Pokémon - Los Primeros Pasos de un Maestro

EPISODIO 38: GATEON PORT, UN PUERTO DE MARAVILLAS

Se puede ver en el escenario de la tarima a 3 Ludicolos haciendo deleite del público mientras se ve a un extravagante sujeto con una indumentaria semejante a la que en vida portara en nuestro mundo la estrella mundial Michael Jackson, con la salvedad de que este sujeto en cuestión porta un REALMENTE ENORME cabello afro colorido de rojo y blanco, cual si fuera una Poké Bola.  Se puede ver en el sujeto un excepcional dominio del baile, además de una tremenda sincronía con sus Pokémon.

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—Así que ese chango bailarín es el tal Miror B —comenta Jamemes, que junto a Jessie y Meowth están en primera fila con atuendo de vendedores de chucherías.

—Olvídate de eso, mi cuate y mira quiénes llegaron —le redirige el Chimuelo a ver al grupo de nuestros héroes.

—Sabía que los bobos llegarían tarde que temprano a Gateon Port —manifiesta triunfal Jessie.

—Ahora solamente necesitamos un plan para quitarles su Ratita Kuki —detalla el peliazul.

—Bueno, quizás salgan ahora a caminar a la playa —expresa Meowth—.  Recuerden que esos 2 tórtolos que están muy agarraditos de la mano están recientemente enamorados.  No se olviden que se llevaban ganas desde su viaje por Kalos.

—Ay, sí, ¡se ven taaaan corrongos! —detalla con voz algo delicada James.

—¡Wobbuffet!

—¿Qué va a saber una marrana de amor si nunca la han besado? —refunfuña Jessie devolviendo a Wobbuffet a su Poké Bola—.  Pero sí, creo que Meowth ha dado en el clavo.

—¿A qué te refieres, Pelos Necios? —le consulta su colega.

—Como que te hace falta oxigenar tu cerebruto, James —lo regaña Meowth.

—¡Míralo eh, Jessie!  Hay que enseñarle algo de guardar respeto a esta bola de pelos —recrimina airado Jamemes.

—¡Ustedes!  Creo que los puse a vender esos productos —los regaña su jefe temporal—, no a discutir por trivialidades.

—¡Oh, disculpe, señor! —le expresa algo apenada Jessie llevándoselos para otro lado y luego metiéndoles un coscorrón a cada uno—.  ¿Ya ven lo que hacen?

—Yo no fui, fue Teté —reclama James con cara de chiquito regañado.

—Ya déjate de lágrimas de Sandile y agarremos las palas —ordena el Chimuelo—.  ¡Que toda la arena de la playa no quede sin un lugar libre de agujeros marca Equipo Rocket! —concluye alzando una pala.

—¡A la orden, Meowth! —asienten sus humanos amigos.

—¡Wobbu!

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Mientras, en la pantalla gigante colocada en la tarima se pueden ver las diversas atracciones que posee Realgam Tower.  Una sala de eventos masivos, un gran casino, un hotel de 5 estrellas y medio, un set impresionante de arenas para batallas Pokémon, gimnasios bien equipados, spa de lujo, una playa artificial y muchas cosas demasiado onerosas.  La gente presente (muchos de ellos gente muy pudiente) están que se les sale las babas de ver las grandes mejoras que ha traído Miror B a esta torre que ya de por sí era famosa por ser un territorio altamente lujoso para la región Orre.  El bailarín del enorme afro mientras danza junto a sus Ludicolos va detallando una a una las atracciones que posee Realgam Tower.  Nuestros amigos se acercan a observar el evento.  Alakazam sigue viendo con desdén a Miror B.  Sin lugar a dudas no le agrada para nada ese tipo.