Si todo fuera de un color cerezo.

15. Sakura Florece.

"Sakura, ¿Quién te hizo eso?"

-Sasuke.

"¿Qué fue eso?" Intento hablar con La Pantera Negra, estoy hirviendo en fiebre, hasta parpadear es complicado, siento que mis ojos tuvieran pegamiento, siento como cuesta abrirlos y cerrarlos, "Necesito unas respuestas" Chillo mientras dejo de ver con claridad, me retuerzo unos momentos en el suelo.... Vomito de nuevo, ya no tengo nada en mi estómago, pero aun sigo con arcadas.... Tengo una sed horrible también, pero el agua no me sacia.... Pienso en suicidarme, sería tan sencillo... Saco un kunai y lo coloco en mi muñeca izquierda justamente donde esta el remolino de puntos... solo sería un pequeño corte liberador... Acaricio mi piel con el frío kunai. "No hagas estupideces. Es solo dolor, aguanta." Escucho su voz... no se si estoy muy drogada que la escucho con tanta claridad. "¿Qué me está pasando?" Le digo mientras me pongo en cuclillas y cambio los pañuelos de mis amigos... deliro de momentos y siento que estamos en misiones absurdas, hasta recuerdo hablar sola.

Abro los ojos de golpe y estamos en la habitación pequeña y oscura que ya comienzo a conocer bien, todo parece estar en blanco y negro... pero poco a poco toma color, parece de noche, miro mis manos y veo los puntos de tinta... los acaricio y escucho un grito de dolor, corro en su dirección y llego a un bosque extraño, veo animales que no existen, llueve del suelo para el cielo y los árboles tienen unas caras horrendas... Debe ser el infierno. Pienso en regresar cuando me giro y la miro en una esquina es la figura de una mujer que se encuentra arrinconada en el suelo, debe ser de mi edad, por un momento pienso que soy yo, pero su piel y su cabello oscuro me hacen entender quien es en verdad... Ella me nota y me mira mostrando que los ojos negros ya no están solos, ahora hay una especie de espinas que los acompañan, salen por su cara como un antifaz, hay también unas cuantas líneas en las mejillas, comienzo a acercarme lentamente cuando su expresión cambia "¡Largo de aquí! "Me grita mientras hace una posición de manos que no conozco....

No note el momento en el que me quede dormida, la fiebre me ha hecho delirar y en mis delirios vi a Orochimaru transformado en serpiente asesinando a Sasuke y Naruto, doy un salto y despierto con el corazón agitado, las lágrimas están a punto de salir por temor a que mi delirio fuera la realidad, pero no, gracias al cielo no, Sasuke y Naruto están inmóviles mientras duermen plenamente, la fiebre de Naruto cedió hace horas, ya no necesita que le cambie el paño de agua fría, pero Sasuke en cambio... no a mejorado mucho, me tallo los ojos y paso una mano por la mejilla de Sasuke y notó que la fiebre por fin esta cediendo, suspiro y me acomodo, mis rodillas sangran por llevar tanto tiempo en la misma posición, no creí que alguien se pudiera dormir de rodillas y mantenerse sin caer, estoy mucho mejor que en la noche, mi fiebre se contuvo pero un dolor en la mano izquierda está a punto de hacerme gritar, me he revisado pero no veo más que tres puntos de tinta en forma de remolino, Sasuke kun tiene la misma marca, pero en el cuello, Orochimaru nos la puso, no se que signifique, ya paso mi pánico por pensar que era veneno de serpiente, han pasado horas sin efecto, tal vez solo es un rastreador para que su ninja espía nos localice, espero que Sasuke despierte pronto para dirigirnos a la torre aunque no tengamos ningún pergamino, esto realmente fue extremo.

Durante la noche mientras todo estaba en calma puse algunas trampas en los alrededores de mi perímetro, me permitieron dormitar tranquilo, pero hace un par de horas una ardilla casi me provoca un infarto ya que salió de la nada y casi activa una de mis trampas, tuve que lanzarle un kunai para que no diera un paso más, fuera de eso gracias al cielo no hemos tenido más problemas.

Relajo mis pensamientos y miro hacia afuera, ya es de día, la dulce mañana a caído ya, suspiro, estoy a punto de quedarme dormida de nuevo, mis ojos se cierran solos, creo que los delirios no me dejaron dormir ni un momento durante la noche.