Pokémon - Los Primeros Pasos de un Maestro

EPISODIO 38: GATEON PORT, UN PUERTO DE MARAVILLAS

POKÉMON - LOS PRIMEROS PASOS DE UN MAESTRO

EPISODIO 38: GATEON PORT, UN PUERTO DE MARAVILLAS

La última vez presenciamos una batalla de entrenamiento muy reñida entre Serena e Hilda, la cual al final de la misma concluyó en un empate.  Durante el transcurso de la misma, el Maestro Will le contó a Ash algunos detalles sobre su infancia como entrenador Pokémon y cómo conoció a Trevor, el padre de Ash.

Tras eso, fueron víctimas momentáneamente de una pequeña invasión del Equipo Rocket, misma que las chicas se encargaron de repeler, enviando directamente a los 3 malandrines hasta Gateon Port, donde vieron en el aeropuerto a alguien que llegaba...

Es el anochecer en Gateon Port, cargado de una dulce frescura y un agradable aire salino, característico de todas las playas de clima tropical.  Nuestros héroes han llegado al puerto principal de Orre justo cuando el sol se ocultaba, y se puede ver a los Wingull buscando refugio en las palmeras al igual que los Pelipper, mientras en el agua del mar se observan hordas de Carvanhas y de Basculin que ya varios pescadores en el muelle se preparan para perseguir.

—Bien, playa querida, ha sido mucho tiempo desde que nos separamos —suspira Raoul con cierto aire de nostalgia.

—Veo que te agrada mucho el ambiente costero, amiguito —le expresa Alakazam.

—Así es, Alakazam —le comenta Cantor—.  Raoul y yo somos provenientes del principal puerto marítimo de la región de Arr'asah, Welcome Sunset Port, enclavado en una bahía realmente hermosa, donde la ausencia de oleaje permite a grandes y chicos disfrutar de un chapuzón en el agua sin mayor riesgo que el encontrarse quizás un Gyarados que perdió su rumbo, aunque estos resultan ser más amistosos de lo común en estos poderosos Pokémon.

—Siento que mi vida está muy enlazada al mar, amigos —confiesa Raoul.

—Se nota a juzgar por tu vestimenta, Raoul —declara Will, puesto que (como se vio desde el primer episodio) nuestro joven artista además de tener un peinado de afro (común de la gente próxima al mar) viste una camiseta amarilla con bordados de palmeras y notas musicales.

—Son casi que mis 2 pasiones, Maestro, el arte de la música y la vida cerca del gran océano.

—Las playas a mí siempre me recordarán mis peripecias durante mi viaje en lugares como las Islas Naranja, las Whirlwind Islands en Johto o bien toda la región Alola.  Son lugares rebosantes de felicidad —manifiesta Ash.

—Lo sé, querido —agrega Serena—.  Cuando visité Slateport City y Pacifidlog Town noté lo animosas y llenas de energía que son las personas que viven en lugares como éste.

—Y por lo visto este puerto no es la excepción —comenta N señalando hacia una tarima donde se puede ver mucho movimiento.

—Miren eso —añade Hilda—, parece ser a lo que Serena se refería ahora.

—Sí, Hilda —menciona Serena—.  El evento del nuevo administrador de Realgam Tower, el gran bailarín Miror B.

—Él es muy popular por su arte bailable —manifiesta Raoul—.  Pero tristemente también por su amplio historial delictivo cuando fue parte de Cipher.

—Por eso es que no me explico cómo anda así tan por la libre ese sujeto —refunfuña Alakazam—.  Nada más miren su aspecto tan deleznable.

Y en la tarima y sus alrededores se podía ver mucho movimiento.

—¡QUE LA MÚSICA SUENE! —ordena alguien a través de los altoparlantes.

La gente bailaba al ritmo de esta canción que recomiendo escuchar: