⇢Capítulo 6.

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✸Michael.

Joy no abrió hoy. Tuvo que ir con Calum al hospital porque el muy tonto se cayó en un charco de agua y tal vez tiene una fractura en la muñeca. Lo bueno es que está de vacaciones en la Universidad.

Luke estaba vuelto loco en la cocina, cantando Milk and Cookies, gracioso. Me contó sobre el pastel de cumpleaños de Mali que era mañana y Calum vendría por el pastel. Yo estaba invitado pero no quería ir solo a esa fiesta, no será muy descontrolada porque Mali no es de ese tipo, pero no conozco a nadie. Así que pensé en hablar con ella para invitar a Luke.

Y aquí estoy tratando de convencerlo para ir.

—Michael, no conozco nadie —negó—. Además son todos unos adolescentes raros.

—Abuelo —reí y él me miró ofendido—. Vamos, será divertido, Luke.

—Puedes ir solo, sé que no te vas a perder.

—Lo sé. Pero yo sólo conozco a Calum, además Joy necesitará ayuda en la cocina.

—Me encantaría ayudarla, pero no es mi ambiente.

Bajé de la silla y caminé hasta el horno, donde él se encontraba pinchando la masa de unos pastelillos. Me puse a su lado y toqué su hombro.

—Ella estaría muy feliz de tenerte ahí —comenté—. Y Mali es simpática. Seguro la pasaremos bien.

—Michael —hizo una mueca al tiempo que lo miré haciendo un puchero—. Está bien. Tu ganas.

—Sí —sonreí—. Joy estará tan feliz. Será divertido.

—Eres demasiado insistente —bufó riendo.

—Ya sé —dije volviendo a mi asiento.

—Ahora vas a ayudarme.

Tomó mi brazo y me arrastró con él hasta la barra, donde estaba el bizcocho de vainilla esperando ser decorado.

—Luke, lo voy a arruinar —admití cuando él me dio el cuchillo.

—Debes seguir mis pasos. Son tres pisos que debo decorar y rellenar.

Asentí y vi como él tomaba el cuchillo y con cuidado cortaba una capa del pastel dejándolo perfecto y luego lo hizo de nuevo dejándolo en tres partes. Luego tomó la salsa de chocolate y rellenó junto con nueces, cuando y terminó puso la otra mitad sobre esa y repitió lo anterior.

—Quedó perfecto —sonreí nervioso mirando su trabajo.

—Te toca.

Tomé mucho aire antes de enterrar el cuchillo en la masa. Miré a Luke y él asintió, así que comencé a rebanar el bizcocho como él lo hizo. No quedó perfecto pero él aplaudió. Luego me dio crema y frutillas para el relleno.

Luke hizo el piso más grande del pastel, porque yo lo podía arruinar, además tardé mucho más haciendo un piso cuando él hizo dos en menos de diez minutos.

—Eres genial, Luke —admití mientras hacíamos el glaseado.

—Hay mejores trabajos que este.

Negué y él volvió su vista a la espátula en su mano.

—Yo no soy bueno en nada y apenas se preparar café. Mis notas eran un asco y nunca pensé en ir a la universidad. Pero tu tienes un talento genial y hermoso, además tienes tu propia cafetería.

—La cafetería era el sueño de mi mamá antes de morir —sonrió mirando la fotografía en la pared—. No alcanzó ver este lugar así, pero debe estar feliz ¿no?

⇢Café Pendiente ☓Muke Clemmings☓Where stories live. Discover now