Capítulo 93. A los que realmente amamos.

1.2K 85 27
                                    

—¿Señorita Miller? -Escucho la pequeña voz de Victoria interrumpirme en algo sumamente importante, la ignoro- ¿Señora?

—Permíteme un segundo por favor Scott. -Pido en la línea con amabilidad, lo pongo en espera volteando a ver a Victoria con molestia- Victoria, sabes perfectamente que si mi puerta está cerrada es que necesito trabajar y concentrarme, así que sal ahora mismo. -Le ordeno molesta-

—Señora, es urgente. -Me insiste tímida-

—¿Qué pasa? -Bufo con molestia, me da pena tener a Scott en espera, quien resulta ser un cliente de conveniencia para la empresa-

—Creo que su hija ________ tuvo un accidente, tengo a un chico llamado Niall Horan en la línea desesperado por contactarse con usted.

Dejo caer mi celular al piso mientras observo a Victoria, ¿Qué ha dicho sobre mi hija?

—Comunícamelo. -Digo de inmediato, ella asiente saliendo de mi oficina, segundos después mi teléfono del escritorio suena, contesto en un segundo- ¿Sí?

—¡Claire! Soy Niall Horan. -Me dice exaltado-

—¿Qué pasa con _______? -Pregunto con temor-

—Le han disparado Claire. -Me dice entre llantos- Cayó en coma esta mañana.

—¿Qué? -Suelto de golpe- ¿Qué? ¿Estás seguro de que es mi hija?

—¡Sí! -Me insiste- No pueden estar sin saberlo.

A ver, a ver, ¿Qué ha dicho? No tengo expresión alguna, no tengo pensamiento alguno, no tengo cabeza para que reaccionar a esta información, ¿Es de ________ Blair Miller de quien hablamos? ¿Mi hija? ¿Mi hija está en coma? Le cuelgo a Niall sin pesarlo y corro a la oficina de mi esposo, joder está vacía, corro a la sala de conferencias, donde recuerdo que hoy tiene una junta sumamente importante justo a esta hora, claramente no me importó al abrir la puerta de golpe interrumpiendo la explicación de mi esposo a todos en la sala, mostrando unas gráficas en el proyector. Robert me voltea a ver con la peor mirada que puede tener, deseando matarme por haber interrumpido su junta, todos me voltean a ver.

—Robert. -Pronuncié su nombre con firmeza- _______ ha caído en coma, le han disparado.

Queda como fantasma, deja caer el marcador con el cual indicaba en la pizarra al suelo, todos los presentes voltearon a verlo, incluso algunos se pusieron de pie supongo que por respeto, Robert se dirige hacia mi con rapidez y me jala del brazo para salir de la oficina de conferencias, no me aguanto más y comienzo a llorar en su hombro, me abraza con fuerza.

—¿Qué ha pasado? -Me pregunta al masajear mi cabellera-

—¡No sé! -Le digo desesperada mientras el llanto me come- Me ha marcado Niall para avisármelo, no me dijo nada más.

—Tomaremos un vuelo hoy mismo a Inglaterra, ¿Okey cariño? -Me pregunta, yo asiento con mi cabeza mientras no paro de llorar- ¡Steven! -Grita Robert, se acerca el hombre- Márcale a nuestra piloto y dile que necesitamos el avión privado para Inglaterra hoy mismo en cuanto antes.

Tomamos todas nuestras cosas, dejamos en cargo a los vicepresidentes de la empresa que son buenos amigos, claro que la empresa no se puede quedar sin operar. Vamos en camino al aeropuerto, callados, no nos dirigimos una palabra el uno al otro, nos ayudan con las metas y subimos al pequeño avión solo para nosotros dos.

—Un gusto verlos como siempre Sr. y Sra. Miller. -Nos dice la piloto, ni ánimos de sonreír tengo, solamente asiento con mi cabeza- Esperemos que el vuelo sea de su agrado. -Nos sonríe y se pasa a retirar a la cabina-

La Criminal. Segunda Parte.Where stories live. Discover now