- ¿Estás seguro de que es una buena idea?- pregunté realmente preocupada, no me parecía una decisión prudente.
- Pues claro tontita, ya tenemos todo listo para la luna de miel, deberíamos aprovechar y hacer el viaje de igual forma, hace tiempo no tenemos momentos a solas- susurra en mi oído sensualmente, me hace sonreír.
- ¿No crees que es muy pronto?
- Llevamos semanas encerrados _________! Si no quieres pasar tiempo conmigo a solas tan solo dímelo- grita Harry alterado.
- Claro que me gustaría estar a solas contigo, pero nada resulta como esperamos Harry, yo esperaba estar casada contigo y viviendo felices en la luna de miel, sin embargo tu hermano apareció a decirnos que nos venían a matar- le recuerdo- nos están buscando, Dylan no nos quiere decir aún quien o que es lo que pasará, estamos totalmente desprotegidos y tenemos 2 hijos pequeños Harry no se si has olvidado a Matty y Maia, y ¿tú quieres simplemente largarte a una luna de miel?
- No lo había visto de esa forma- se rasca la nuca- estás muy estresada y pensé que nos haría bien, perdón mi amor, pero ¿qué opinas de una cena? Hailee puede encargarse de los bebés.
- No confío en que Dylan se quede con mis hijos- le respondo.- y no quiero cargar a Hailee con dos bebés.
- ¿Acaso dudas de mis habilidades de niñera? - Hailee finge estar ofendida- lastimas mis sentimientos.
- Por supuesto que no- respondo abrazándola- vale, solo una cena.
- Solo una cena- Harry repite y me da un beso- ¿podrán quedarse solos sin matarse?- mira en dirección a Dylan.
- No me mires a mi, ella es quien está a la defensiva- se justifica Dylan.
- Perdón si no confío en ti pero no me das motivos para hacerlo.- le responde Hailee indiferente- solo estamos viviendo juntos porque nos estamos escondiendo, no porque yo lo decida.
Todo sucedió tan rápido. Un segundo estaba a punto de casarme con el amor de mi vida y al otro instante estábamos huyendo, confiando en la palabra de alguien que nos había intentado matar meses atrás, y que resulta ser hermano de mi futuro esposo.
Olvide mencionarlo, mi boda tuvo que ser cancelada después de la aparición de Dylan, según él aún no puede darnos tantos detalles pero nos están buscando desde que nacieron los mellizos y desde que matamos al padre de Gemma, dos años, dos largos años han tenido para estudiarnos, aprender nuestras rutinas, nuestros horarios, todo.
No tenemos exactamente un lugar seguro en el cual estar, así que solo nos queda confiar en Dylan, hace poco logramos perderles el rastro, pero para eso tuvimos que separarnos. Derek y Jeffrey están cuidando de Gemma, Harry, Dylan, Hailee, los bebés y yo estamos en otra casa en las afueras de la ciudad, y a tres horas de nosotros están Liam y Jacob, queremos mantenerlos seguros ahora que todo en su vida marcha de maravilla y mi pequeño ahijado está tan grande.
Como quisiera poder tener una vida normal, con mi familia, mi esposo y mis hijos, pero cada vez veo esa posibilidad más alejada de mi alcance, al punto que todos los días me mentalizo en que para mi, esta es una vida normal, es la vida que elegí, y solo me queda aceptarlo.
- ¿Lista?- me pregunta Hailee poniéndose unos guantes de tinte, sí, también olvidé mencionar que me tengo que cambiar el color del cabello, al parecer soy "la más rastreable" del grupo.- estoy segura de que el rubio te quedará genial.
- Sigo prefiriendo el castaño- respondo un tanto ida- pero confío en tu buen gusto.
- ¿Buen gusto? Mi gusto es excelente señorita- dice poniendo música en su celular...
