Capítulo XXVIII

Depuis le début
                                    

El alcohol siempre nubla en buen juicio de las personas por lo mismo fue que Petter olvidó la primera y mas fundamental regla cuando estas a cargo de una persona con un elevado estado de ebriedad. "Nunca lo dejes solo ni le quites la vista de encima" Si eso sucede muy seguramente una serie de cosas malas van a ocurrir.

La primera de ellas ocurrió cuando Petter volvió al sitio en el que había dejado a Lauren con una botella de agua mineral en una mano y un paño húmedo en la otra, solo para encontrarlo vacío. Sus conocimientos geográficos sobre donde pudiera estar se redujeron a nada cuando buscó en cada sitio disponible sin ningún resultado. La última opción era el baño de chicas, pero por más gay que Petter fuera nunca iba a ser bien visto que siendo un hombre adulto se colara con las mujeres creyéndose una más. Sin importar cuan preocupado estuviera. Las posibilidades una a una, fueron esfumándose de su mente y estando a punto de romper las reglas, vio a Allyson moviéndose entre las personas para llegar a él. Agradeció a todos los santos que conocía y se reunió con ella a mitad del camino.

—¡Gracias al cielo! — suspiró  aliviado. 

—Es tarde y tenemos que volver a casa, Nicolette ya viene en camino. ¿Dónde está Lauren?

—La cuestión es que...—divagó pasando una y otra ves la saliva que se acumuló en su garganta. —Yo perdí a Lauren. La dejé sola por un minuto y cuando volví ya no estaba. Ella estaba muy ebria y tengo miedo que se caiga o que golpee a alguien.

—Creí que lo estaba pasando bien. La última vez que la vi todas las canciones eran "su canción" el baile debió haberla agotado por completo. —replicó fuertemente con las manos en la cintura. — ¿Cómo es que terminó así, ebria, agresiva y ahora también perdida?

—Su tolerancia al alcohol es mas bien poca. No ha tomado sino vodka con jugo de naranja toda la noche. — repuso serio, omitiendo los ingredientes sorpresa que añadió en su bebida y que probablemente fueron los que la dejaron en aquel triste estado. — Creo que deberías ir a con ella.

—Lo haría, pero gracias a ti no sabemos donde esta.

—Creo que esta en el baño. Es el único lugar en el que no revisé
 

—¿Por qué no solo entraste y comprobaste que estuviera bien? Es tu club después de todo. Puedes hacer lo que te plazca y nadie va a decirte nada.

—No soy un pervertido. En Baudelaire todavía tenemos principios y la privacidad es el más importante.

—¡Eres un tonto! Lauren podría estar ahogándose en su propio vomito y nosotros aquí hablando como si nada. —tan avergonzado como estaba para ver a Allyson a los ojos, Pitt mantuvo la mirada fija en el piso. —No importa, solo diles a las chicas donde estamos ¿bien?

Petter asintió, pero la rubia no esperó a verlo y sin más corrió al baño, llamando la atención de las personas que la veían entre sorprendidas y preocupadas.

Según el artículo de Betwen Lines titulado "Everytime I think of you I puke" escrito por Andrea Gilligan. Hay ocho cosas que suelen pasar en el baño de mujeres de un club en una noche de fiesta.

1- Alcoholizadas chicas que se quedan dormidas en la taza del baño, cuando hay una fila eterna esperando entrar.

2- Mientras esperan que el cubículo quede libre se dan el tiempo de hacer nuevas amigas y volverse inseparables (por al menos 2 minutos) lo mismo que dura la aplicación de lápiz labial o el retoque de maquillaje.

3- Por el fin baño queda libre después de quince minutos y entonces pasa... mientras te sientas en la taza escuchas tu canción favorita, esa que has esperado durante toda la noche, y mientras la orina cae sin descanso sientes rabia el mundo entero, por el Dj que espero hasta ahora para tocarla y finalmente por la borracha que ocupó eternamente el baño. Luego de lloriquear y lamentarte por no estar en la pista de baile, sin quererlo te conviertes en la borracha que se duerme en el baño y el ciclo vuelve a empezar

It Will Rain (Camren)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant