01.- LOVETOPÍA: LA PRÓXIMA MISIÓN DE "EL CONFI"

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Madrid, 2 de mayo de 2033. El Confi anuncia que Rubén González, su más renombrado especialista en asuntos internacionales, viajará a Lovetopía.

Acuerdos diplomáticos al más alto nivel permitirán este acontecimiento mediático. Será la primera visita oficial de un periodista español a Lovetopía. Desde su Independencia en 2015, todas las comunicaciones entre España y el nuevo Estado han estado interrumpidas.

El Confi envía a González a esta especial y difícil misión de investigación para efectuar un juicio directo y objetivo de la realidad de Lovetopía.

Lovetopía permanece alejada y misteriosa. Durante casi dos décadas, el trauma de la secesión ha impedido un examen serio de la evolución de esta parte de la península ibérica tan querida y familiar para nosotros. Los rumores y noticias que han llegado desde el extranjero son tan imprecisos como contradictorios. Y nuestros lectores, según indican las encuestas, muestran un interés renovado por un asunto que ha carecido de todo atractivo periodístico en los últimos años.

A partir de hoy, lo importante será comprender la realidad de la experiencia lovetopiana y dejar atrás viejas heridas.

El Confi es el diario de información general líder en España. En el último Estudio General de Medios, El Confi alcanzó la cifra record de 7,6 millones de lectores únicos, siendo el único medio con cobertura en todo el territorio nacional. El Confi, siguiendo su tradición de servicio al Reino de España, contribuirá con una serie de artículos a la causa de la verdad y de las buenas relaciones internacionales.

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(Martes, 3 de mayo) En marcha otra vez, querido diario. Un cuaderno nuevo con un montón de hojas en blanco esperando a ser rellenadas. Nada de ordenadores ni de intermediarios digitales entre tú y yo. Lo personal debe quedar íntimo y secreto.

Pienso en cómo comenzó este viaje. Los inicios quedan ya lejos. Las insinuaciones que se dejaban caer en La Moncloa, una tras otra. Hasta que se encendió la chispa y el Presidente presentó la propuesta como su propia y osada idea.

"De acuerdo, creo conveniente enviar a alguien de forma privada. Un periodista no muy identificado con la Administración. Alguien que pueda curiosear, lanzar globos sonda y traernos información de primera mano".

Un momento estremecedor cuando finalmente abordó el tema. Larga fue aquella rueda de prensa sobre la Unión Europea en Bruselas. Su famosa sonrisa fingida. La intriga compartida por los periodistas que cubríamos el viaje. El anuncio realizado sin desvelar quién sería el elegido. Su comentario susurrado en el avión presidencial diciéndome que tenía una pequeña aventura en mente que quería discutir conmigo, en privado.

Este viaje constituye, sin duda, una oportunidad importante tanto para mi carrera periodística como para nuestra política interior y exterior.

Los conservadores insisten en recuperar por la fuerza las tierras perdidas del Mediterráneo. Las ideas lovetopianas se filtran peligrosamente por la frontera y tienen un efecto desestabilizador. La brecha que dividió la nación en 2015 se podría cerrar. El país podría, de nuevo reunificado, superar con éxito la interminable marea de paro, hambre y violencia. Levantar quizás el toque de queda en las provincias fronterizas. Tal vez, exponiendo la realidad de Lovetopía abiertamente, las aguas se calmen y se reduzcan las voces disidentes y las protestas callejeras.

Quizás encontremos interlocutor para nuestra propuesta de reapertura de relaciones diplomáticas. Y, por qué no, también de restablecimiento de relaciones comerciales y de reencuentro de familiares y amigos. Incluso una charla con la Presidente de Lovetopía, la misteriosa Verónica Garen, puede que resulte útil. Nuestro Presidente, con su habitual descaro político, podría encontrar nuevos argumentos que exponer ante la ONU. No pasa un día sin que bancos y grandes empresas españolas presionen al gobierno para que insista en la reclamación de indemnizaciones por las pérdidas económicas sufridas tras la secesión.

Sigo dándole vueltas a qué temas tabú debo omitir, temas que quizás podrían ocasionar un resentimiento nada aconsejable. Quizás evitar hablar del proceso de Independencia o la forma en que los secesionistas minaron Madrid y Sevilla con bombas atómicas. O cómo se las arreglaron esas malditas mujeres para organizarse políticamente, suplantar las instituciones existentes y hacerse con el control del ejército. O las campañas de propaganda con las que engañaron a la población, tergiversando las causas de la crisis económica en la que estaba inmersa la Unión Europea y culpando a los líderes políticos. Muchas historias que descubrir, aunque quizás sea pronto para contarlas.

Cada vez me resulta más difícil decir adiós a mi pequeña Sara cuando salgo de viaje. Parece que el marcharme tan a menudo empieza a afectarle. Puede que Patri tenga algo que ver en el asunto. ¿De quién, si no, habría sacado la idea de pedirme que la lleve conmigo? ¡Qué barbaridad! Sumergido en lo más profundo de Lovetopía, con un ordenador personal y una hija de ocho años.

Estaré seis semanas sin Ruth. Siempre resulta estimulante alejarse durante un tiempo. Ya puedo imaginarla a mi regreso, desnuda sobre la cama exagerando su última aventura.

De hecho, me resulta emocionante pensar que voy a estar totalmente desconectado del país. ¡Sin comunicación directa! ¡Ese extraño aislamiento que los lovetopianos han impuesto durante casi veinte años! Esta vez sólo te tendré a ti, mi diario, para compartir las pequeñas cosas del momento.

Aún recuerdo mis últimos viajes a Bruselas, Alemania o Brasil y los rumores sobre los progresos de Lovetopía que la gente repetía sin cesar. Ahora, por fin, podré saber de primera mano qué es lo que pasa realmente allí.

Quizás el viaje pueda resultar peligroso. Los lovetopianos son bastante violentos y quizás me vea envuelto en algún problema. Los españoles, según afirma nuestro gobierno, somos manifiestamente aborrecidos. Y el control que ejerce el gobierno lovetopiano sobre la población no es, al parecer, tan efectivo como el nuestro. Si me encuentro con problemas, puede que su policía no sirva de nada. Los rumores dicen que apenas hay presencia policial en las calles.

Bueno, empecemos con el primer artículo. El tren es un buen lugar.

#lovetopía. El nuevo mundo que llevamos en nuestro corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora