flirt | 34

3.1K 246 29
                                    

—¿Qué se supone que estás haciendo tan tarde en un sitio tan solo? —cuestioné, girando tan solo un poco mi cabeza para poder verlo al hablar.

—Podría hacerte esa misma pregunta, sabes —habló con obviedad y pellizcó mi mejilla, sacando la lengua cual niño burlón.

Me sonrojé, por alguna razón, de pensar en decirle que era por buscar el lugar perfecto para terminar mi cita. Solté unas pequeñas risillas nerviosas antes de hablar, encogiéndome en mi sitio de la pena.

—Bueno... —alargué las vocales, en el intento de que me tomara más tiempo—... la verdad es que... bueno, hay un parque por aquí cerca.

—Oh, sí, lo conozco. Solía ir con mis primos a jugar —asintió—. Pero ese no es el punto, seguro no solo fuiste al parque y ya, ¿o sí?

—No... la verdad no.

Soltó su agarre para mirarme riendo un poco, alzando las cejas incrédulo. Ladeó tan solo un tanto la cabeza y entonces se cruzó de brazos deteniendo su paso como esperando a que yo sola terminara con lo que estaba diciendo.

—Allá hay una colina bonita —suspiré, realmente odiando que me estuviera obligando a contarle todo esto—, y pensé que podría llevar a Jaehyun para allá después de nuestra primera cita.

—¡Anda! —se veía tan sorprendido como extrañado, retomando el caminar conmigo a su lado—. Así que sigues con ese asunto.

—Sí, sigo con ese asunto —asentí sonriendo de lado, ruborizada tan solo de recordarlo—. De hecho ya es, podría decirse, público. Así que vamos a ir a una cita oficial.

Se limitó a soltar un sonido con la garganta y seguimos caminando en silencio por un rato, mis ojos clavados en el suelo para evitar que veiera lo tonta que me pongo nada más de hablar sobre él. ¿Quién diría que quedaría así por Jaehyun?, si alguien me lo hubiera dicho hace dos meses me hubiera reído en su cara. Y ahora estaba ida por completo, recordando como en mi supuesta primera cita en la vida la pasamos juntos. Se podría decir que ahí empezó todo, ¿no? El primer día en el que no quise matarlo.

—Yo estaba en casa de Seonghwa, gracias por interesarte en insistir —habló tras unos minutos, sacándome una risilla.

—Lo siento, estaba distraída.

—¿En el maravilloso mundo del amor? —se burló con una sonrisa exagerada, acunando su rostro entre sus manos. Lo empujé por el hombro, logrando que se tambaleara unos pasos de la acera hasta la calle. Era un milagro que estuviera vacía.

—Oh, yo podría hacerte esa misma pregunta, sabes —sonreí pícara devolviéndole las palabras con las que me había fastidiado—, ¿en dónde más estarías junto a Seonghwa a tales horas?

—Oye, eres insufrible —declaró.

Así, poco a poco fuimos llegando cada vez a calles más transitadas y definí que sería la última vez que pisaría esos lares sola después del atardecer. No tardé nada en recuperarme del susto a su lado, con sus buenas bromas y simple compañía. No me había dado cuenta de la falta que me hacía, a pesar de ya no ser el tímido chico que tanto me gustaba. Pero en parte eso también era bueno, porque se le veía mucho mejor ahora, y era un alivio para mí el ver que ya fuera un chico grande valiéndose por su cuenta.

Caminamos juntos hasta que llegamos a la calle de mi casa distraídos, entonces llevé mis ojos a una figura sentada sobre las escaleras una vez quedamos frente a ellas. Por reflejo, me separé de un brinco de Yeosang, aunque ya no estuviera tomándome de los hombros. De todas formas, en cuanto se percató de nuestra presencia no pude ver más que sus oscuros ojos escudriñando entre los dos.

Flirt || Jung JaehyunWhere stories live. Discover now