Intercambio de Casa {Completa}

Capítulo 8: Pelea y Desastre

*Alice POV*

Al llegar a la sala común, encontré a casi todo quito y sexto año ahí. Habían colgado un enorme cartel en los anuncios, con la letra de una canción. Era obvio que querían que todo Slytherin la aprendiera. 

-A Weasley vamos a coronar.- leí, en voz alta. Zabini se acercó a mí y me dio una insignia con forma de corona, que tenía escrita el título de la canción. -¿Qué es esto?

-Vamos a cantar la canción en el partido contra Gryffindor-dijo Draco Malfoy, apareciendo a mi lado y con una gran sonrisa.- Terminé de escribirla anoche. Será genial cuando pierdan por culpa de Weasley.- Lo observé, al igual que el esto de la sala. Todos estaban atentos a sus palabras, como si fuera un rey haciendo un anuncio.- Podemos cantarla en todos los partidos y...

-¿No te parece que le estas poniendo mucho empeño a esto?- lo interrumpí. Draco me miró, enojado.-  Es decir, pasaste todo el cuarto año pendiente de lo que hacía Harry y ahora estas haciendo hasta lo imposible para molestar a Weasley. Estas un poco, como decirlo, obsesionado con los Gryffindor.

-Eso no es verdad.

-Claro que sí. ¿Quieres que presente pruebas que fundamenten mi hipótesis?

Draco se me quedó mirando, al igual que casi todo Slytherin, sin entender. 

-Olvídalo.- dije, mientras dejaba la insignia en forma de corona sobre una mesa- Puedes cantar todo lo que quieras, Malfoy. Pero sólo estas demostrando que la única manera de vencer a los leones es con trampas.- concluí y salí de la sala en busca de mis amigas. Tres bolas de luz salieron de mi varita y al instante tres regresaron, susurrando la palabra biblioteca. Me alejé de la sala, de Draco Malfoy y de sus malditos intentos por humillar a Ron.

*No One POV*

Alice no fue a ver el partido. En su lugar, usó ese tiempo para ir a las cocinas a preparar la cena con los demás elfos. Jules y Dobby le contaban las últimas noticias, mientras los demás le indicaban como debía amasar la cena. Era común ver a los Ravenclaw cocinando cuando se sentían frustrados, aburridos o sólo deseaban apartarse del estudio por un momento. Alice iba a las cocinas durante todos los partidos de Quidditch que no eran de su casa y Jules iba al campo para ver jugar a su ama, a veces acompañada de Dobby.

Decir que el partido fue un completo desastre no es suficiente. La canción de los Slytherin logró poner nervioso a Ron, quien no atajó nada. Por suerte, Harry atrapó la Snitch y los leones se llevaron la victoria. Pero no todo terminó ahí. Algunas palabras de Malfoy desembocaron en una pelea, protagonizada por el rubio, Harry, George y por poco a Fred. El resultado final fue la expulsión del equipo de los Gryffindor para Potter y los gemelos Weasley, por parte de Umbridge, mientras Malfoy se tuvo que retirar a su sala común porque Harry le había quebrado la nariz.

-¿Porqué no vas con la enfermera? Seguro te arregla la nariz en un dos por tres.

-Déjame en paz, Pansy. Si quiero tu opinión sobre lo que tengo que hacer, la voy a pedir.

-Deberías ponerte hielo.-añadió, mirándolo parada desde el respaldar del sillón.

-¿Y de dónde se supone que voy a sacarlo?

La puerta de la sala se abrió con un chirrido. Por ella, ingresó Alice con una bolsa en las manos y un libro bajo el brazo. Bajo la atenta mirada de las serpientes, se acercó a Malfoy y se la tendió.

-Me enteré de lo que pasó. Ponlo en tu nariz, reducirá la hinchazón. Y, si quieres, puedo arreglarla después. Luna me enseñó cómo.

Draco tomó la bolsa llena de hielo que la chica le tendía, con sorpresa y se la puso sobre la nariz. El dolor que sentía se calmó poco a poco. La Ravenclaw sonrió y se sentó en un sillón.

-¿Alice?

La mencionada retiró su vista del fuego, en el que estaba concentrada, y miró a Zabini.

-¿Si?

-¿Es cierto que evitaste que Snape te castigara por violar el toque de queda anoche?

Alice acomodó sus lentes y asintió. Un murmullo de asombro recorrió la sala.

-Bah. Cualquiera podría haber hecho eso.- dijo Pansy, claramente celosa de que Malfoy aceptara cosas de Moon pero no de ella.

-¿Lo crees? Porque he leído sobre tu historial castigos y tienes demasiados con Snape. No parece que hayas evitado alguno.-dijo Alice, observando a la chica.

-¿Insinúas que no soy lo suficientemente lista? ¿Que no puedo librarme de Snape?

-Exacto. Que bien que lo entendieras rápido. ¿Sabes lo tedioso que es tener que explicarle algo simple a alguien demasiado lento para entenderlo?

Algunas sonrisas aparecieron en los rostros de los Slytherin ante las palabras de Alice. El águila mostraba al fin sus garras. Incluso Draco sonrió, complacido.

-Me niego a sentarme aquí y...

-Pansy, con todo respeto, pero estas parada.

 Ahora toda la sala estalló en una carcajada, Malfoy incluido.

*Alice POV*

Habían pasado unas horas desde que Pansy saliera corriendo escaleras arriba. Ahora, Draco se encontraba totalmente recostado en el sillón, con la bolsa de hielo aún en la nariz, mientras yo leía en el sillón a su lado. Todos en la sala se ocupaban de sus deberes, lejos de nosotros.

-San Potter. Todos creen que es tan perfecto, inteligente y...

-¿Tu lo crees?

Draco dejó de murmurar y me miró, sorprendido.

-¿Estabas escuchándome?

-Claro, estabas hablando. En Ravenclaw siempre escuchamos a los demás, por muy extraño que parezca. Las grades ideas pueden venir de pequeños murmullos.

-Eso es... fascinante.

-Entonces, ¿tú lo crees? ¿Que Harry sea perfecto?

-Es El Elegido, ¿no? Todo lo que hace... sus amigos... todo es tan... perfecto.

-Debe ser realmente encantador que te tachen de mentiroso y busca fama. No saber si haces lo correcto por ti o por los demás. Vivir a la merced de miles de rumores. Una vida envidiable.- dije, con sarcasmo.

-¿No crees que sea perfecto?- el tono de Draco declaraba sorpresa.

-No. Nadie lo es. Potter no es pura luz, tiene un lado oscuro. Fallas. Rompe reglas, vive castigado. No es exactamente un ejemplo a seguir. No todo el mundo lo quiere, ¿sabes? 

-¿Y tú? ¿Qué piensas exactamente de él?

Lo observé por un momento. Aquel Draco era muy diferente del que creí conocer todos estos años. Sonaba como si de verdad le interesara tener una charla conmigo, con alguien que tenía muy pocas cosas en común con él. Como si le interesara de sobremanera que alguien se atreviera a contradecirlo. 

-Creo que Harry Potter hace cosas incorrectas por las razones correctas. Y se necesita mucho valor, sabiduría, amabilidad y ambición para hacer eso.

Cerré mi libro y me levanté del sillón antes de que él pudiera responder. Había sido un día largo y extraño, sólo quería meterme en mi cama y dormir hasta que el sol me despertara. Mientras subía las escaleras, pensé en su pregunta. La verdad, creía que Harry era sólo un niño que estuvo en el lugar y momento equivocado. Y, ahora, el universo le hacia pagar por eso.

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Espero que les guste, gracias por leer :)