El baile de fin de curso

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Era un día como otro cualquiera en el que Percy estaba en la biblioteca de su universidad investigando y redactando su trabajo sobre Orión cuando de repente este recibió una videollamada de una persona que nunca esperó tener.

Debido a las posibles clases se se convertían en conferencias, o que trataban de temas que el ya sabía, siempre tenía abierto Skype para poder ausentarse en esos casos. Por lo que cuando recibió esa llamada lo dejó congelado.

En la pantalla de su ordenador había saltado la interfaz de llamada que tenía de icono la cabeza de un jabalí, debajo de esta aparecía el nombre de Clarisse La Rue.

Estaba contrariado el joven. Nunca antes había recibido una llamada de alguien del campamento que no fuera Quirón.

Percy tenía curiosidad, por lo que aceptó la llamada y vio la cara de la chica, por alguna razón parecía molesta.

- ¿Por qué me llamas? - Preguntó el chico confundido.

- Joder, si lo dices así pareces que no quieres que te hablen. - Dijo la chica ganando una palmas levantadas de Percy que indicaba el mea culpa. - Te llamó para pedirte algo que para mí es muy vergonzoso, por lo que quiero que escuches y no hables hasta que yo te diga. - El chico asintió y ella cogió aire. - No se si lo sabrás, pero los institutos tienen la mala costumbre de hacer un baile cuando se acaba el curso haciendo que las chicas se vuelvan locas esperando que uno de los chicos les pida ir al baile. - Dijo ella soltándolo de golpe. - Yo nunca he ido porque me parecen una estupidez, por qué tengo que ir a una cosa que ni si quiera me gusta. Pero esta vez, unas chicas que podían pasar perfectamente por hijas de Afrodita me han dicho que no voy porque no tengo a nadie con quien ir.

- Y te has enfadado y has dicho que iras, ¿Me equivoco? - Dijo Percy con una ceja alzada ganando un asentimiento por parte de la chica. - Y ningún chico te lo ha pedido, ¿Cierto? - Volvió a asentir esta vez con la cara muy roja. - Yo tampoco he ido a un baile nunca, me pilló muy joven, por lo que no me molestaría ir contigo al baile.

- ¿En serio? - Dijo ella alzando la mirada con los ojos completamente abiertos.

- Para eso me has llamado ¿Cierto? - Dijo Percy con una sonrisa de confianza haciendo que la chica mirase a otro lado. - ¿Dónde vives?

- En Phoenix, Colorado. - Dijo ella. - Pero no creo que sea bueno que tomes un avión, Zeus podría cabrearse.

- Conque me enseñes una foto con el porche de tu casa me sirve. - Dijo Percy manteniendo la sonrisa. - La magia de los portales.

Clarisse asintió y se ausentó dejando a la vista el cuarto que ella tenía en su casa. Era una habitación normal y corriente, tenía las paredes blancas y tenía algún que otro poster de la película de "300" colgada en la pared con Leónidas gritando a la cámara.

No pasó mucho tiempo hasta que la chica volvió con lo que parecía ser una cámara instantánea en una mano y una foto en la otra. Esta enseñó la instantánea mostrando una casa típica del sur de Estados Unidos  con un pequeño banco en el.

- Este es mi porche. - Dijo con normalidad. - ¿Seguro que podrás llegar?

- Si, dime cuando es el baile. - Dijo Percy como si nada.

- Mañana. - Dijo haciendo que el chico la mirase muy sorprendido. - Mi madre me compró un vestido cuando le dije que iba a ir.

- Yo no tengo traje. - Dijo Percy mientras comenzaba a recoger sus cosas. - Te dejo, tengo que irme y prepararme.

En ese momento se despidieron y este abandonó la biblioteca. Mientras caminaba consultó su horario y vio que no había clases, por lo menos de importancia, a las que ir por lo que terminó yéndose también de de la universidad.

El rey de los mestizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora