𝟤𝟪| 𝖠 𝗉𝗈𝗋 𝖾𝗅 𝗈𝗋𝗈

2.3K 142 11
                                    

Lx Aᴍᴇʀʏ

—¡Será inteligente el cabrón!—me llevé las manos a la cabeza—¡Joder!—

—¿Qué?—JJ se mostró confuso—¿Qué pasa?—

—¡Ya sé lo que planea mi padre!—le di un puñetazo al aire.

—Alexia, ¿de qué demonios hablas?—

—Lo entiendo todo, JJ, TODO—le cogí la cara con ambas manos—Sé por qué ha traído a Big John, sé por qué tiene ese número de teléfono y sé qué es Steele Hills—

El rubio posó su vista en mis labios y yo me di cuenta de que estábamos demasiado cerca.
Me alejé un poco de él y sonreí.

—¿Me lo vas a contar o voy a tener que sonsacártelo?—preguntó.

—Caleb Harrison es un agente electoral. Está ayudando a mi padre con una campaña—

—¿Se va a presentar a alcalde?—

—¡Él no!—le señalé—Lo hará Big John. Piénsalo, ¿vale? Es un ciudadano ejemplar, querido por todos. Los vecinos le adoran, y todo el mundo le tenía mucho cariño. Prácticamente vuelve de entre los muertos. Es la historia perfecta, para el candidato perfecto. Podría hasta escribir una biografía. "De náufrago a alcalde; John Routledge"—

—Yo le votaría—

—Lo sé—asentí—Es justamente por eso por lo que se presenta—

—¿Y por qué quiere tu padre que Big John sea el alcalde?—

—Porque mi hermana me dijo la verdad en una cosa, la primera vez que hablamos: quiere acabar con los poges. ¿Cómo va a hacerlo? Con Steele Hills—busqué la imagen del cartel en el ordenador y se la mostré—Quiere construir una urbanización. ¿Ves ese faro? El de la señal. Es nuestro faro. Es Redfield. Compró los terrenos para ello, y por eso tiene los planos que encontramos—

Busqué esa otra imagen, y se la enseñé.
Después abrí un mapa de los Outer Banks. La forma de la costa coincidía.

—La hostia—comentó JJ—Pero, ¿cómo sabe que saldrá elegido alcalde?—

—Porque Big John tendrá todos los votos de los poges. Al fin y al cabo, él es uno de ellos. De nosotros—

—¿Y qué hay de los kooks?—

—Le votarán también. Porque les interesa acabar con el barrio pobre y tener una moderna urbanización que atraiga turistas y gente rica—

Suspiré una vez terminé de explicarlo todo.

—Vaya—el rubio bajó la vista—Eres más lista que el hambre, Alexia—

Sonreí al escucharle.
—Esta es nuestra última oportunidad, JJ—ladeé la cabeza—He ido todo el tiempo un paso por detrás de mi padre, pero ahora lo entiendo todo. Y él no lo sabe—

—Un momento, ¿y qué hay del oro? ¿Dónde está?—

—Me dijo que lo había metido en el banco, pero es imposible cargar 400 millones de dólares a tu cuenta sin mostrar las razones y documentar cómo lo has conseguido—expliqué—La campaña son ganancias, si Big John sale elegido podrá justificar la mitad del dinero, y con la urbanización la otra mitad—

𝖥𝗂𝗋𝖾 [𝖩𝖩 𝖬𝖺𝗒𝖻𝖺𝗇𝗄]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora