Capítulo 32: Ataque

4.4K 396 63
                                    

*Alice POV*

Salí del examen teórico de Astronomía con una gran sonrisa. Estaba segura de haber recordado todos los nombres de los planetas y las lunas correctamente, gracias al techo mágico de la sala común. Como el examen práctico tendría lugar a la noche, solo necesitaba preocuparme por una sola cosa: el hecho de que mi abuela supiese sobre mi "relación" con Draco. No estaba segura de que hacer. Tal vez debía decirle la verdad. Tal vez debía agarrar mi escoba y volar hasta Suiza. 

-¡Ali!

Giré al escuchar la voz de Mia, quien acababa de salir del examen. Esperé a que llegara a mi lado y hablamos unos minutos sentadas en una de las grandes ventanas hasta que Cloe salió de su examen. Juntas las tres, comenzamos a caminar.

-¿Les parece si vamos a la sala común? Podemos observar el techo y...

-Señorita Moon.

La voz del profesor Flitwick nos obligó a detenerse. El jefe de nuestra casa nos estaba esperando en el pie de la escalera.

-Lamento interrumpirla, pero debe seguirme por favor.

-Las veré más tarde- dije y tanto Mia como Cloe asintieron. Flitwick comenzó a caminar y lo seguí -¿Pasó algo señor?

-Tiene una llamada por Red Flu aprobada por el Ministerio. La directora ha indicado conveniente que utilice mi despacho.- respondió el profesor, parando frente a la puerta una vez que llegaron a su destino.- La esperaré aquí señorita Moon. Buena suerte.

-Gracias profesor- dije, mientras entraba al despacho. La puerta se cerró a mis espaldas y me acerqué intrigada a la chimenea. Tenía que ser importante si el Ministerio la había aprobado.

-Hola Li.

-¿Abuela?

Debí haberlo imaginado. La cara de mi abuela salía por la chimenea del profesor Flitwick, autorizada por el Ministerio y todo.

-Quería ir a verte, pero recordé que estas rindiendo las MHB y no quería quitarte mucho de tu tiempo de estudio. Conseguí esta llamada gracias a un antiguo amigo.

-¿Qué es tan importante que tenías que conseguir un permiso especial del Ministerio de la Magia? ¿Qué no podía esperar a que llegara a la casa a finales del año escolar?

-¿Malfoy?

Mierda.

-¿Alice?

Tal vez debería olvidarme de la escoba y salir corriendo del despacho. O tirarme por la ventana.

-¿Entonces es verdad? ¿Estas saliendo con Draco Malfoy?

-¿Si?

-¿Me estás preguntando o lo estás afirmando?

-Umm...

-Alice Moon Classidy- dijo su abuela, con un tono amenazador.

-Sí. Estoy saliendo con Draco. 

-¿Y se puede saber, en nombre de todos los fundadores de Hogwarts, en qué demonios estabas pensando? Un Malfoy, de entre todas las personas que hay en ese bendito castillo. ¿Tenías que elegir un Malfoy?

Me quedé en silencio. No estaba pensando, ese era el quid de la cuestión. Draco lograba acallar cada una de mis dudas y hacía que ignorara cada uno de mis pensamientos sensatos. Tal vez era amor. Posiblemente era una idea suicida.

-Abuela...

-Porque no creo que entiendas la gravedad del asunto. Si sigues con él, pronto querrá llevarte a su casa. Y sus padres te reconocerán. Y si ellos no lo hacen, alguno de sus amigos lo hará. Escucharán tu apellido, sumarán dos más dos y listo. Todo a la basura. Todo lo que hemos logrado estos años, desperdiciado porque te metiste con un Malfoy y...

-Abuela.- la corté, enojada.- ¿Crees que no entiendo lo grave qué es? Ya fui a la Mansión, ya estuve con Lucius y Narcissa, además de muchos de sus compañeros del Ministerio. Nadie me reconoció y no mencioné mi apellido ni una sola vez. Te puedo asegurar que tengo todo controlado. Y si tiene que saber porqué estoy con un Malfoy, debes conocer que es todo parte de mi investigación. No le he revelado nada sobre nuestra familia y no planeo hacerlo.

Claro que algunas cosas eran mentira, pues sí había mencionado mi apellido en aquella cena y Draco sí conocía parte de mi historia familiar. Pero mi abuela no tenía porqué saber eso. Se quedó en silencio un momento, meditando mis palabras.

-Bien.- me dijo, finalmente.- Voy a confiar en ti. Pero, Alice, un solo error e iré yo misma a buscarte a tu habitación y te traeré de la oreja hasta la casa, ¿entendido?

-Sí.

Y más me valía hacerle caso, si no quería llegar al siguiente año escolar con una oreja menos y un séquito de guardaespaldas. Tras mi afirmación, todo se calmó. Charlamos unos minutos más, me preguntó por mis exámenes y por mis amigas. Al terminar la llamada, salí del despacho y me despedí del profesor Flitwick. Corrí hasta mi sala común, decidida a ver el cielo estrellado, solo para encontrar que el techo era todo gris.

-Nada de trampas en los MHB. Orden de la directora- me dijo Mia, con los brazos cruzados e indignada. Suspiré mientras me hacía a la idea de que debería estudiar del mapa astral y no del hermoso techo estrellado bajo el cual había besado a Draco por primera vez. 


*No One POV*

-Pueden empezar- dijo el profesor Tofty a las once en punto y al instante todos los telescopios que se encontraban en la torre de Astronomía comenzaron a moverse. El examen consistía en completar un mapa astral en blanco y se podía ver una sonrisa en la cara de casi todos los Ravenclaw. Draco también sonreía, complacido por poder usar parte del conocimiento que había adquirido con las águilas y convencido de que aquel examen no lo desaprobaría. En la torre solo se oía el susurro del pergamino al cambiarlo de posición, el ocasional chirrido de algún telescopio al ajustarlo sobre su trípode, y el rasgueo de las plumas.

Sin embargo, el examen no se mantuvo tranquilo. La profesora Umbridge había elegido aquella noche para arrestar sigilosamente a Hagrid, acompañada de cinco Aurors. Los estudiantes de quinto año observaron por medio de sus telescopios cómo ocurría el ataque y cómo empeoraba la situación cuando la profesora McGonagall, intentado intervenir, era alcanzada por cuatro rayos aturdidores. Observando como Hagrid se defendía de sus atacantes, hasta los profesores habían olvidado que los alumnos estaban en medio de unas MHB. Alice miraba la escena con horror, una mano tapando su boca y otra sosteniendo con fuerza la mano de Mia. De los ojos de ambas chicas caían lágrimas silenciosas. Cloe, por su parte, observaba todo por su telescopio y murmuraba palabras de aliento hacia el semi gigante. La escena terminó con Hagrid corriendo con el cuerpo inconsciente de Fang en sus hombros y desapareciendo en la oscuridad, camino a las verjas del colegio, dejando atrás a los Aurors noqueados y a una enojada Umbridge.

-Humm..., cinco minutos, chicos.- anunció con voz débil el profesor Tofty.

Las tres Ravenclaw ya habían terminado su examen y usaron esos cinco minutos extra para hacer de cuenta que releían sus respuestas, cuando en realidad las tres estaban reviviendo en su mente los sucesos recién ocurridos. Salieron de la torre en silencio tras finalizar el examen, con sus telescopios bajo el brazo.

-Chicas...- susurró Alice, con la voz un poco tomada por el llanto.- ¿Cómo se lo diremos a Luna?

---------------------

Me disculpo una vez más por haber tardado tanto. Este capítulo me fue muy difícil de escribir y no estoy muy segura del resultado. En fin, espero que les guste y gracias por leer :)   


Intercambio de Casa {Completa}Onde as histórias ganham vida. Descobre agora