Capítulo 34: Departamento de Misterios

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*No One POV*

La última MHB tuvo lugar a las dos de la tarde en el Gran Salón. A pesar de tener su cabeza en otro lado Alice pudo terminar su examen con la certeza de que lo aprobaría. Salió del Gran Salón y se acercó a una ventana cercana, donde Mia y John la esperaban. Minutos después, Cloe también salió del examen y los cuatro se dirigieron a su sala común, con la esperanza de recuperar todas esas horas de sueños que habían sido reemplazadas con horas de estudio.

Cuando Alice despertó y notó que estaba empezando a oscurecer, se dio cuenta de que tal vez había recuperado demasiadas horas de sueño. El círculo en su muñeca le había empezado a doler, por lo que se levantó de su cama sin despertar a sus amigas y bajó a la sala común, cubriéndose con la bata de Slytherin. Una vez allí, se sentó en el sillón junto a la ventana que estaba más alejado de todos y llamó a Jules.

-¿En que puede ayudar Jules, ama?

-Necesito que traigas la poción inyectable anti magia oscura. La escondí en mi habitación, debes tener cuidado de que no te escuche la abuela.

La elfina asintió y desapareció con un crac, para aparecer segundos después con un frasco que contenía una poción azul eléctrico. La chica tomó la jeringa que Jules le ofrecía y puso un poco de líquido en ella, para luego inyectarla en su muñeca.

-Jules se pregunta si su ama esta bien.

-Lo estoy, no te preocupes. Es solo que se activó la...

Alice no terminó su oración. Tres figuras caminando por los terrenos de Hogwarts llamaron su atención. Tocó el vidrió con su varita para usarlo de telescopio y pudo observar a Harry, Hermione y Umbridge entrar al Bosque Prohibido.

-¿Jules? ¿Ves lo que yo veo?

-Jules lo ve señorita.

-Vamos a investigar.

Ambas salieron de la sala común sin hacer mucho ruido. Jules chasqueó sus dedos y unas zapatillas aparecieron en los pies de Alice, así como la bata fue reemplazada por la campera de abrigo con el escudo de la casa Moon. La Ravenclaw le agradeció y la elfina movió sus orejas en señal de felicidad. 

Jules tocó un ladrillo en una pared cercana. Una puerta se abrió y reveló el túnel que las llevaría hasta los jardines sin ser vistas. Cuando llegaron al borde del Bosque la bruja sacó su varita y alumbró el camino. Jules iba adelante, rastreando la magia de los Gryffindor.

-¿Alice?

Lo que no esperaban era que junto a Hermione y Harry no estaba Umbridge, si no Ron, Ginny, Neville y Luna. Esta última era la que había formulado la pregunta.

-¿Qué haces aquí? ¿Cómo saliste del castillo sin que te vieran?- preguntó Harry, preocupado por su amiga.

-¿Estás bien? ¿Qué les pasó? ¿Porqué están todos lastimados? ¿Y porqué demonios estas cubierto de sangre?

Potter la puso al tanto de lo que había pasado, confiando en la chica y en su habilidad para guardar secretos. Alice pronto escuchó como Umbridge los había capturado a todos mientras él intentaba contactarse con alguien que estaba en peligro y como los demás habían tenido que escapar de Malfoy y sus amigos.

-Ese es el Malfoy que conozco- le susurró Moon a Jules, quien sonrió un poco. Sin embargo, el resto de la conversación le llegó como palabras sueltas. El círculo negro comenzó a dolerle de nuevo, indicando que la poción no había funcionado. Estaba por retirarse cuando la palabra Ministerio llegó a sus oídos. 

-... y los thestrals pueden llevarnos a todos hasta el Ministerio. Necesitamos seis...- estaba diciendo Luna.

-Siete.- interrumpió su compañera de casa. Todos la miraron

-De ninguna manera vas a ir tu también. Ni siquiera sabes a qué vamos al Ministerio.- dijo Harry, decidido, mientras Ron, Hermione y Ginny montaban en los thestrals con la ayuda de Luna, ya que ellos no podían verlos.

-No lo sé y no me interesa tampoco.- respondió la chica, acercándose más a Harry para que solo el pudiera escuchar.- Puedo ayudar.

-Alice...

-Si Voldemort esta de vuelta, quiero luchar. Por favor Harry.

El chico sonrió ante la determinación de Moon y la abrazó. Después de eso, ambos montaron en dos thestrals de los múltiples que habían llegado atraídos por el olor a sangre en las túnicas de Potter y Granger 

-¿Listos?

Todos asintieron. Alice le tendió su mano a Jules y la elfina subió con ella al caballo, agarrándose de la cintura de su ama una vez que despegaron. Los siete caballos negros tomaron altura y poco a poco se perdieron en el cielo casi nocturno.

Llegaron al Ministerio media hora después. Todo el edificio estaba en silencio y nadie dijo ni una palabra mientras tomaban el ascensor y se dirigían al noveno piso. Tampoco perdieron tiempo mientras corrían hacia el Departamento de Misterios.

-Ama Moon, su zapatilla.

Alice dejó de perseguir a sus amigos para atarse el cordón de su zapatilla. Cuando entraron por la puerta, estaban solas y ante ellas había una docena de puertas más.

-¿Y los demás?- preguntó la chica. La elfina estaba tan confundida como ella. Detrás de las chicas la puerta comenzó a girar, confundiéndose con otra docena de puertas iguales. Ninguna de las dos se inmutó.

-¿Quiere que Jules rastree su magia?

-No, está bien. Creo haber escuchado que iban a la sala de profecías, así que podemos dirigirnos ahí.- dijo Ali, abriendo una puerta determinada tras mirar las otras. Su elfina la siguió. Las profecías parecían brillar por cuenta propia, todas acomodadas en sendos estantes que llegaban hasta el techo. 

-¿Este lugar le trae recuerdos, señorita Ali? A Jules le trae recuerdos de la señorita Lucille Moon.

-También me trae recuerdos de ella.- respondió mientras caminaban entre las estanterías, Alice con la varita preparada y Jules en guardia, ambas buscando a los amigos de la bruja. Lo vieron todo desde lejos: el error de Harry, como tomaba la profecía en sus manos, la aparición de los Mortífagos. Cuando las estanterías comenzaron a explotar por los hechizos del ED, Moon tomó a Jules entre sus brazos y corrió hacia la séptima puerta. Al abrirla se encontraron en una especie de oficina.

-Jules, necesito que le informes a Dumbledore de lo que esta pasando. Que venga de inmediato. Se que puedes encontrarlo.- dijo la Ravenclaw, susurrando rápidamente.

-Pero ama Moon, la misión principal de Jules es protegerla...

-Lo sé. Pero eres la única que puede hacer esto. Prometo estar bien hasta que vuelvas por mí, ¿si? Vete ahora, antes de que nos quedemos sin tiempo. 

La elfina dudó y finalmente asintió. Alice se quedó sola en aquella habitación, pensando en la mejor manera de escapar. Conocía el Departamento de memoria, su madre había trabajado allí mucho tiempo y los inefables siempre la cuidaban mientras Eric trabajaba. Si encontraba las puertas correctas podría salir de allí en un segundo, pero no quería dejar a sus amigos solos. ¿Qué iba a hacer?

La puerta se abrió con un estruendo, sacando a Moon de sus pensamientos. Dos Mortífagos ingresaron, con sus varitas listas para hechizarla. Alice levantó la suya, tomándola fuertemente en su mano derecha. Los ojos de los Mortífagos se abrieron con sorpresa al ver el círculo negro.

-¿Classidy?

Mierda.

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Perdón por tardar tanto!!!!  Los últimos capítulos siempre se me hacen difíciles de escribir y la facultad me quita mi tiempo libre. Los próximos capítulos van a ser muy interesantes, se acerca el final y posiblemente una segunda temporada. Espero que les guste, muchas gracias por leer :)

Intercambio de Casa {Completa}Where stories live. Discover now