𝖥𝗂𝗋𝖾 [𝖩𝖩 𝖬𝖺𝗒𝖻𝖺𝗇𝗄]

𝟣𝟩| 𝖵𝖺́𝗆𝗈𝗇𝗈𝗌 𝖺 𝖼𝖺𝗌𝖺

—Hey, soy Alex—respondió al otro lado de la línea.

—Oh, hola, Hunting, ¿qué pasa?—me asomé al pasillo y busqué a JJ con la mirada.

—Sólo quería preguntarte si ibas a ir a la fiesta de esta noche. En la playa—

—Si, los poges y yo nos apuntamos—caminé por la casa intentando encontrar al rubio, sin éxito. Sin embargo, vi a Sarah—Un momento, Alex—bajé el móvil y me dirigí a ella—¿Has visto a JJ?—

—Acaba de irse—respondió la rubia—Me ha dicho que iba a comprar bebida y eso para la fiesta—

—Oh, vale—volví a atender al teléfono—Ya está, ¿quieres algo más?—

—En realidad no. Es todo—negó—Supongo que nos vemos en la fiesta—

—Si, claro—

Me despedí de Alex y volví a mi habitación.
Me senté en mi cama y volví a coger el ordenador, pero hubo un par de pensamientos que me agobiaron.

¿Le pasaba algo a JJ? Sí, posiblemente, pero, ¿qué? ¿Era algo grave?
Por otro lado, tal vez no era nada, pero esta opción me parecía menor.

Tendría que haberle hecho caso antes, pero esto es importante. Es muy importante.
Mi padre está planeando algo y yo tengo que pararlo. Por los poges y por él. Todo esto lo hago por nosotros. Por todos nosotros.

Nos estamos jugando 400 millones de dólares.

[...]

Pasé muchas horas en el ordenador, abriendo y leyendo todo lo que Jazz me había enviado, sin encontrar nada.
Había documentos de Word, imágenes, vídeos, documentos en Excel y un millón de cosas más.

Los de Excel eran simples cuentas, supuse que sobre la empresa. Contabilidad, y eso.
Aún no había entrado en la parte de las imágenes, y no llevaba ni la mitad de documentos.

—Alexia, ¿estás lista para la fi...?—Kiara entró en mi cuarto—¿Qué haces?—

—Nada—cerré el ordenador—Estaba buscando algo, no importa—

—Bien, vamos, vístete—

—¿Qué hora es?—pregunté frotándome un poco los ojos. Me molestaba la vista después de tanto tiempo en el portátil.

—Las nueve—respondió—Supuestamente la fiesta ya ha empezado—

Miré por la ventana y vi que ya estaba oscureciendo.
Me levanté y dejé el ordenador en la mesilla, para después buscar algo de ropa en el armario.
Mi vista se posó en un top que me había comprado en Nueva York.
No me había vuelto a poner uno desde lo de Topper.

Elegí unos shorts de lo más normales y una camiseta oversize. No era el conjunto ideal para una fiesta, pero era el único tipo de ropa en la que me sentía cómoda.

Me vestí y Kiara me miró de arriba a abajo. Luego puso cara de en serio y yo rodé los ojos bromeando.

—Venga, vámonos—

Salimos de casa y nos metimos en la furgoneta. Llegamos a la playa pocos minutos después.
Bajamos del vehículo y llegamos a la zona en la que estaba todo el mundo.

El grupo se dispersó en segundos.
La playa estaba llena de gente y me era imposible volver a localizarles.

—Voy a por algo de beber—dijo JJ, el único que no se había alejado—¿Qué te apetece?—