Capítulo trece : Hagamos un trato.

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"— Hyung...

— Dime, amor.

— ¿Quién es ella? Y ¿por qué vino a quedarse?

— ¿No te gusta bebé?, si es así dímelo y la enviaré fuera.

— No, no, solo es curiosidad.

—Pues... es hija de unos viejos cenadores, fuimos un poco cercanos un par de años, trajo una propuesta de negocios, que deduzco no me incluye solo a mi, se quedará un par de días a partir de hoy y luego regresará a su país."



— Señorito Kim, ¿está usted bien?

— Si, si... ¿me decía algo?

— Tzuyu, déjamelo a mi, anda, yo hablo con él.— mi pelinaranja amiga, me mira con una expresión de pena y angustia en el rostro. Y no la juzgo, mi aspecto deplorable, parezco sacado de una película de zombis.

Tengo los ojos hinchados, con dos círculos amoratados bajo éstos, estoy prácticamente arrastrando las comisuras de mis labios y las facciones en mi cara son inexpresivas.

Y es que funcionar con dos horas de sueño, no es normal para mi. No he podido dormir muy bien últimamente.

¿La causa? Jungkook.

Han pasado tres días seguidos, en los que he visto y sentido a mi azabache, abandonar la cama a tempranas horas de la madrugada, al principio, imaginé que iría por un vaso con agua, para luego volver y recostarse conmigo en la cama. Pero no fue así, él regresaba hasta las seis o siete de la mañana, horas en las que se "supone" sigo dormido. No siendo suficiente sospechoso, Jungkook volvía bañado y cambiado. Y no, no se duchaba aquí, él ya venía así, de quien sabe donde mierda.

Además, de que cada prenda con la que se iba, estaba perfectamente lavada y tendida en la lavandería de la mansión, pero ¿saben cuál es la mejor parte? Que como el maravilloso hombre que es, me esperaba sonriente en el comedor, como si todo marchara con normalidad, ¡joder! vaya cínico de mierda.

Y si, sé que parezco una de esas esposas cuarentonas, viejas y gordas, que tienen sexo dos veces al mes, y aún así, son más tóxicas que Chernobyl con sus esposos barrigones. Pero es que ¡joder! no puedo evitarlo, además, prestar atención hasta en el más mínimo detalle, no es mi culpa. Estudio derecho, las labores investigativas de los fiscales, abogados, jueces y todo el órgano jurisdiccional, requieren de atención, y exhaustividad.

Trabajamos con criminales, con escenas del crimen de spicópatas, que han planeado todo a la perfección. Causa y efecto, no importa qué, aprendí qué todo en esta vida lo tiene, así, que el que Jungkook haga todo esto, tan limpio, debe tener un trasfondo, porque ¿casualidad? no lo creo.

Pero, si piensa que me va a ver la cara de estúpido, está muy equivocado. Hoy en la madrugada, no voy a esperar despierto como en cada ocasión, por el contrario hoy, voy a seguirlo, y descubrir que coño oculta.

Pude preguntarle,si. Y pudo responderme con la verdad, también. Pero no, quiero descubrirlo por mi propia cuenta, porque realmente odio preguntar cosas que si confiaran en mi, o me tuvieran el estima suficiente me lo hubiesen dicho por su mera voluntad.

Y pues, volviendo a la realidad diaria, continué con mi mañana con normalidad, desayuné junto a ya saben quien, y por dicha, sin la compañía de la tipa esa, pues según fuentes de información —ósea Misuk—Jungkook le mandó a decir, que bajara a desayunar cuando nosotros culmináramos.

Luego, fui a  mi entrenamiento de artes marciales, y dado a que siempre termino molido, simplemente me desparramé en una de las tantas mesas del jardín, a ver el cielo y sentir los tibios rayos solares, acariciar mi piel.

Bratvá - KookV ℘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora