Capítulo 40

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En ocasiones las primeras veces se convierten en las ultimas...






...

Jungtae trataba de mantener la calma mientras sus padres manejaban con rapidez, el desosiego se había apoderado de su cuerpo y sentía que su pecho dolía con cada sollozo que soltaba. Se había jurado no llorar en frente de su amigo, pero ahora mismo estaba solo, y dejaría que el dolor fluyera, que quedase lo más vacío de él, para poder afrontar aquella situación maduramente... ridículo quizás, pues un niño no debería de intentar afrontar con compostura una situación tan complicada como la muerte.

—Él va estar bien, lo estará—. Yoonseok quien, al oír la noticia, tomo la mano de Jungtae y corrió con los padres de este al auto, le habla, sabe que el niño no escucha, pues su mente parece no asimilar la noticia.

—El tiempo pasa rápido, ¿no es así? No notas lo rápido que avanza hasta que un día en el calendario es marcado, y lo vez cada vez encima—.

—¿Qué quieres decir? —. Pregunta Yoonseok

—Menos de un año fue lo que los médicos le dieron, pero ¿Cuánto es menos de un año? 11 meses es menos que un año, y no han pasado 11 meses—.

—Jungtae, tranquilízate—. Pide Jungkook al ver al niño roto en un llanto silencioso, pero tan destructivo.







...


Al llegar al hospital el niño corrió, observo a la madre de Hyunmin agotada, la mujer le sonrió dulcemente, y en menos de nada él ya estaba en aquella habitación.

—Lamento no ir a la fiesta, he arruinado el día de Seoknam y Joonsung—. Susurra desde aquella pulcra cama, sus ojeras son tan oscuras y su piel tan pálida, Jungtae le ve sin aquellos gorros y con la horrible ropa de hospital, le lastima el verlo conectado al respirador, el verlo cada vez apagarse más, pero es una promesa su presencia y no se ira de allí, estará siempre a su lado.

—No has arruinado nada, nunca arruinaras nada—. Le dice Jungtae con sus ojos llenos de lágrimas.

—No quiero que llores, no debes hacerlo, nunca—.

—Lo sé, pero soy un niño, lloro fácilmente—.

—Lo lamento, de verdad, lamento esto, perdóname—. Ahora las lágrimas son ofrecidas por Hyunmin. Jungtae corre para acercarse a este y tomar sus manos.

—Deja de hablar así, no debes pedirme perdón, no hiciste nada malo—.

—Lo hice, no fui fuerte, prometí serlo y no pude, y tengo tanto miedo—.

—No temas, prometí estar a tu lado siempre, lo estaré, lo prometo—.

—¿Siempre? —. Pregunta el pequeño, sintiendo sus ojos inclusive doler.

—Así será, lo prometí y lo cumpliré, traje muchos comics, y mangas, vamos a leer siempre—.

—¿Siempre? —. Vuelve a preguntar Hyunmin, mirando a su amigo con desolación.

Los Min [YOONMIN] Segunda TemporadaМесто, где живут истории. Откройте их для себя