Capitulo 27. ~ No vas a irte de casa. ~

Start from the beginning
                                    

Entraron a la habitación de nuevo, se recostaron en la cama y continuaron viendo la película hasta que después de acabarse, Lucia y Marta se marcharon cada una a casa antes de que fuera más tarde y quedaron en que se lo contarían todo después por Skype esa noche.

Carol había ido a por unos refrescos a la cocina cuando tocaron al timbre, los dejó encima de la mesita que había delante del sofá y fue a abrir la puerta, mirando por la mirilla antes de abrir como le había pedido Eva, un poco asustada. Blas la saludó con un corto beso en los labios y Álvaro le dio uno en la mejilla, para acto seguido preguntar:

-          ¿Dónde está Eva?

-          En el salón. – señaló Carol apartándose para dejarlo pasar, antes de que él entrara, le puso una mano en el pecho parándolo, lo miró seria y añadió: - No le grites mucho, por favor, ya está bastante asustada.

-          Tranquila, no pensaba gritarle. – le sonrió.

Ella lo dejó pasar con un pequeño suspiro y salió con Blas fuera, cerrando la puerta tras de sí.

-          ¿Qué tal has pasado el día? – preguntó sonriéndole.

-          Bien, ha sido un poco ajetreado. – sonrió, se giró hacia ella y la abrazó por la cintura -. Te he echado de menos. – dijo sonriendo.

-          Yo también. – se rió ella pasando sus brazos por su cuello, besándolo.

Álvaro entró en el salón y Eva se levantó del sofá rápidamente, mirándolo, esperando que le dijera algo.

-          Hola. – le sonrió nerviosa.

-          Hola, pequeña. – le devolvió la sonrisa, caminando hacia ella.

Cuando estuvo cerca de ella, le pasó las manos por los hombros, bajando por sus brazos, al hacer eso, Eva se retiró un poco.

-          ¿Qué tienes ahí? – le preguntó cogiendo su brazo con cuidado.

-          Nada, solo un morado…

-          Ya, un morado de su mano, ¿verdad? ¿Qué quería hacerte ese hijo de…? – preguntó apretando los dientes, respirando hondo.

Eva se sentó en el sofá, haciendo que se sentara a su lado, le contó todo lo que había pasado, detalladamente, incluida la conversación que había tenido con las chicas.

-          ¿Por qué quieres irte de casa? ¿No estás a gusto conmigo? – preguntó mirándola.

-          Claro que estoy a gusto contigo, después de tres años, vuelvo a sentirme protegida. – le dijo mirándolo fijamente a los ojos, cogiendo una de sus manos entre las suyas.

-          ¿Entonces? – preguntó confundido.

-          No quiero que tengas problemas. Toni cuando se enfada es peligroso, puede hacer cualquier locura que se le pase por la cabeza. – dijo seria, intentando contener el miedo que sentía al pensarlo.

-          Con mayor razón debes quedarte conmigo, Eva. ¿Dónde pensabas irte?

-          Carol me ha dicho que podría venirme aquí con ella sin ningún problema.

-          No vas a venirte aquí, Eva, vas a quedarte conmigo. – le dijo serio, entrelazando sus dedos con los de ella.

-          ¿Pero es que no entiendes que puede hacerte algo? – exclamó nerviosa.

¿Cuándo te volveré a ver?Where stories live. Discover now