Capítulo dos : Desatino.

55K 6.3K 7.9K
                                    




La monarquía, al igual que la democracia, el comunismo y socialismo, es también una forma de gobierno. En mi amada Rusia la monarquía es parlamentaria, esto es; que el rey es el jefe del Estado y su máximo representante político, pero la jefatura de gobierno está a cargo de un Poder Ejecutivo encabezado por un Primer Ministro, que, como jefe de gabinete, actúa en nombre del rey.

Han escuchado aquel viejo adagio de "el rey reina, pero no gobierna", bien, pues esto es así porque es el rey quien toma todas las decisiones de Estado, pero quien las anuncia ante los medios es el primer ministro.

A lo largo de su prolongada historia, los gobernantes rusos llevaron el título de Veliky Kniaz que significa Gran Duque o Gran Príncipe y por último se les denominó : Zar y Emperador de todas las Rusias.

Ahí es donde entra mi familia ; los grandes emperadores de la nación, de mi abuelo a mi padre, y de mi padre a mi, el poder absoluto descansa en nosotros : "El linaje Sagrado."

Yo, Jeon Jungkook soy el Zar de Rusia.


— Jungkook.

— Nam. — contesté sonriente y sin más me acerqué a él, correspondiendo al abrazo que me ofrecía.

— Mierda, pero si estar preso te ha sentado de maravilla, te ves muy bien, incluso hasta más musculoso.— canturrea simpático mientras aprieta con ambas manos los músculos en mis brazos.

— Vaya, eres un adulador. — lo escucho reír alegremente, para volver a dirigirse a mi :

— Cámbiate, tu traje está en el mostrador, andando hombre, qué tienes una reunión que atender.

— ¿ Edificio Lotte World Tower?.

— Así es, el auto está fuera, adelántate yo iré por las carpetas., salgamos de esta puta mierda de una buena vez.

Asentí de buena forma ante sus palabras, me encaminé hasta los vestidores. Estaba culminando de abotonar mi saco, cuando escuché un silbido pretensioso, seguido de una voz un tanto grave.

— Así que el gran emperador se marcha... es una lástima que no te quedaras un poco más, nos habríamos divertido.

— Me divertí lo suficiente viéndote en cuidados intensivos, así que para mi no es una lástima. — emití a la defensiva, sonreí con malicia al verle apretar los dientes en signo de ira.

— Nos volveremos a ver hijo de puta, y yo seré quien te observe rogar por vivir postrado en una camilla.

— Mmm, lamento desilusionarte, pero creo que lo último no podrá cumplirse, quien sabe y la próxima vez que te vea sea en el infierno al que yo mismo te mande. — finalicé dejando salir pequeñas risitas.

La voz de una guardia, hace presencia en el lugar :

"Hey, cero siete, andando, deja de estarlo jodiendo"

— Ya va, ya va. Hasta pronto Jeon Jungkook, hasta pronto.

Dicho lo anterior, ladee mi cuello para alejar la tensión. Cogí una última bocanada de aire y salí del lugar.

Una multitud de periodistas atestaban el lugar, esperándome como su fiel carnada.

Es una verdadera lástima que no fuera así.

El orgullo que siento me invade cada glóbulo sanguíneo, al pasar con la cabeza en alto justo al lado de todos ellos, sin ningún disfraz, ni tratando de camuflar mi presencia.

Negué repetidas veces mientras reía a viva voz.

El verdadero Jeon Jungkook soy yo hijos de perra, no ese mocoso al que están asfixiando con preguntas.





Bratvá - KookV ℘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora