Capítulo 8. Por una vida inocente.

Start from the beginning
                                    

—¿Está mal? -Le pregunté, sentí su cabeza negar rotundamente-

—Claro que no. -Dijo segura- No está mal pensar en alguien.

—¿Y si es el enemigo a muerte? -Ríe a mi pregunta-

—Si lo pones de esa manera.. -Ambas reímos-

Volvimos a callar unos momentos. Ambas sin decir nada, cambiamos con lo que nos encontrábamos, me dio su cigarro y yo, mi cerveza.

—Tú sabes perfecto que ya es muy tarde para que alguien me importe sentimentalmente. -Dije al soltar el humo de mi boca-

—¿Entonces cuál es el motivo por el que pienses en él?

—La última vez que lo vi, le dije que podía confiar en mí, y terminamos explotando el ministerio ruso Jennifer, viéndole la cara totalmente. -Ella vuelve a reír-

—Eres demasiado extremista ________. -Dijo al darle un buen sorbo a la cerveza- ¿Y eso desde hace cuánto te ha importado? ¿Romper tu palabra?

—Nos convenía que Harry confiara en mí. -Dije sin más, ciertamente molesta conmigo misma-

—No es eso. -Negó- Te importa el oficial Styles.

—No.

—¿Entonces? No encuentro alguna lógica en tus pensamientos.

Volvimos a cambiar, regresé a tener mi cerveza de vuelta, le di un sorbo.

—Espera un momento. -Dijo después de un silencio, me separé de ella para darme la media vuelta y estar viéndonos de frente- Antes no querías meter a Harry en esto de que confiara en ti, porque sería una guerra que perderíamos según tú. -Dijo al citar mis palabras- ¿Pero ahora resulta que te molesta que ya no te tenga confianza?

—Sabes que no tuve elección alguna. -Dije con un tono de voz ligeramente más elevado con molestia- Era un buen plan. -Recordé cuando Zayn dio la idea de que yo era una buena "carnada" para Harry- Lo sigue siendo.

—¿Y por qué en ese momento no lo viste de esa manera?

—Porque lo conozco Jenn. -Dije molesta, como si estuviera arrepentida de hacerlo- No es una persona fácil de engañar y es una persona tan cruel que no le importará hacernos cualquier daño psicológico y físico, está demente. -Solté sin más- Es temiblemente inteligente para ser verdad.

Ambas volvimos a callar. Ella soltó un suspiro.

—¿Eso fue lo único que hicieron cuando se vieron la última vez?

—Cogimos. -Solté de golpe al recordar esa noche, esa noche que había sido tan diferente, que haber cogido con el oficial había sido distinto esa noche, que por primera vez había sentido al oficial sin afán de pretender algo que no es, o así quise pintarlo yo- Y desde esa noche, no lo he vuelto a ver.

—¿Fue la noche que entregamos los maletines? -Asentí- Ya tiene un mes, ________.

—Haya sido hace un año, importa un puto carajo. -Dije seriamente- Él está molesto y nos lo hará saber.

—¿Piensas que nos mate? -Niego a su pregunta-

—Nos va a ir matando psicológicamente.

—A ti no. -Dijo segura de sus palabras- Tú no tienes de qué preocuparte.

—Él sabe que para mí los más importante en mi vida son ustedes. -Dije con cierta tristeza- Claro que tengo de que preocuparme.

—Ya no te alteres al pensar en esas cosas. -Dijo despreocupada- Somos inocentes y tenemos que disfrutarlo. -Se pone de pie para encaminarse a la puerta- Entremos. -Dijo al guiñarme un ojo con una encantadora sonrisa antes de entrar a la casa-

Mierda. A ver ________, ¿Por qué mierda me encuentro pensando en el oficial? Tiene razón Jennifer, nunca me ha importado un puto carajo los demás o romper una promesa, es un demente, claro, es poco coherente decirlo viniendo desde una criminal, pero él está demente en un mal sentido. Pensamientos bombardeaban mi cabeza, no sé si tengo miedo, no sé que pasará de ahora en adelante, y lo que más ponía mis pelos de punta, es el hecho de no haberlo visto en un largo mes. ¿Qué mierda estará pasando por su cabeza?
Sacudí mi cabeza respirando hondo para sacar tantas ideas que solo me traían dolor de cabeza, me adentré a la casa. Donde se encontraban todos en la sala de pie, creando un círculo con sus cervezas en mano.

—Llegas justo a tiempo ________. -Me dijo Liam-

Me uní al círculo para saber que se encontraban haciendo. Max tomó la palabra alzando su cerveza.

—Salud. -Dijo Max al pasar la mirada sobre todos nosotros- Por una vida inocente.

—Por una vida inocente. -Repitieron todos al mismo tiempo alzando sus cervezas a excepción de mi-

Voltearon a verme, esperando mis palabras. Observé a todos de reojo. Y así una ligera sonrisa se formó en mis labios, alcé mi cerveza al igual que ellos.

—Por una vida inocente.



..

La Criminal. Segunda Parte.Where stories live. Discover now