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Louis había despertado esa mañana con una sensación de tomar zumo de naranja, por lo que se levanto antes que su alfa y fue al naranjo para robar un par de sus frutos para realizar un jugo de naranja para saciar su antojo.

Cuando estaba sirviéndose el bendito jugo el rizado apareció en el marco de la puerta, le miró sentado en la mesa y le regaló una sonrisa que para Louis fue algo incómoda por lo que centro su mirada a sus manos sosteniendo el jugo.

Harry suspiró pesadamente y camino hasta la jarra con jugo natural para servirse un poco, luego de eso se sentó frente a Louis para beber un poco del zumo.

—hace mucho que no bebía zumo... —admitió el rizado y Louis le miró sin decir nada. Harry tomo aire— Louis, no puede evitarme para siempre...

—¿puede asegurarlo? —dijo molesto y el alfa dejo el ceño fruncido.

—vale, ¿quiere acabar con lo nuestro? ¿quiere romper el lazo? —preguntó algo dolido y Louis bajo la mirada— Sé que me equivoque, lo siento muchísimo pero no creo que esto no es un motivo para acabar con nuestro lazo...

—me hizo daño. —dijo de pronto el ojiazul— más que el físico, el psicológico...

—lo siento mucho bebé, en serio. —dijo poniéndose de pie dejando el zumo en la mesa, para acercar su asiento al lado de Louis para luego tomar sus manos y unirlas— me enfurecí por celos, perdí la razón... Mi alfa perdió la razón, bebé.

—Me recordó a mi padre. —dijo sincero y Harry vio su temor en la mirada. Sabía que no mentía y se sentía terrible al pensar que eso había causado su estúpida reacción.

—nunca seré como él. —le aseguró— Jamás me gustaría parecerme a alguien como él.

—la otra mañana se parecía. —dijo mirando los ojos de su alfa. — Y no quiero estar con un alfa como él, no quiero que mis hijos tengan un padre como él.

—bebé... —le besó los nudillos y el ojiazul trago duro, quería llorar. Luego del embarazo estaba tan sensible que todo parecía más intenso de lo que era realmente.— Yo no seré así, lo prometo. —le miró los ojos azules que parecían deseosos de derramar lágrimas — Yo estoy enamorado, no lo haré más pero por favor no me deje.

—no le dejaré... —dijo soltando un par de lágrimas que brotaron de sus ojos— Jamás podría.

—perdón... —dijo acercándose a sus labios para besarlos y tomar su cuello con las manos para acercarlo a él. Louis siguió llorando mientras que lo besaba.— bebé, perdoname.

—lo amo. —admitió el ojiazul alejándose de los labios del rizado para mirarle los ojos— yo lo amo, sólo a usted... A ningún otro alfa.

Dijo sincero y Harry sonrió mirándolo para luego volver a besarlo, pues lo sentía en su corazón. Louis le estaba diciendo la verdad, su alfa sentía como su corazón vibraba en el pecho.

Cuando se alejaron del beso el rizado le secó sus mejillas. El ojiazul le miro los ojos para luego elevar una de sus manos al moretón en el ojo derecho del rizado, lo acarició para luego acercar los labios a aquella marca.

—lo siento por esto. —dijo Louis— Eliot no debería haber...

—quiero que sea honesto con su alfa... —le interrumpió —  ¿qué ocurre con su hermano?

—no entiendo su pregunta... No pasa nada con Eliot. —dijo seguro.

—¿por qué él lo trata así? —Louis rodó los ojos— ¿Esta enamorado de usted?.

—Harry, Eliot es mi hermano. —le recordó.

—hay muchos hermanos que aman a sus hermanos. —dijo tranquilo— Yo quiero saber que ocurre, además Eliot es alfa, usted un omega.

Letras hasta ti. (L.s.) (a/b/o) {Terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora