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Parte 60

60

Ciudad de Cochabamba

13:04 pm.

Una semana después de lo ocurrido en la comuna Molle Molle.

Joel se encontraba mirando el horizonte en una de las pasarelas del kilómetro 5 de la avenida Blanco Galindo; los automóviles y minibuses pasaban por debajo a toda prisa sin respetar ninguna señal de tránsito, y las multitudes en sus quehaceres cotidianos, habían dejado de lado la escena de los combates aéreos en la comuna Molle Molle, también se olvidaron el espectáculo de los cientos de platillos voladores partiendo del que fue alguna vez el parque Tunary –a pesar de que había cientos de videos sobre eso en YouTube- y peor aún, si se hace referencia a los acontecimientos en la ciudad de Sucre; ahora ya nada les importaba, simplemente percibían sus vidas con un propósito. Llegar al final de la jornada, cenar por la noche, dormir bien y mañana empezar de nuevo. Eso era lo único que les importaba, lo demás no tenía cabida en la vida de nadie.

Joel sin embargo meditaba en los acontecimientos pasados, en lo que vio y lo que hizo, pero, de igual forma sin que el mismo lo comprendiera, parecía que todo eso se iba perdiendo en su memoria. Comprendió entonces que más que tener la idiosincrasia de su gente, quizás más que eso, todo se trataba del propio inconsciente colectivo, del que desgraciadamente formaba parte.

Sofía y Aldo, habían salido juntos para ver una película en el cine, después tomaron un colectivo para ir un parque de diversiones, pero en el camino divisaron inesperadamente en una de las pasarelas a Joel, así que pidieron que pararan el bus inmediatamente, y este hizo su parada a decenas de metros de la pasarela.

Después de que bajaron del minibús, caminaron raudamente hasta donde Joel se encontraba, subieron por el otro lado, y en cuanto lo vieron, llamaron su atención pronunciando su nombre en voz alta, Joel simplemente dio vuelta la cabeza y sonrió.

-Joel ¿Cómo estás? ¿Te sientes mejor?- Le pregunto Sofía con mucho interés, una vez que le dieron alcance.

-Si. Estoy bien chicos ¿Cómo están ustedes?

-Pues después de lo pasado hace una semana, no creo que haya motivos para creer que la cosas mejoren.- Agrego Aldo.

-Vamos aguafiestas- dijo Sofía.- noves la ciudad, todo está tranquilo, ya no hay nada de qué preocuparse, además es probable que todo sea un malentendido, ustedes saben las cosas que anda diciendo el gobierno y esas vainas ¿Verdad?

-Puede ser...- insto Aldo.- pero... a mí me parece que algo nos están ocultando, no me convenció el discurso del presidente alegando que todo lo ocurrido, fue producto de una violación de espacio aéreo Boliviano de parte de naves o aviones o lo que sea de algún país extranjero. Y los ataques en Sucre y demás... ¿Qué paso con todo eso? Yo sé lo que vi.

-Si pero a nadie le importa.- contesto Sofía-. A nadie más, salvo a todos los que creen que todo fue real.

-Pues a eso iba- continuó Aldo.- Para muchas personas, todo lo pasado es pisado, ósea chicos no se hagan...

-Si tienes razón Aldo, pero dejando todo eso atrás como dijiste, que dicen si vamos por unos sillpanchos.- propuso Sofía, dándole una palmada en el hombro a Joel, que se mantenía distante de la conversación.

-Acabo de almorzar- les mencionó Joel.

-Y... sabes dónde estás ¿no? esto es Cochabamba....- le contesto Sofía.

-Está bien, está bien, vamos a darle unos sillpanchos.- Dio por aceptado Joel.

-Y unas chelas. – Agregó Aldo con una sonrisa de oreja a oreja.

-Pero es muy temprano para tomar.-Repuso Sofía frunciendo el ceño.

-Vamos a lo mismo ¿En dónde crees que estas Sofi...? Esto es Cochabamba....- le recordó Aldo esta vez.

Y los tres bajaron de la pasarela entre bromas y carcajadas, tomaron un colectivo y se dirigieron a la zona de Vinto a comer chicharrón y beber guarapo. Después de todo, es así como se solucionan las cosas en Cochabamba.