Intercambio de Casa {Completa}

Capítulo 12: Adiós, Slytherin

*Alice POV*

Mi última semana en Slytherin coincidió con la primera nevada del año. Ese día,el ambiente en la sala común había cambiado. Todos se abrigaban más de la cuenta y estaban muy emocionados. Decidí no prestarles atención, había aprendido en este mes que las serpientes eran reservadas con ciertas cosas. Si no estaba en el tablero de anuncios, no era de mi incumbencia.

-¿Todos listos?- preguntó un alumno de séptimo. Toda la sala gritó en afirmación y corrieron a la salida. Apenas levanté la vista de mi libro mientras todos corrían. 

-¿Aún no estás lista?

Miré a Draco sin entender. Él también estaba muy abrigado.

-¿Lista para qué?

-Te explico en el camino, sube a cambiarte.

Iba a protestar, pero la curiosidad me venció. Subí las escaleras hasta mi dormitorio y encontré, arriba de mi cama, ropa de Slytherin. Un buzo, una campera, una remera de manga larga, un gorro y guantes. Me cambié, conservando sólo mi pantalón largo negro, y me pregunté porqué me hacían usar ropa de la casa ahora, cuando pasé todo el mes con ropa de Ravenclaw. 

-Lista- dije, bajando las escaleras mientras sentía que una serpiente me había vomitado. 

Draco sonrió, claramente feliz de verme con ropa de Slytherin. Aparté la mirada, incómoda de repente. 

-Estas perfecta.- dijo, mientras me ponía una bufanda verde y plateada que tenía en sus manos.- Snape no tenía más bufandas, muchos de primer año las olvidaron. Puede que te quede grande.

-¿De quién es esta?

-Mía.- comentó, mientras terminaba de acomodarla. Cuando la bufanda tocó mi nariz, sentí su perfume. No tuve tiempo de emocionarme o irritarme, porque tomó mi mano y me llevó a los jardines.

-¿Qué hacemos aquí?- pregunté, mientras caminábamos.

-Es la primera nevada del año.

-¿Qué tiene que ver eso conmigo y con la ropa de Slytherin?

-Guerra de bolas de nieve.

-Voy a necesitar más información.

-Es una tradición de Slytherin. Guerra de bolas de nieve con la primera nevada. 

Cruzamos las puertas principales y el frío me pegó de lleno. Entendí el porque de la ropa de abrigo. Pude notar que todos los Slytherin se habían divido en pequeños grupos y se separaban por todo el jardín. El verde de su ropa resaltaba en la blanca nieve. Seguimos caminando hasta encontrarnos con Crabbe, Goyle, Zabini, Katy, Becca y Jenn.

-No entiendo.

-¿Qué cosa?- preguntó Katy.

-Si esto es una tradición de serpientes, ¿qué hago aquí?

-Aún eres una serpiente, al menos por tres días.- dijo Becca.

-La ropa es para que no te sientas fuera de tono. Y es más abrigada que las de las otras casas, porque las mazmorras son más frías.- acotó Jenn. Había notado eso.

-Y nos falta una en el equipo- agregó Malfoy, desinteresado. ¿Dónde estaba el Draco risueño de hace unos segundos? Va a volverme loca y no de una buena manera.

Nos callamos cuando un alumno de séptimo empezó a explicar las reglas para los de primer año, que consistía básicamente en no usar magia. 

Con la destreza de los Slytherin y mi experiencia en estrategia, no fue muy difícil ganar. Volvimos a la sala común cuatro horas más tarde, totalmente mojados, con grandes sonrisas, cantando y cargando el trofeo de primer lugar.

El último día en Slytherin, un domingo, las serpientes me sorprendieron con una pequeña fiesta de despedida. Hablé con muchos de ellos, aún vestida con la ropa que habían conseguido para mí. Tomamos cerveza de manteca, comimos y apostamos en algunos juegos. Para el final de la noche, casi todos habían asegurado que iban a seguir en contacto conmigo. Y realmente lo esperaba, porque eran estupendos. 

-¿Todo listo para volver mañana?- me preguntó Draco, una vez que quedamos solos en la sala.

-Algo así. ¿Dónde debería deja la ropa? ¿Y tu bufanda?

-Es tuya, un regalo. Para que nos recuerdes. Me recuerdes.

Le agradecí en silencio. Nos quedamos un rato en silencio junto al fuego, pero no era un silencio incómodo. 

-¿Te irás temprano mañana?

-Tengo la primer clase temprano, así que sí.

Otra vez silencio.

-Lamento no haber sido el mejor tutor, debería haberte mostrado más cosas sobre nosotros.

-En realidad esperaba que me dejaras varada a mi suerte, muriendo de frío en la noche y sin explicarme nada. Resultaste ser mejor tutor de lo que imaginé. Gracias por eso.

-De nada, supongo.

Nos quedamos en silencio una vez más. No teníamos mucho más que decir, porque no era una despedida. Aún teníamos clases juntos y él iría a mi casa en unos meses. Además, ¿porqué Draco Malfoy se estaría despidiendo de mí? Debería estar alegre de que me voy. 

-Voy a extrañarte Ali.

Y ahí estaba, el Draco que confundía todos mis sentidos. ¿Qué tenía este chico que me hacía quererlo y odiarlo al mismo tiempo? Por Merlín.

-Y yo a ti.

Malfoy sonrió, se levantó de su sillón y me dio las buenas noches. Subí las escaleras a mi dormitorio por última vez. Mañana todo tomaría su rumbo de vuelta y volvería a estar entre águilas. La actitud extraña de Draco aún me intrigaba, pero tenía tiempo para descubrir la causa. 

En este mes, aprendí que las serpientes no son lo que parecen ser y el rubio esta incluido en esa conclusión. Los Ravenclaw van a estar fascinados con toda la información nueva que voy a llevarles, siempre es bueno saber cosas de las otras casas. Me acurruco por última vez en las frías sábanas y cierro mis ojos, con la bufanda de Draco aún en el cuello.

Jules me despierta temprano al día siguiente, como lo hizo un mes atrás. Me entrega mi mochila con mis libros y le pido que lleve la ropa que los Slytherin me dieron junto con mi equipaje. Hace una reverencia y desaparece. Termino de cambiarme, usando mi túnica, y bajo a la sala común en silencio. La recorro una última vez antes de dirigirme a la puerta. 

-Adiós, Slytherin.- le digo a la nada, con un poco de pesar.

Abro la puerta de la sala y salgo, sin mirar atrás. La entrada se cierra a mi espalda mientras recorro el pasillo, lista para ir a mi primera clase del año con los Ravenclaw. Y lista también para olvidar mis sentimientos confusos por Draco Malfoy.

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Espero que les guste, gracias por leer :)