10.3

12 2 0
                                    

Aprovechando que Adam mantuvo un silencio constante, María José lo explicó todo desde el principio. Desde cómo había llegado no sólo como la nueva estudiante sino con una nueva y falsa personalidad y presencia, del cómo le alegraban las notas recibidas y cómo fue casi descubierta, todo hasta sus intenciones de ser sincera y afrontar las consecuencias de sus actos. Adam escuchó atentamente cada una de sus palabras, y aunque comprendía mejor la situación, sus sentimientos no presentaban intenciones de cambiar, aún se sentía traicionado, con el corazón roto.

—¿No dirás nada?

María José no soportó más el silencio que manifestaba Adam, lo observó atento a la totalidad de sus palabras y por un momento creyó que podrían arreglar las cosas, sin embargo ahora se sentía nerviosa e insegura al respecto. Unos segundos después lo supo, los ojos de Adam se lo dijeron todo. Nada podría ser solucionado.

—Sé que no eres una mala persona y que tus intenciones nunca fueron engañarme, aunque las circunstancias te hayan obligado a hacerlo. Lo comprendo todo, el porqué lo hiciste, tus sentimientos, tus preocupaciones. Todo. —Se puso en pie y un par de segundos después continuó. —Pero no lo acepto. No lo hago. Sé qué fue difícil, pero pudiste quitarte esa carga de tus hombros mucho tiempo atrás y no lo hiciste. María José, ya no confío en ti. Ya no puedo confiar en ti como mi pareja.

No te quiero nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora