Cerberus

Capítulo Fünf­und­vierzig

Clasificación de Sanciones.

Se tendrán en cuenta las circunstancias de atenuación y agravación consagradas en el presente capítulo, tales como:

A1:Confesar el error antes de que se formulen cargos o requerimientos.

A2:Haber sido influenciado por un superior para cometer la falta.

A3:Intentar reparar el daño por cuenta propia antes de recibir una sanción.

A4:Mostrar compromiso y eficiencia en el trabajo.

A5: La falta no tiene un impacto significativo en la sociedad.

A6: Cometer la falta por razones nobles o altruistas.

A7: Tener un historial de buena conducta.

A8: Estar desempeñando funciones propias de un rango militar superior, si la falta está relacionada con el incumplimiento de dichas funciones.

Sebastián Maquiavelo
Desafío en la mirada.
Domingo 20 de agosto

     — Yo mate al coronel y también a mi madre, sacrifique al coronel para que no me lastimaran a mí, una vez desperté tenía todo bajo mi nombre, casas, mansiones, jet, yates, coches, tiendas de ropa, todo estaba bajo mi nombre por ser la única persona con vida, las FMSE me lo dieron como forma de pago, por mí se inventaron esa ley de mierda que dice que si estás dentro de las FMSE y alguien muere sus bienes terminan en manos del soldado de las FMSE. Ese día me dejó muerta. Soy un cadáver andante, las imágenes jamás se van de mi cabeza.

Siento ganas de llorar. Lo cual es horrible. En las FMSE nos enseñan a controlar cada sentimiento y emoción, cada gesto, cada cara, cada detalle, todo, no hay error en nuestras formas de actuar, pero desear llorar ante su verdad es horrible. Lo que sabía era poco, ahora es todo y es tan feo.

     —Me convertí en una leyenda por qué estaba loca de ira. He estado en más guerras que incluso un capitán, he decapitado, degollado, asesinado, torturado, masacrado, motilado, destrozado, todo a mi paso, nada queda vivo cuando estoy en un combate, no me quieres cerca, nadie con capacidades básicas de razonamiento me desea a su lado, no voy a dejar de masacre por nadie. Y cuando encuentre a Jian el mundo va a arder bajo el infierno que le voy a hacer sentir. Eso es lo que soy, un monstruo creado con recuerdos del pasado.

     — No quiero que cambies, entiendo en lo que te convertiste —. Le digo —. Fue horrible, pero lo comprendo.

     —¡Deja de ser tan razonable! ¡Dime de una maldita vez que soy una desquiciada! — Ella me grita — ¡Dime qué no merezco amor y felicidad, grítame que me voy a morir en soledad!

     — Ya lo sé, ya sé la verdad y aun así te deseo —. Le digo mientras me pegó más a ella, miro sus ojos y solo mantengo su mentón para que me mire —. Te deseo con fuerza, me estoy embriagando en tu puto olor hueles exquisito, dime Deniska ¿Qué quieres tú? Por qué yo te quiero.

Sus piernas tiemblan de excitación rodeando mis caderas. Escucho un chillido a lo lejos y después silencio. Ella tiembla y yo pegó mis labios a los suyos, si escucho una réplica me deslizaré fuera de su alcance. No la voy a tocar, en cambio, ella solo toma mi pecho y une más su rostro con el mío dejándome tomas sus labios.

    — Te besaré tan fuerte que consumiré cada parte de tu ira, te abrazaré tan fuerte que voy a borrar todas tus cicatrices con mis brazos —. Ella tiene los ojos cerrados y los labios le tiemblan, ella está sumida en un hechizo de mis palabras.

     — No va a funcionar —. Susurra sobre mis labios —. Siempre encuentro la manera de joderlo. Además esa es la propuesta más desquiciada que jamás había escuchado, nos conocemos hace una puta semana más o menos ¡Siete días! En serio casi caigo —. Ahora abre los ojos y pone sus brazos creando distancié entre nosotros —. Tus palabras están fuera de este mundo, ¡Dios! Realmente eres bueno en esto. ¡Voy a matar a Signé! ¿Cuánto te va a dar? ¿Dime cuánto te ofreció por hacer esto?