Los Min [YOONMIN] Segunda Temporada

Capítulo 11

Jimin despertó temprano, escucho el sonido de la ducha, por lo que se levantó, para ellos era normal bañarse juntos, pero entonces cuando quiso abrí la puerta descubrió que esta estaba cerrada, escucho la voz de Yoongi dentro del baño, por lo que decidió acercar su oído a la puerta.

-Bien, perfecto no vemos allí, si, si, recuerdo el hotel, vale-. Jimin se alejó de la puerta y fue nuevamente hasta su cama y se lanzó allí, fingiendo estar dormido.

Yoongi deambula un poco por la habitación, Jimin puede sentir sus pasos dirigirse de un lugar a otro, le siente acariciarle el cabello por algunos instantes y luego, simplemente le escucha levantarse y salir de la habitación.

Jimin no planeaba seguirlo, pero fue su lobo quien le obligó ir al baño, lavar sus dientes y colocarse un gran saco café sobre su pijama y salir tras su esposo.

No era el mejor manejando, pero tampoco un desastre, sin decir nada, comenzó a seguir el auto de su esposo, siendo prudente en mantener una buena distancia para no ser descubierto.

-Por favor, que vaya a verse con un empresario, por favor -. Rogó apretando las manos en el volante. -Que todo tenga una explicación, por favor -. Suplico a los cielos sintiéndose aterrado.

Al llegar al lugar, descubrió un hotel, desde la distancia vio a su esposo bajar, y entrar en este, así que le imitó, y todo pareció correcto hasta un punto en particular. Su esposo se sentó solo y pareció ordenar algo, Jimin se sentía como un maniático al estar observándolo a distancia, escondiéndose tras la carta del restaurante, pero era su lobo desconfiado y aterrado quien le pedía hacer todo eso. El animal estaba empezando a relajarse, pero, pasado menos de 3 minutos de estar allí, Jimin pudo ver aquel hombre, el omega que salió de la oficina de su esposo, el omega de aroma dulce que pudo percibir en su esposo en la madrugada.

Jimin tomó su celular y llamo a Yoongi, pero, este sólo observó la pantalla, dejando que sonase, sin contestarle, Jimin quiso llorar, pero él no se rindió y volvió a marcar y está vez Yoongi contestó.

-Estoy ocupado Jimin, ¿Es muy importante? -. El omega dudo en que responder, su voz estaba punto de romperse y no quería que fuese notado por el alfa.

-Es sábado, y no te encontré en la cama, ni siquiera sé a qué hora llegaste anoche-.

-Es parte de mi trabajo Jimin, tú estabas dormido, no iba a despertarte para informarte que llegué o que me voy a ir. Hablamos en la casa-.

-¿Dónde estás? -. Pregunta Jimin antes de que el alfa pueda cortar, Jimin le ve hacerle señas aquel omega de apariencia extrajera y bello rostro.

-En la oficina-. Jimin cubre su boca no queriendo que Yoongi escuche sus sollozos.

-¿Seguro? -. Pregunta con su voz quebrada por el llanto que él tiene que soltar en silencio.

-Sí, seguro, hablamos cuando llegue a casa, por favor no vuelvas a llamarme, estaré muy ocupado -. Jimin baja su teléfono al sentir la llamada cortada, observa la escena y cuando aquel omega se dirige al baño, él le sigue, planea confrontarlo y preguntarle qué es lo que está pasando entre ellos dos, pero entonces, ni siquiera tiene que acercarse lo suficiente cuando ve al hombre lavando sus manos, y nota allí la misma pulsera que él vio en la oficina de Yoongi. No había sido comprada para él, sino para ese hombre.

...

Desecho y con su omega en un mar de lágrimas salió de aquel hotel, condujo sintiéndose miserable hasta llegar a la que era su casa, a pesar de que su cuñada y su hermano le preguntaron que sucedía, el porqué de su de sus lágrimas, Jimin no se detuvo, subió hasta su habitación, y luego fue hasta la de sus hijos, los despertó, sin decirles nada, les pidió que cambiaran sus ropas.