Capítulo 25
No recuerdo mucho de ese día, todo fue tan rápido; Desperté 20 para las 8:00am, no había podido dormir mucho la noche anterior, estaba agotada física y mentalmente, ahora me encontraba frente a una maleta empacando de vuelta, aun me quedaban cosas por introducir en ella pero me asustaba cerrarla, una gran incertidumbre crecía en mi interior y me carcomía las entrañas no era solo el hecho de cerrarla y montarla al carro sino lo que pasaría después ¿Qué pasaría? Llegaría a Seúl me presentaría a trabajar como si nada hubiera pasada, ignorando los últimos dos meses de mi vida ¿me quedaría con Daehyun? ¿Olvidaría a Yongguk o volvería a sus brazos?
Mierda…
Todo aquello me resultaba tan confuso.
Me di por vencida ante aquella valija estrelle la tapa contra el contenido y gruñí cual niña pequeña mientras le sacaba la lengua al vacío, después de algunos segundos suspiré y Salí de aquella habitación ya no aguantaba ese aire tan pesado.
-Noona ¿Puedo hablar contigo? – la voz de YoungJae me tomo por sorpresa.
-Claro – dije un poco desganada, mientras dirigía mi cuerpo a su dirección.
-Ven vamos al muelle.
El chico se aferró a mi antebrazo, YoungJae caminaba serio con pasos firmes y tensos golpeando cada vez que tocaba el suelo, su rostro carecía de expresión y solo miraba al frente, no podía descifrar aquello nunca lo había de esa manera y era más que evidente que algo le molestaba.
-Noona – hablo en seco cuando habíamos llegado a un lugar algo alejado del condominio -¿Qué es lo que en realidad sientes por Dae?
Abrí los ojos como platos, si no hubiera estado aferrado cual fiera a mi antebrazo probablemente hubiera caído de espaldas a la arena, no esperaba esa pregunta me la había hecho mil veces durante los últimos días pero no la había escuchado nunca en voz alta y ahora más que nunca me daba cuenta que no estaba ni tan siquiera un poco cerca de descubrir la respuesta.
-No lo sé – hable bajo, en un hilo de voz poco audible, agachando la mirada para no encontrarme con aquellos ojos cafés que probablemente me mirarían recriminando aquella respuesta.
-Por favor – hablo después de un rato de silencio.
Lo mire confundida, aquellos ojos suplicantes me hacían sentir más idiota de lo que me sentía; básicamente más mierda de persona.
-No lo lastimes…
Y esa fue la cereza que adorno el pastel.
Me quede callada sin saber que decir ni que hacer, de antemano sabia, que esos dos eran como hermanos y obviamente le dolía todo aquello, ¿curioso no? como el amor afecta más de a uno, se va convirtiendo en aire que de pronto todos respiramos, de pronto la personas cercanas adoptan el dolor como propio y ya no es solo uno el sufre sino un grupo que sin querer se han visto en vueltos; con aquello ya había más de tres corazones rotos, empezando por el mío; Quien amo demasiado pronto, encariñándose de una idea y no del individuo, el de Himchan; Quien ama profundamente al que no puede ser suyo, el de Yongguk; Quien sin querer había entrado en un dilema entre el amor y el deseo, el de JiEun: víctima de una traición pura, el de Daehyun; Quien se había puesto a volar sin esperar a que las alas despegaran y ahora el de YoungJae quien sería testigo de aquella posible caída inminente.
-Jae… yo… – hable torpemente gracias adiós el interrumpió de inmediato.
-No digas nada, el escribió esta carta, se deshizo de ella y yo la recupere, cuando la leí, me di cuenta que él va enserio, muy enserio.
Me pasme un segundo mientras el soltaba mi brazo para llevar su mano al bolsillo del pantalón, sacando el papel doblado descuidadamente posándolo en frente de su rostro y empezando a leer, no sin antes aclararse la garganta.
-“Querida Nataly Grey:
Tú, como un dulce sabor salado,
Anoche mientras dormías miraba tu melena dorada con cara de idiota y hoy te doy mi corazón y sus instrucciones en una nota; He decidido que quiero protegerte, algo en tu rostro me lo pide a gritos, hoy te eh visto llorando y desmoronándote justo frente a mí, no puedo explicar con palabras la impotencia que sentí, me dolió ¿sabes? Ese día, no solo una parte de ti murió, sino una de mí también, me di cuenta que sí tu cielo brilla el mío también brillara y que si en el tuyo llueve en el mío también lloverá, y yo odio la lluvia. La odio tanto como verte a ti sufrir, Nat, tienes que creerme estoy aquí y soy real y no dejare que nada malo te pase, perdóname te lo suplico eh llegado tarde, no puede enamorarte primero que él y me arrepiento, no me di cuenta de lo que sentía hasta muy tarde, ahora te pido que me aceptes; refúgiate en mi si quieres, sé que temes romperme el corazón, lastimarme, hacerme daño, pero eso ya no me importa, Nataly te estoy eligiendo a ti, elijo que la que me hagas daño seas tú, párteme en dos si quieres, sería un honor llorar por ti, sería un honor que me rompieras el corazón.
Pues soy feliz así, con estas pequeñas cosas que me unen a ti como cada pétalo a su rosa, tu perfume me despierta pone alerta a mis sentidos. ¿Conocerte fue casualidad? ¿O causa del destino? Gracias cada detalle, por pequeño que parezca, las almas separadas por el cuerpo necesitan estar cercay tú eres la mía, una piel una blanca no se olvida y lo siento pero solo tu conseguiste ser mi tipo.
Querida alma gemela espero que me leas, allí donde quieras que estés lucharé contra el viento y la marea, yo sé que es así, no espero que me creas, busco mi otra mitad y no hay duda de que tú lo seas. Confía en mí, no dejare que la vida te vuelva a golpear.”
-DaeHyun-
Me quede un segundo pasmada las lágrimas calientes habían empezado a correr por mis mejillas.
-Esto lo escribió… - hable casi sollozando.
-La noche en que Yongguk se fue.
De nuevo me sumí en un silencio en el que me debatía internamente, aquello me había dejado sin habla.
-Nataly él se deshizo de esta carta porque no quería que tú te sintieras más presionada o comprometida hasta cierto punto… - lo mire directamente este aprovecho para secuestrar mi mirada – Él te quiere y no sé qué clase de relación hayas tenido con Yongguk, el no habla mucho de eso, pero si se una cosa; él nunca se había tomado el tiempo de escribir para alguien, la única carta que ha escrito para alguien aparte de esta, fue cuando su abuela murió…
Arquee las cejas confundida “El amor se mide en acciones no en palabras” pero hay veces que las acciones llevan palabras de por medio, palabras que sin duda me habían hecho comprender varias cosas.
Caminamos de regreso al condominio sin decir palabra, la pequeña reunión que los chicos habían organizado para despedirse de la playa había comenzado y fue ahí cuando me di cuenta que ya eran más de las 3 de la tarde y que solo nos quedaban 2 horas más en aquella playa…
-¿Dónde has estado?
-Dae, necesito hablar contigo – contemple al chico, quien me miraba expectativo, se movió mecánicamente hasta llevarme a un lugar alejado de los otros 4 bailarines que disfrutaban de la música pregrabada y el “jugo de manzana” que habían comprado.
-Antes de que hables o digas cualquier cosa – dijo acercándose a mí – concédame esta ultime pieza sobre la arena My lady…
Él puso una canción lente en su teléfono y yo accedí rodeando su cuello con mis brazos, nos balanceamos de un lado a otro siguiendo la música, disfrute de aquel cálido momento junto a él, y pudo jurar que ahora todo tenía sentido, todas las dudas, todo el temor que sentía se iban desvaneciendo poco a poco junto con aquella pieza, las ultimas notas se llevaron la incertidumbre y esa parte donde la ansiedad había encontrado su acomodo, ahora se acomodaba la tranquilidad que solo Daehyun sabia darme.
Lo mire cuando la canción había acabado, sus ojos, su boca, todo el me miraba a la expectativa, sabía lo que estaba por venir, mire sus labios de nuevo y un deseo en mi surgió de la nada, ahora solo quería besarle.
Se tensó un poco ante el tacto de nuestros labios pero me correspondió al instante, nos sumergimos en el aquel beso que ambos disfrutamos al explorar los labios del otro.
-No pensé que besaras tan bien - dije al separarme un poco, aun a muy pocos centímetros de él.
-¿entonces esto significa? - pregunto sonriente.
-Significa, que yo también lo elijo a usted, Señor Jung.
Rio un poco mientras me abrasaba.
-¿Leíste la carta?
-Me la leyeron – dije correspondiendo al abrazo.
-Habrá que castigar a YoungJae…
-Si digamos que habrá que castigarlo…
Hola chicas, lamento la tardanza;) eh tenido una semana larga, aquí les dejo este cap espero que les guste y creo que con esto llegamos al ombligo de la historia, creo que más o menos serán como unos 50 capítulos por lo cual procurare subir más a menudo como las amo demasiado esperen a un posible maratón esta semana!!! Jijiji yay!!! Porfa voten, comenten que tal les parece la historia que saber su opinión….. Y no olviden que las amo.