ℂ 𝕒 𝕡 í 𝕥 𝕦 𝕝 𝕠 𝟞𝟟 Parte 2

8 2 1
                                    


Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

𝓗𝓮𝓵𝓲𝓸𝓷

Recordar la conversación con ellos era un caos. 

 Sabía que la encontraría, estaba rodeada por todos, moviéndose como un pez de aquí a allá hablando hasta los hombros, mostrándose segura. 

Hablo con Lucien, era alguien diferente, aún más extraña. 

Lucía bien, la escuché reír, no sé si era real, pero sabía cómo hacerlo. 

Al verla bailar, provocó una sensación de tranquilidad, algo que hace mucho no sentía, en esa fracción cuando ambos nos vimos, algo en mi titubeo. 

Verla de esta forma, solo era ver una parte de su interior. Su sonrisa apareció, tan llamativa, era como un fuego cálido, llamando a todos a su alrededor. En algún momento parecía sincera con algunos a su alrededor. 

No se mostraba como en la corte del día. Mostraba algo diferente entre ambas cortes. 

Note las miradas de algunos machos sobre ella, era claro que se sentían atraídos, pero no se atrevían a acercarse. 

Llamó mi atención ver el mismo brillo en su mirada al jugar cartas, escuchar la confianza, tanta para apostar una noche, nunca la creí capaz. 

La leve sonrisa que mostró al ganar, hizo que sintiera escalofríos en mi espalda. Me quedé tan quieto, viéndola disfrutar de su victoria en silencio. 

Y ahora que tenía la oportunidad de conocer más sobre ella, se esfumó. 

Bebí de la copa, acercándome al zorro, Lucien se quedó quieto, recto, observando a las masas. 

—¿Sabes sobre ella? 

—No...—así que ya había hecho su movimiento escondiéndola. 

—No está bien —apenas remoje mis labios con el alcohol. 

—Opino lo contrario, aquí no hay tantas cosas por lo que sé 

—No te ha contado todo —lo vi tensarse. 

—Tal vez, pero ella es terca 

—¿Sabes lo que hace esa pulsera? —se quedó quieto, lo conté sin rodeo, cuando supo lo demás. Esta vez sentí el cambio de su emoción. —¿Puedes mandarle cartas? 

—Sí —ambos vimos a un mismo lugar, ahí donde Rhysand y Feyre estaban juntos, disfrutando de su hijo. 

—Envíale esto, no es nada malo—el objeto aprecio dentro de su ropa. Me alejé entrando de nuevo en aquel mar de máscaras. 

※※※ 


𝓓𝓪𝓮𝓷𝓪 

La Diosa De La Oscuridad ✴Where stories live. Discover now