El rey

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Habían conseguido atraer a dos más para que ayudasen a su causa, pero todavía quedaba uno que quería alistar y ese sería el más difícil de hacerlo. Por lo que había leído de él había pasado por tres etapas muy importantes.

El la etapa de su niñez había conseguido llegar al cargo de rey y ser muy amado por todos y había conseguido un buen lugar donde las personas podían vivir. Lo más problemático fue su etapa de adolescencia por así decirlo, en esa montó una liada impresionante, los ciudadanos del reino en el que vivía comenzaron a darle igual y se convirtió en un tirano. No fue hasta su tercera etapa, cuando perdió a un amigo muy cercano suyo por su comportamiento estúpido y ególatra, cuando se volvió más serio y se convirtió en un buen rey y montó una revolución que marcó su historia.

Sabiendo que Deo tendría que descansar para poder mandarle a otro tiempo tendría que hacer tiempo para la siguiente misión, por lo que dedicaría el tiempo a entrenar y a mejorar.

Acompañados por Diomedes y Aquiles fueron al campamento base. Allí fueron recibidos por Gwen y los demás. Hubo unos pocos problemas cuando Pantasilea vio a Aquiles. Esta odiaba a los héroes, y Aquiles era uno de los héroes que Pantasilea odiaba a muerte, por lo que cuando lo vio intentó luchar contra él, pero debido a la maldición del río Estigio no podía hacerle daño, por lo que solo estaba perdiendo el tiempo y sus energías.

Cuando Percy tuvo algo de tiempo fue a preguntar a Deo cuanto tiempo tardaría en tener la energía. Este le contestó que tardaría cerca de cinco días. Cinco días que emplearía en mejorar su magia y estado físico.

Percy contó los días que habían pasado buscando la orden y buscando la ayuda de los héroes ya había pasado cerca de los dos meses que le había dado Erebus después de infiltrarse en su base.

En esos días de entrenamiento fueron pasando. Percy había estado entrenando en el uso del agua y en su magia, intentaba cambiar la forma de los objetos cada vez siendo más grande esos objetos.

Con el agua había conseguido crear las muy grandes con las que podía atacar a sus enemigos. Esto era practicado en el campamento Mestizo, mientras que en el campamento base entrenaba con la magia. También hacía cosas como asegurarse de que todos estaban bien, que Aquiles y Pantasilea no destruían en campamento en una de sus estúpidas peleas. El rey Alejandro estaba formando a los semidioses para que pudieran pensar con rapidez en la batalla mientras los más inteligentes pensaban en algo o indicaban estrategias y Diomedes era el más tranquilo de todos. Él fue el único que quiso aprender más sobre el contexto histórico de donde estaba, por lo que los dos primeros días, acompañado de los hijos de Atenea, estuvo estudiando sobre donde estaba. Después ayudó a los soldados que se calificaban como los más débiles y de apoyo para que pudiesen defenderse por ellos mismos cuando fuese necesario.

- Oye, Percy. - Dijo Clarisse mientras entraba en el despacho del chico. - ¿Dónde quieres ir para la próxima ayuda?

- A un lugar muy alejado de la línea del tiempo. - Dijo Percy muy serio mientras hacía un poco de ejercicio. - Debido a la lejanía lo más seguro es que o vaya solo o con dos personas como máximo, aparte de que será el último viaje que hagamos, eso dejará a la orden sin fuerzas para poder defenderse en la batalla contra Erebus.

- Hablando de eso. - Dijo la hija de Ares. - No queda mucho tiempo para eso. - Dijo ella muy seria. - Como mucho una semana y ni si quiera sabemos el lugar o el día, ni si quiera sabemos que va a tener en nuestra contra.

- Sombras. - Dijo Percy mientras dejaba de hacer abdominales y se ponía en posición de hacer flexiones y le indicaba a la chica que se sentara en su espalda, esta cedió a su pedido. - Las sombras serán nuestros principales enemigos, junto con los titanes y esperemos que no haya contactado con Tártaro para que le preste su ayuda.

El rey de los mestizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora