—No creo que sea algo para hablar aquí. —Susurró mirando detrás del hombro del rubio, Calum y Ashton trataban de mirar disimuladamente lo que pasaba entre ellos.

Luke volteó y miró a Ashton advirtiéndole, así que este desvió sus ojos color avellana al otro lado de la habitación y Calum lo imitó ordenando los azucareros.

Una risa suave salió de aquellos hermosos labios, lo que llamó su atención para concentrarse en lo realmente importante. Michael está triste y probablemente sea su culpa porque actuó mal con él hace unas horas.

—¿Puedes disculparme por como te hablé hace unas horas? —Susurró mirándolo directamente a los ojos. —No tenías la culpa de lo que pasó y no supe como actuar. Lo siento mucho, Michael.

No supo que decir, solo una sonrisa tímida se dibujó en sus labios cuando Luke acarició su mejilla con suavidad luego de decir su disculpa. Finalmente volvió a mirarlo con la misma intensidad que él lo hacía, sin darse cuenta.

—Está bien. —Asintió dejando una caricia suave en la muñeca del rubio. —Estamos bien, solo fue un mal momento.

—Prometo que te diré lo que pasó, pero necesito un poco de tiempo.

—No tienes que decírmelo, lo entiendo.

—Pero quiero decírtelo. —Dice acercándose un poco más, puede percibir su perfume y las ganas de cerrar sus ojos son tan intensas pero se mantiene despierto sin perderse en el aroma. —Porque es importante y debes saberlo.

Michael asintió. No lo iba a presionar, solo necesita tiempo y le dará todo el tiempo que necesite porque no quiere verlo como lo vio, algo destruido a punto de desmoronarse.

De pronto olvidaron dónde se encontraban, ambos perdidos en el otro sin darse cuenta de que había cinco pares de ojos mirándolos mientras se acercaban poco a poco, tan perdidos en los ojos del otro y en las suaves caricias que dejaban sus dedos en la piel de la mano que sostenían.

Fue Michael quien se dio cuenta al notar como Calum trataba de tener un mejor ángulo de visión.

—Muero por besarte. —Susurró cambiando la dirección de sus labios y rozando la piel de la oreja del rubio. —Pero hay intrusos en nuestra burbuja.

Luke rió algo avergonzado tapando su boca con ambas manos.

—Siempre tendremos la cocina mientras bailamos algo de tu lista de canciones.

—O el pasillo antes de dormir porque tendremos visitas a la cena. —Se lamentó recordando la invitación que le había hecho a su mejor amigo. —Olvidé mencionar que Calum va a cenar con nosotros.

—Ashton también. —Recordó el rubio con algo de tristeza. Tendrían que esperar.

—Entonces voy a preparar la comida. —su voz salió suave mientras soltaba la mano del rubio dejándola cuidadosamente en su regazo, Luke no apartó la mirada de su perfil.

⇢Café Pendiente ☓Muke Clemmings☓Where stories live. Discover now