La Cámara de lo Penal, Sección primera de la provincia de Seúl, este día Jueves cuatro de noviembre del dos mil veintiuno, en audiencia resolutoria contra el señor Jeon Jungkook de nacionalidad Rusa, con número de expediente : 2-5-0-7. Procesado po...
Un amanecer con trinos de pájaros, un respirar profundo y un calor acogedor gracias a las suaves telas que me resguardan del frío, son las maneras en que la mañana me recibe. Puedo escuchar el aleteo de las aves afuera y el apacible sonido de las hojas danzar junto al viento... es sin duda, la forma en que la naturaleza da a luz un día más.
Me removí perezoso sobre el cómodo colchón, no quería levantarme, hace mucho que no duermo tan bien, y que despierto con tanto ánimo. Todo marchaba de maravilla, hasta que traté de sentarme y una punzada en la cabeza me trae de vuelta a la realidad.
Joder, ¿que tanta mierda tomé ayer?. Con toda la flojera del mundo, abro lentamente mis ojos, dejando que se acostumbren poco a poco a la luz del día y al cabo de unos segundos, mis pupilas logran enfocar bien mi alrededor. Entonces lo primero que veo es un encielado parecido al de la realeza...
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Me pierdo unos segundos, viendo un punto fijo en las finas pinturas que lo componen... el sofisticado candelabro que cuelga de él, solo me hace pensar que debe ser un hotel demasiado, pero en serio demasiado caro, y únicamente puedo preguntarme dos cosas : ¿por qué mis amigos rentarían un lugar tan lujoso para que pasemos la borrachera? y segundo ; ¿Quién de nosotros pagó el hotel? Aggg, seguro como estaba hasta el culo de ebrio, Jimin, Choi y Mina se aprovecharon de mi y me hicieron pagar.
Mis ojos, viajan curiosos hacia todo mi al rededor, mi sistema alarmándose al ver mi atuendo de ayer doblado en la mesita de al lado, inmediatamente bajo la vista a mi pecho, encontrándome a mi mismo con un juego de seda para dormir...
No puede ser... y-yo, no pude... no pude haberlo hecho o ¿si? Separé sutilmente el elástico de los pequeños shorts que traigo puestos y cierro los ojos con fuerza al verme con unos bóxer distintos a los que me puse ayer. La pregunta es :
¿Con quién mierda me acosté anoche?
Me dispongo a sentarme de una buena vez, mala idea, todo me dio centenares de vueltas, ¡joder!, aún así la vista era tentadora y no evité deleitarme con cada detalle de la habitación...
La jodida cama en la que tengo el culo es de la seda más fina que mis ojos han visto. Me tomé unos segundos para acariciar la tela entre mis manos... ahora entiendo porque aún con la borrachera del siglo logré dormir como un bebé...
Lo siguiente que vi fue una televisión enorme frente a la cama, cortinas finas, de un color azul rey, joder, que buena pinta, la decoración clásica es de mis favoritas.
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