Capítulo 76. Ya te imaginarás.

1.2K 80 21
                                    

—¡Mierda! -Pego en el volante con tanta fuerza, limpio mis lágrimas por segunda vez- ¿Por qué? -Me pregunto a mi misma, volteo hacia casa de Harry, estoy afuera de su reja, sé que aún tardará en llegar, es momento de hacer una llamada, no puedo tomar una decisión sola, arranco de inmediato mientras marco-

—¿Sí? -Contesta esa voz masculina-

—Te necesito Jacob. -Digo agitada, deja un silencio en la línea-

—¿Qué pasa? -Me pregunta rápidamente-

—¿Estás en tu casa?

—Sí, ¿Qué pasa? -Insiste-

—Llego en veinte.

Cuelgo, manejo más rápido de lo usual y llego en veinte minutos, toco el timbre, no pasó ni un segundo cuando abrió, al parecer estaba esperando en la puerta. Analiza antes que nada mi rostro.

—¿Qué pasa? -Pregunta preocupado-

—¿Puedo pasar? -Pregunto antes que nada, ni siquiera deja pasar otro segundo cuando abre totalmente su puerta, me adentro y cierra-

—¿Qué pasa _______? -Me insiste, me volteo a verlo a los ojos, está angustiado, permanezco callada unos segundos-

—Creo que ya sé quien mató a mi hermano. -Digo segura, queda perplejo, pasa saliva y abre sus ojos como plato-

—¿Qué? -Suelta como primera pregunta-

—Creo que ya sé quien mató a mi hermano. -Repito las mismas palabras-

—¿Cómo? ¿Quién? -Se traba en sus propias preguntas-

—Víctor Thieriot. -Digo firme, joder que no se esperaba ese nombre, abre el doble sus ojos-

—¿Qué? ¿Por qué piensas eso?

Suelto un suspiro, estoy un poco agitada, tengo que contarle todo.

—Hace unas semanas recibí una carta en mi buzón diciendo que sabía quien mató a mi hermano, contesté de inmediato en otra carta preguntando que quería, dos semanas después me contestó que quería ayudarme. -Le explico, él está sin expresión alguna a toda ésta rápida información- Dejé las cartas en la barra de la cocina y hace un rato Víctor pasó a mi casa a recoger unas drogas, se adentró a la cocina y vio las cartas. -Hago una pausa unos segundos- Reaccionó muy mal, quedó perplejo al principio y totalmente confundido, y después salió corriendo ignorando mis llamados.

Mucha información para Jacob, está tratando de analizar todo, alza sus cejas sin poder creer todo lo que he dicho.

—Okey, no nos precipitemos. -Me pide con tranquilidad- ¿No crees que fue muy obvia su reacción?

—¿A qué te refieres? -Frunzo mi ceño-

—Sí. -Me explica- Si piensas que él es el asesino, tal vez hubiera actuado normal y no tan exaltado o sospechoso.

—¿Qué otra explicación encuentras a su reacción? -Pregunté arqueando una ceja- ¿Que él conozca al asesino?

—O que conozca al que te mandó las cartas.

—¿Por solo reconocer la letra? Lo dudo. -Niego con mi cabeza- Tiene más sentido que él conozca al asesino, ¡O que él sea! -Sigo con mi misma idea-

—Aún no te precipites a afirmar eso. -Niega con su cabeza- ¿Tienes algún otro hecho contra él? -Permanezco callada- Ves.

—Tengo un mal presentimiento. -Suelto un suspiro- Uno muy malo.

—¿Qué planeas hacer? -Pregunta arqueando una ceja-

—Buscarlo. -Respondo firme- Ahora mismo.

La Criminal. Segunda Parte.Where stories live. Discover now