Intercambio de Casa {Completa}

Capítulo 23: Interrogatorio

*No One POV*

Los días que siguieron no fueron fáciles para Alice. Usar magia negra siempre traía consecuencias de una manera u otra y esta vez no fue la excepción. Tenía cambios de humor frecuentes, faltaba a clases y apenas dormía; pero sus compañeros lo atribuyeron a la inminente final de Quidditch. Sus amigas, sin embargo, insistían en que debería ir a la enfermería.

-¡Te dije que estoy BIEN!- gritó Alice aquella mañana en el Gran salón, luego de que Luna le preguntara como se sentía. Ningún encantamiento fue conjurado y ninguna varita fue levantada, pero la taza frente a Moon se levantó y salió volando hasta estrellarse contra la pared de la mesa de Gryffindor. Los profesores se levantaron de sus asientos y todos los alumnos de Hogwarts dirigieron su vista al grupo de amigas. Alice corrió su banco hacia atrás y salió caminando de Gran Salón, sin mirar a nadie. Cuando estuvo lo suficientemente lejos de todos, golpeó la pared con su puño. 

-Mierda.- dijo entre dientes, al sentir inmediatamente el dolor. ¿Qué había esperado? ¿Que la magia negra no se cobrara su precio? ¿Había valido la pena?

-¡Alice!- gritó Harry, corriendo hacia ella.- ¿Podemos hablar?

-No puedo ahora Harry, pero tengo una hora libre después del almuerzo. Podemos caminar por el lago, si estas libre.

-Claro, sí. Nos vemos en la entrada luego de comer.

Alice asintió y Potter se fue. No se dirigió a su clase de Pociones, si no que fue directamente a la biblioteca. Saludó a Madame Prince y caminó hasta el retrato de la vieja bruja. Dijo la contraseña y entró.

-Magia Oscura y como revertir sus efectos- leyó, tomando el libro negro del estante. Encontró la poción que necesitaba en el capítulo cinco. Podía pedirle algunos ingredientes a Snape y prepararla en la sala. Debía tomarse todos los días por una semana o no causaría ningún efecto. Sacó tinta, pluma y pergamino de su mochila para comenzar a transcribir las instrucciones. ¿Había valido la pena? ¿Usar magia oscura en el idioma mas poderoso para que Edgecombe tuviera la palabra "delatora" por siempre en su cara? La chica seguía en la enfermería, con la única compañía de Cho. Ravenclaw la consideraba una traidora, los miembros del ED la detestaban y todo Hogwarts sabía el porqué de su estado. ¿Había valido la pena?

-¿Para que necesita estos ingredientes, señorita Moon?- preguntó Snape, mirando la pequeña lista que le había dado la chica.

-Ciencia.

¿Había valido la pena? Se cuestionó una vez más, mientras subía al despacho de Umbridge. Los ingredientes le pesaban en la mochila, pero no le importaba. Snape se los había dado sin preguntar nada mas y le avisó que debía ver a la nueva directora. Tocó la puerta y esperó a ser llamada.

-Señorita Moon, bienvenida. Siéntese, por favor.- Alice hizo lo que le pedían, sin dejar de mirar atentamente a la mujer vestida de rosa- ¿Quieres algo? ¿Té? ¿Café? ¿Jugo de calabaza?

-Jugo estará bien, gracias.

Umbridge le sirvió un vaso dándole la espalda y luego se sentó en su sillón.

-Eres amiga de Potter, ¿verdad? Tal vez tu puedas decirme dónde está Dumbledore.- la chica no respondió y se llevó la taza a los labios, pero un olor dulce le impidió beber.- Vamos, Moon, seguro él te lo contó. Eres una Ravenclaw, eres inteligente. Piensa en tus intereses. Podrías ser un miembro valioso de la Brigada Inquisitorial, tener un poder superior en este castillo. Piénsalo. 

-Con todo respeto, profesora, soy una Ravenclaw y se donde reside mi lealtad. Como dijo, soy inteligente. Y mi inteligencia me dice que no me fíe de alguien que viste de rosa todo el tiempo y obedece órdenes que no entiende. No se donde está Dumbledore y no se lo diría si lo supiera. En cuanto a su Brigada, gracias pero no gracias. Rechacé el puesto de prefecta a principios de año, no necesitó unirme a un grupo de niños en busca de aprobación. Si eso es todo, planeo retirarme. Tengo deberes que completar.

Umbridge abrió y cerró la boca, sin respuesta. Alice dejó el vaso en el escritorio, tomó su mochila y salió del despacho.

-Jules.

La elfina apareció al instante e hizo una reverencia. Bajó las escaleras al lado de Alice.

-Voy a almorzar. ¿Puedes llevar mi mochila a la sala y poner todos los ingredientes que tiene adentro de mi baúl? También hay un pergamino con instrucciones, ponlo en un lugar seguro.  ¿Me la traes de nuevo después, con mi libro de Botánica? Estaré en el lago hasta que empiece la clase.

-Jules lo hará enseguida ama. Jules regresa en un momento.

¿Había valido la pena? Se preguntó por cuarta vez, mientras terminaba su comida y salía del Gran Salón para esperar a Harry en la entrada. Tenía que preparar una poción complicada con resultados variados para terminar con la locura que crecía en su cabeza a cada segundo. Seguramente no dormiría aquella noche.

-Moon.

La voz llegó como música a sus oídos. Se giró con los brazos cruzados sobre el pecho para encontrar a Draco Malfoy caminando hacia ella. Su cara, siempre llena de arrogancia, expresaba preocupación. Tomó a la chica de los hombros y la abrazó. Sin embargo, la insignia en su túnica que rezaba BI no pasó desapercibida para Alice.

-¿Estás bien? ¿Te hizo daño? Snape me avisó que estabas aquí y se que no estamos bien pero quería comprobar que no te hubiera lastimado y...

-¿Sabes?- le dijo la chica, cortante, separándose de él bruscamente- No te entiendo. Un instante eres el ayudante perfecto de Umbridge, siguiendo sus órdenes al pie de la letra y al instante siguiente estas aquí, preocupándote por mí y siendo una persona totalmente diferente de la que todos conocen. Al principio pensé que era extraño, luego ya no lo pensé. Hubo un tiempo en que fue incluso divertido. Pero ahora me esta volviendo loca. Nunca se lo que vas a hacer y me molesta a niveles que no puedes imaginarte. No te entiendo Malfoy y Salazar sabe que he intentado hac...

-¡ALICE!- se alteró Draco y la tomó del rostro, logrando que la chica dejara de hablar.- Me preocupo por ti- le dijo, mientras le retiraba un cabello suelto de la cara. Alice dejó de escuchar, su corazón latiendo fuerte por la cercanía de sus caras. Si se acercaba unos centímetros mas podría besarlo. Solo unos centímetros y sus labios estarían juntos.- Se que usaste magia negra con la chica Edgecombe.

Y así de rápido como apareció la idea del beso, se esfumó al procesar las palabras del rubio. Alice dio un  paso atrás, soltándose de las manos de Draco una vez más. Malfoy lo sabía. ¿Había valido la pena?

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Espero que les guste, gracias por leer :)